WASHINGTON —La Administración Biden anunció el 24 de junio la prórroga de la moratoria nacional sobre desalojos por un mes más para apoyar a los inquilinos y evitar las ejecuciones hipotecarias. La moratoria actual, impuesta por los CDC en respuesta a las dificultades causadas por la pandemia, debía expirar el 30 de junio.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades prorrogaron la moratoria de desalojos del 30 de junio al 31 de julio, calificándola de «la última prórroga». Siguiendo las orientaciones de los CDC, la Casa Blanca anunció varias medidas para ayudar a los gobiernos estatales y locales a evitar una «avalancha de desalojos» cuando la moratoria termine el mes próximo.
Según la Casa Blanca, hay más de 46,000 millones de dólares disponibles para el Programa de Asistencia de Emergencia para el Alquiler (ERA, por sus siglas en inglés) que podrían utilizarse para ayudar a los inquilinos y propietarios vulnerables.
Por lo tanto, los gobiernos estatales y locales «deben mejorar» en mover este dinero a las personas necesitadas, dijo la Casa Blanca en una hoja informativa.
«Pedimos a todos los beneficiarios estatales y locales de la ayuda de emergencia para el alquiler que aceleren sus esfuerzos, que amplíen sus esfuerzos para hacer llegar los fondos a los inquilinos y propietarios necesitados lo más rápidamente posible», dijo un alto funcionario de la administración a los periodistas durante una llamada.
«La decisión de los CDC reconoce que era necesario un último plazo de 30 días para garantizar que pudiéramos tomar todas las medidas posibles para asegurar que la moratoria no condujera a una avalancha de desalojos», añadió.
Alrededor de 6 millones de familias de viviendas alquiladas están atrasadas en el pago de sus rentas, según la Oficina para la Protección Financiera del Consumidor.
La administración anunció una serie de medidas para evitar los desalojos masivos tras la moratoria.
Como parte del esfuerzo, la administración está instando a los tribunales estatales y locales a «adoptar prácticas para evitar los desalojos» para impedir que se apresuren a desalojar y fomentar la mediación entre inquilinos y propietarios.
Además, el Departamento del Tesoro está permitiendo que los fondos destinados a los gobiernos estatales y locales y a la ayuda de emergencia para el alquiler se utilicen para financiar planes para evitar los desalojos, incluidos los servicios de asesoramiento y jurídicos.
Como parte del plan para evitar los desalojos, la Casa Blanca también organizará una cumbre en internet de «líderes gubernamentales, judiciales, legales y comunitarios de 50 ciudades» para desarrollar soluciones y planes de acción específicos de la comunidad para ayudar a los inquilinos y propietarios.
Hay casi 110 millones de estadounidenses que viven en hogares de alquiler y entre 19 y 23 millones de ellos corren el riesgo de ser desalojados antes del 30 de septiembre, según un estudio del Programa de Seguridad Financiera de Aspen.
En un esfuerzo por proteger a los propietarios de viviendas, tres agencias federales que respaldan las hipotecas también ampliarán su moratoria de ejecución hipotecaria durante un mes más. La moratoria para las hipotecas respaldadas por Fannie Mae y Freddie Mac también se extenderá hasta el 31 de julio.
Las agencias federales también seguirán permitiendo que los propietarios de viviendas se acojan a la indulgencia relacionada con el COVID-19 hasta el 30 de septiembre de 2021. Los propietarios de viviendas con hipotecas respaldadas por Fannie Mae o Freddie Mac también seguirán siendo elegibles para la indulgencia relacionada con el COVID-19, según la Casa Blanca.
En julio, las agencias federales harán un anuncio adicional para ofrecer opciones de reducción de pagos a los prestatarios.
El Congreso promulgó el año pasado una moratoria nacional sobre los desalojos y prorrogó su vigencia en varias ocasiones.
Mientras que los partidarios de la moratoria afirman que ayuda a las personas con dificultades para pagar su alquiler durante la pandemia, los opositores sostienen que el mandato es inconstitucional y ejerce una presión indebida sobre los propietarios y caseros.
A principios de esta semana, una coalición de 44 legisladores demócratas de la Cámara de Representantes envió una carta a los CDC y al presidente Joe Biden en la que solicitaban que se ampliara y reforzara la moratoria.
Mientras tanto, la moratoria se ha enfrentado a la oposición de los propietarios y de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios, que presentó una demanda de emergencia ante la Corte Suprema a principios de este mes. El caso está actualmente pendiente.
«Los propietarios han estado perdiendo más de 13,000 millones de dólares cada mes bajo la moratoria, y el efecto total de la extralimitación de los CDC puede alcanzar hasta 200,000 millones de dólares si sigue en vigor durante un año», decía su petición de emergencia.
«Estamos muy decepcionados», dijo Charlie Oppler, presidente de la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios, en un correo electrónico en respuesta al anuncio de los CDC.
«El sector inmobiliario ha expresado recientemente nuestra oposición unida a la prórroga de la moratoria, que perjudica a los pequeños proveedores de viviendas y amenaza la estabilidad del mercado. Seguiremos presionando para que las reformas mejoren el despliegue de las ayudas al alquiler, que siguen siendo la mejor solución».
Con información de Jack Phillip.
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