Las autoridades francesas presentaron cargos preliminares contra Pavel Durov, CEO de Telegram, acusándolo de permitir supuestas actividades delictivas en la aplicación de mensajería.
Una corte francesa le prohibió a Durov salir del país, pero puede permanecer fuera de prisión preventiva si realiza un pago de 5 millones de euros (5.5 millones de dólares).
La decisión de imputarle cargos se produce cuatro días después de que las autoridades francesas detuvieran a Durov en el aeropuerto de París-Le Bourget, cuando llegaba en su jet privado procedente de Azerbaiyán.
Anteriormente, el miércoles, la fiscalía de París le había comunicado a The Epoch Times que un juez de instrucción había puesto fin a la detención policial de Durov y ordenado que el cofundador de Telegram compareciera ante la corte para que se siguiera estudiando su caso.
Telegram es una app que permite conversaciones uno a uno, chats de grupo y “canales” en los que pueden participar cientos de personas. A diferencia de WhatsApp, que tiene un límite de 1024 personas, los chats de grupo de Telegram permiten hasta 200,000 personas.
Investigación judicial
Laure Beccuau, la fiscal que autorizó la detención de Durov, publicó el 26 de agosto un comunicado en francés en el que enumeraba los 12 cargos que su investigación judicial había abierto “contra una persona anónima”.
Algunos de los cargos son complicidad en la explotación de una plataforma para transacciones ilegales, negativa a facilitar información a las autoridades, participación en pornografía infantil, tráfico de drogas y blanqueo de capitales por parte de una banda organizada.
El sistema judicial de Francia funciona de forma diferente al de muchos otros países, y los jueces desempeñan un papel más activo en la investigación y persecución a los delitos.
Telegram dice que sigue todas las leyes de la Unión Europea y que su moderación de contenidos está “dentro de los estándares de la industria y en constante mejora”.
El 26 de agosto, Telegram publicó un comunicado diciendo que Durov “no tiene nada que ocultar y viaja con frecuencia por Europa”.
Fundador de la empresa tecnológica Tech Yen califica las acusaciones como “suicidio económico”
El presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó en un post publicado el 26 de agosto en la plataforma de redes sociales X que Francia está “profundamente comprometida con la libertad de expresión y comunicación, con la innovación y con el espíritu emprendedor” y que seguirá estándolo.
“La detención del presidente de Telegram en suelo francés se produjo en el marco de una investigación judicial en curso. No se trata en ningún caso de una decisión política. Corresponde a los jueces pronunciarse al respecto”.
La detención despertó la preocupación de algunas empresas tecnológicas.
Andy Yen, fundador y CEO de Proton, conocida por su servicio de correo electrónico cifrado Proton Mail, escribió en X que los “cargos no sellados contra Durov son una locura”.
“Si esto continúa, no veo cómo los fundadores de tecnología podrían viajar a Francia, y mucho menos contratar en Francia. Esto es un suicidio económico y está cambiando rápida y permanentemente la percepción de fundadores e inversores”, escribió.
Chris Summers contribuyó a este reportaje
Con información de Reuters y Associated Press
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