La alcaldesa de Rochester, Nueva York, prometió el domingo que el departamento de policía de la ciudad se someterá a una serie de reformas cuando las protestas por la muerte de Daniel Prude, ocurrida en marzo, entraron en su quinta noche.
En «las próximas semanas, meses y años», el departamento verá una serie de reformas, dijo la alcaldesa de la ciudad, Lovely Warren. La intervención de situaciones de crisis se trasladará fuera del departamento de policía y su presupuesto y equipo se trasladará al departamento de servicios de juventud y recreación de Rochester, dijo Warren.
El equipo de intervención de crisis tiene actualmente diez empleados, según Rochester City Newspaper.
La transferencia se produjo pocos días después que la alcaldesa anunció la suspensión inmediata de los siete policías de Rochester implicados en el arresto de Prude, de 41 años, el 23 de marzo.
Los parientes de Prude habían llamado a la policía para pedir ayuda cuando estaba sufriendo un episodio mental. Los oficiales lo encontraron corriendo desnudo en la calle. Inicialmente él cumplió cuando los oficiales le pidieron que pusiera sus manos en la espalda para ser esposado. Más tarde, Prude se sentó y empezó a escupir a los policías mientras les decía que había contraído el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), también conocido como el nuevo coronavirus.
Los oficiales de policía le pusieron a Prude un protector de escupitajos y lo inmovilizaron en el suelo boca abajo durante unos dos minutos para sujetarlo, después de lo cual dejó de respirar. El hombre recibió reanimación cardiopulmonar en la escena y fue llevado al hospital. Murió siete días después, el 30 de marzo, tras quitarle el soporte vital.
Un médico forense concluyó que la muerte de Prude fue un homicidio causado por «complicaciones de asfixia en el entorno de la restricción física». En el informe se enumera el delirio excitado y la intoxicación aguda por la droga recreativa fenciclidina, o PCP, como factores que contribuyeron a su muerte.
«Teníamos un ser humano necesitando ayuda, necesitando compasión. En ese momento tuvimos la oportunidad de protegerlo, de mantenerlo caliente, de ponerlo a salvo, de comenzar el proceso de curarlo y de levantarlo», dijo Warren durante una conferencia de prensa el domingo. «Tenemos que hacernos cargo del hecho de que en su momento no lo hicimos».
La oficina de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, se hizo cargo de la investigación de la muerte de Prude en abril. James anunció el sábado que un gran jurado será designado como parte de la investigación de la muerte de Prude. La investigación está en curso.
El jefe de policía, La’Ron Singletary, dijo a los periodistas el domingo que está a favor de las reformas del departamento y está trabajando con expertos y clínicos en conseguir servicios ambulatorios para personas con problemas de salud mental para que los pongan en contacto con la policía reiteradamente.
El domingo por la noche se registraron manifestaciones pacíficas en la ciudad en las que aproximadamente 1000 manifestantes marcharon al Edificio de Seguridad Pública de la ciudad. No se hicieron arrestos, según la Policía de Rochester.
«El Departamento de Policía de Rochester quiere agradecer a nuestros socios de la policía local y estatal por su ayuda y un agradecimiento especial a la Dra. Myra Brown y a un grupo de ancianos de la comunidad por mantener la protesta de forma segura y permitir que la voz de todos sea escuchada», informó el departamento en la declaración después de la protesta del domingo por la noche.
The Rochester Police Department would like to thank our local and state law enforcement partners for their assistance and a special thanks to Dr. Myra Brown and a group of community elders for keeping the protest safe and allowing everyone’s voice to be heard. pic.twitter.com/YjQWa3ELY3
— Rochester NY Police (@RochesterNYPD) September 7, 2020
La noche anterior se produjo cierta violencia, con once manifestantes arrestados. Tres policías tuvieron que ser atendidos en hospitales por las heridas sufridas cuando violentos manifestantes les lanzaron «proyectiles y dispositivos incendiarios».
Los nombres de los siete oficiales detenidos recientemente y suspendidos son: sargento Michael Magri, oficial Josiah Harris, oficial Paul Ricotta, oficial Francisco Santiago, oficial Andrew Specksgoor, oficial Troy Taladay, y oficial Mark Vaughn. El jefe del sindicato de la Policía sostuvo que los oficiales estaban siguiendo su formación.
Incluye información de Mimi Nguyen Ly y The Associated Press.
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