La Fundación de la Policía de Atlanta anunció que dará esta semana USD 500 a cada agente de policía de Atlanta para mostrar su agradecimiento a raíz del sentimiento anti-policía y por las renuncias.
«Sentimos que era importante en este momento porque la moral está en ese nivel, hay rumores de que otros oficiales van a renunciar, y simplemente no queremos perder buenos policías», dijo Dave Wilkinson, de la Fundación de la Policía de Atlanta, en una entrevista el jueves.
Wilkinson agregó que comprará 20 vehículos policiales para reemplazar los que fueron destruidos durante los disturbios de hace varias semanas que se desencadenaron por la muerte de George Floyd, un hombre negro que murió bajo la custodia policial de Minneapolis.
«Tenemos miedo de perder buenos policías, nuestra ciudad pierde buenos policías», dijo Wilkinson a WSB-TV en una entrevista en video. «Todo esto es para demostrar que apreciamos el sacrificio que estos oficiales han hecho durante este tiempo».
La Fundación de la Policía de Atlanta dijo que el dinero se recaudó a través de colectas de fondos y que no se utilizarán los fondos de la ciudad para estos bonos.
La alcaldesa demócrata de Atlanta, Keisha Lance Bottoms, y el jefe de policía interino Rodney Bryant han dicho que la moral de los agentes de la policía está baja, en parte debido a las protestas en la ciudad y en todo el país.
Bryant dijo a The Associated Press que los oficiales seguían ausentándose al trabajo por enfermedad el jueves, atribuyendo las que las ausencias al trabajo eran por el creciente sentimiento anti-policía. Él señaló que los oficiales también están trabajando en turnos largos durante los cuales se han enfrentado a la hostilidad de los manifestantes que incluso los han agredido físicamente.
“Algunos están enojados. Algunos tienen miedo. Algunos están confundidos sobre lo que hacemos en este espacio. Algunos pueden sentirse abandonados”, dijo Bryant. «Pero estamos allí para asegurarles que continuaremos avanzando y superando esto».
Bryant señaló que «en algún momento, la gente se cansa, lo reconozco y están físicamente exhaustos (…) Definitivamente vamos a superarlo, y estoy seguro de que veremos que ya no habrá más ausencias por enfermedad y vuelve a la normalidad, promedio».
A principios de esta semana, después de que algunos oficiales no se presentaron a trabajar, el Departamento de Policía de Atlanta trató de asegurar a las personas que las llamadas al 911 todavía estaban siendo respondidas.
“El Departamento de Policía de Atlanta puede responder efectivamente a las llamadas al 911. No dude en llamar si tiene una emergencia», decía una publicación en Twitter del departamento.
La oficina restó importancia a las ausencias por enfermedad, escribiendo que «las insinuaciones de que varios oficiales de cada zona habían renunciado al trabajo eran incorrectas» y que el departamento tiene suficientes recursos para manejar las operaciones.
Bottoms le dijo a WSB-TV que mientras ella apoya al departamento de policía, hay un «cambio en este país».
“No se trata de la oficina del alcalde contra nuestros oficiales de policía. No se trata de nuestras comunidades contra nuestros policías. Se trata de que seamos reflexivos sobre cómo continuamos trabajando juntos como un todo”, comentó Bottoms.
El aparente aumento en las ausencias por enfermedad se produjo luego de que el exoficial Garrett Rolfe fue acusado del asesinato a tiros de Rayshard Brooks, quien se resistió al arresto antes de robar la pistola paralizante del oficial y le disparara a Rolfe.
“Temiendo por su seguridad y la seguridad de los civiles a su alrededor, el oficial Rolfe dejó caer su pistola paralizante y disparó su arma de servicio a la única parte del Sr. Brooks que estaba en frente, la espalda del Sr. Brooks”, dijo el abogado de Rolfe en un comunicado.
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