Citando el progreso en relación al manejo del COVID-19, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo el lunes que algunas regiones del norte del estado podrían estar listas para reiniciar la actividad económica el fin de semana.
«Es una nueva fase emocionante», dijo Cuomo en una reunión informativa diaria en Rochester. «Todos estamos ansiosos por volver al trabajo. Nosotros queremos hacerlo de manera ingeniosa, queremos hacerlo de manera inteligente, es decir queremos hacerlo».
Señalando datos alentadores, Cuomo dijo que hubo 161 nuevas muertes en 24 horas debido a COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino). Es la menor cifra de muertes diarias desde el 27 de marzo. También señaló una reducción en el número de hospitalizaciones e intubaciones.
«Así que nosotros vemos que todas las flechas apuntan en la dirección correcta», destacó Cuomo. «Ha sido una crisis, y ha sido dolorosa».
«En muchos sentidos, desde mi punto de vista, estamos al otro lado de una montaña», añadió, refiriéndose a la forma de la curva de la pandemia que aumenta a medida que el número de casos diarios crece, llega a un pico y luego disminuye a medida que esos números se reducen.
El gobernador atribuyó la disminución de los casos a la respuesta del 22 de marzo, que implicó la imposición de restricciones en todo el estado, cuando el área de la ciudad de Nueva York se convirtió en un importante foco de virus.
Él fijó el 15 de mayo como la fecha límite para la reapertura, con la advertencia de que el estado «abriría cuando estuviera listo», lo que significa que los números de COVID-19 estarían mostrando un descenso en línea con las directrices federales junto con un programa de test y rastreo.
«Suena como una simple pesadilla logística, nunca antes realizada», advirtió, describiendo el proceso de rastrear las infecciones hasta los individuos enfermos y de aislarlos para prevenir una mayor propagación del mortal bicho.
Tres regiones del norte del estado de Nueva York han cumplido todos los criterios para abrir alguna actividad comercial después del 15 de mayo, señaló, estas son Finger Lakes, el valle Mohawk y Southern Tier.
Otras regiones podrían seguir poco después, pero en cada caso, los funcionarios «podrán desconectar o frenar el aumento de la actividad» ante un resurgimiento del virus.
Cuomo esbozó siete medidas que las regiones deben cumplir para poder reabrir, incluyendo el refuerzo de los números de test y asegurar los niveles mínimos de la capacidad hospitalaria:
- Una disminución de 14 días de hospitalizaciones, o menos de 15 hospitalizaciones, medido en un promedio de 3 días.
- Reducción de 14 días de las muertes hospitalarias, o menos de 5 nuevas muertes diarias, medido en un promedio de 3 días.
- Menos de 2 nuevas hospitalizaciones por cada 100,000 residentes, medido en un promedio móvil de 3 días.
- Un umbral del 30 por ciento del total de camas de hospital disponibles.
- Un umbral del 30 por ciento de las camas disponibles en la unidad de cuidados intensivos.
- Una frecuencia de test de por lo menos 30 por cada 1000 residentes, medido en un promedio de 7 días de nuevas pruebas por día.
- Tener 30 trazadores de contacto por cada 100,000 residentes.
«Hemos estado haciendo más test que cualquier otro estado de Estados Unidos de América», dijo el gobernador, explicando que como nación, Estados Unidos está haciendo más test per cápita que cualquier otro país.
«Pero esto se necesita en todas las regiones», destacó. «Si el Distrito Capital tiene suficientes test no ayuda a Finger Lakes. Hay que tener suficientes test y suficiente rastreo en Finger Lakes».
La reapertura tendría lugar en cuatro fases, anunció Cuomo la semana pasada. Los primeros negocios en reiniciarse son la construcción, la manufactura, partes de la cadena de suministro al por mayor, y la venta al por menor con recogida en la acera.
«Son los más esenciales, con el menor riesgo», dijo.
La semana pasada, Cuomo además firmó una orden ejecutiva que le da la autoridad de fijar una nueva fecha de vencimiento en el cierre del estado, conocida como NY en Pausa, actualmente fijada para expirar el 15 de mayo.
«La Orden Ejecutiva de ayer extendió la autoridad legal subyacente para la Orden de Emergencia, pero no cambió el texto de ninguna de las directivas en NY EN PAUSA y por lo tanto la fecha de expiración del 15 de mayo todavía está vigente hasta nuevo aviso», indicó la secretaria de la gobernadora, Melissa DeRosa, en una declaración.
«En ese momento, se emitirán nuevas directrices para las regiones basadas en la métrica esbozada por el gobernador Cuomo a principios de esta semana», añadió.
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