El renombrado autor, ambientalista y activista del clima Michael Shellenberger, se ha disculpado formalmente al público por el «susto del clima» que según él afirma, han forzado los alarmistas sobre el público, los últimos 30 años.
Siendo defensor del ambiente por 30 años y un activista climático por 20, Shellenberger, fue invitado anteriormente a dar testimonio sobre asuntos climáticos al Congreso de EE.UU. (pdf), y dice que ha servido como revisor experto de un reporte de evaluación del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC). Sin embargo, ahora dice que se siente obligado a disculparse «por lo tan mal que hemos engañado los ambientalistas al público».
«Climate change is happening. It’s just not the end of the world. It’s not even our most serious environmental problem. I may seem like a strange person to say this. I’ve been a climate activist for 20 years & an environmentalist for 30» – @ShellenbergerMD https://t.co/9knkM6K6AP
— Claire Lehmann (@clairlemon) June 30, 2020
Shellenberger hizo su disculpa en el sitio web de Forbes el 28 de junio, aunque el artículo ya no está disponible. En una declaración enviada por correo electrónico a The Epoch Times, la compañía escribió que «Forbes requiere que sus contribuidores adhieran a estrictas pautas editoriales. La historia no siguió esas pautas y fue removida».
Sin embargo, la disculpa de Shellenberger fue publicada el 30 de junio, por la revista online Quillete, la cual dice apuntar a proveer una plataforma para «el libre intercambio de ideas». El artículo puede verse allí.
«Soy culpable de alarmismo tanto como cualquier otro ambientalista», escribe Shellenberger en su artículo. «Durante años, me referí al cambio climático como una amenaza ‘existencial’ a la civilización humana y la llamé una ‘crisis'». Sin embargo, Shellenberger ahora dice que el cambio climático «no es ni siquiera nuestro problema ambiental más serio».
¿Qué está sucediendo realmente a nuestro clima?
Según Shellenberger, «el cambio climático está sucediendo. Es solo que no es el fin del mundo». En ese sentido, la actividad humana no está causando extinción en masa, ni el cambio climático está empeorando los desastres naturales, afirma.
Shellenberger dice que al contrario de las aseveraciones de «la campaña de desinformación del clima», los incendios han ido declinando en el mundo en los últimos 17 años, y que la actual causa de los incendios forestales en California y Australia es el acumulamiento de combustible en madera en los bosques. Él dice que al igual que en Estados Unidos, las emisiones de carbono están disminuyendo en la mayoría de las naciones ricas, y que Francia, Alemania y Reino Unido han visto caer sus emisiones desde los 70.
Más aún, el factor más crítico para la supervivencia humana en la Tierra —producir suficiente comida para alimentar a la humanidad a medida que sigue aumentando la población— se volverá más fácil mientras aumenten suavemente las temperaturas. La amenaza más grande a la amplia variedad de especies animales en la Tierra es la pérdida de hábitat y la caza, dice.
Shellenberger dice que estas afirmaciones provienen de los mejores estudios científicos disponibles, incluyendo estudios aceptados por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el IPCC, entre otros.
El autor dice que se sintió obligado a escribir un libro cuando sintió que el alarmismo climático había ido demasiado lejos. Cita como motivaciones la declaración de la congresista Alexandria Ocasio-Cortez (D-N.Y.) quien dijo que «El mundo se va a acabar en 12 años si no abordamos el cambio climático» y los dichos del grupo ambientalista británico Extinction Rebellion de que el «Cambio Climático Mata Niños».
El libro de Shellenberger, «Apocalipsis Nunca: Por qué el alarmismo ambientalista nos daña a todos», hace afirmaciones tales como que las fábricas y los métodos de cosecha modernos son claves para el progreso ambiental y humano, y que el 100 por ciento de energías renovables «requeriría aumentar la tierra usada para la energía del 0.5 de hoy al 50 por ciento».
El libro también afirma que el vegetarianismo reduce las emisiones de gas invernadero individual «en menos de un 4 por ciento».
¿Qué hay detrás de la ideología del clima?
Shellenberger dice que la ideología detrás del alarmismo climático es una versión moderna del malthusianismo, nombrado por el economista británico del siglo 19, Thomas Malthus. Según Shellenberger, Malthus creía que «había demasiada gente pobre allí fuera (…) y que lo ético era dejarlos morir». De hecho, Malthus recibía bien a las plagas y las hambrunas para reducir la población de los pobres en necesidad.
Shellenberger afirma que, no obstante, sigue teniendo esperanza para el futuro. «Las naciones se están revirtiendo abiertamente al interés propio y alejándose del maltusianismo y neoliberalismo», dice. «La evidencia es abrumadora de que nuestra civilización de alta energía es mejor para la gente y la naturaleza, que la civilización de baja energía a las que los alarmistas climáticos les gustaría que regresaramos».
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