El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, dijo el lunes que los nadadores en las playas de la ciudad que no cumplan con las restricciones de COVID-19 serían retirados del agua por las autoridades que imponen el cumplimiento.
En una conferencia de prensa sobre COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), de Blasio dijo que «cualquiera [que] intente meterse en el agua, será sacado del agua».
Al llamar al brote «la peor crisis de atención médica en la historia de esta nación», el alcalde dijo que, si bien se aplicaban las reglas de distanciamiento social, no habría «natación, ni socorristas, ni fiestas, ni barbacoas» en las playas de la ciudad.
Él dijo que el incumplimiento de las restricciones puede significar una aplicación más estricta, incluida la posibilidad de poner barreras policiales en las playas, lo que el alcalde dijo que no se hizo para dar a las personas la oportunidad de cumplir voluntariamente.
«Si comenzamos a ver personas que se congregan, si comenzamos a ver a personas nadando, si comenzamos a ver personas haciendo cosas que literalmente van en contra de todo lo que hemos hablado en términos de salud y seguridad, entonces tomaremos medidas adicionales», dijo en declaraciones separadas el domingo.
Si bien no especificó sus expectativas sobre cuándo volverían a abrir las playas de la ciudad, en declaraciones separadas en una conferencia de prensa el domingo, de Blasio dijo que permanecerían cerradas en el «corto plazo», pero que esto podría cambiar «más adelante en el verano».
Al explicar la estrategia para mantener las playas cerradas durante el fin de semana del día de los caídos, el inicio tradicional de la temporada de playa dijo que no se trata solo de personas que se congregan frente al mar, sino que se conglomeran en las rutas de trenes y otras formas de transporte público.
“Imagina la escena en el tren A con gente saliendo a los Rockaways o cualquier otro tren donde la gente vaya a la playa o los autobuses. No vamos a permitir que ocurra esa aglomeración”, dijo.
“Estamos muy lejos de estar fuera del peligro aquí en la ciudad de Nueva York. Seguimos siendo el epicentro hasta que estemos a salvo, no hay playas abiertas «, dijo en declaraciones separadas a Fox News el domingo.
Mientras tanto, el gobernador Andrew Cuomo anunció planes en una conferencia de prensa del 15 de mayo para abrir playas estatales durante el fin de semana del día de los caídos el próximo viernes.
Él dijo que las playas se limitarían al 50 por ciento de ocupación y que las concesiones permanecerán cerradas.
Cuomo señaló que los gobiernos locales que poseen frentes de agua tendrán la autoridad para tomar sus propias decisiones sobre la reapertura.
El lunes, Cuomo dijo que el oeste de Nueva York, incluida la ciudad de Buffalo, cumplió con los objetivos de contención COVID-19 del estado y puede comenzar a reabrir su economía.
Los hospitales podrán programar cirugías electivas a medida que la región ingrese a la primera fase de reapertura el martes, pero las reuniones como servicios religiosos y eventos deportivos aún estarán prohibidas, dijo Cuomo.
Si bien la mayor parte del estado de Nueva York comenzará a reabrir este fin de semana, es probable que pasen semanas antes de que la ciudad de Nueva York y sus suburbios cumplan con los parámetros para la reapertura.
Cuomo dijo que 106 personas murieron de COVID-19 en todo el estado el domingo, el número más bajo desde finales de marzo.
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