El presidente Joe Biden habló con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el líder mexicano dijo que la Casa Blanca enviaría USD 4000 millones a los países centroamericanos.
López Obrador dijo el sábado que Biden prometió miles de millones de dólares para ayudar al desarrollo en Guatemala, Honduras y El Salvador y detener la migración desde Centroamérica hacia México.
Según un resumen de la llamada de la Casa Blanca, los dos hablaron sobre una revisión de la «cooperación bilateral en una variedad de cuestiones bilaterales y regionales, en particular la migración regional», y Biden «describió su plan para reducir la migración abordando sus causas fundamentales, aumentando la capacidad de restablecimiento y las vías de inmigración alternativas legales, mejorando el procesamiento en la frontera para adjudicar solicitudes de asilo”, y revirtiendo algunas de las políticas “draconianas” de la administración Trump.
“Los dos líderes acordaron trabajar en estrecha colaboración para detener el flujo de migración irregular a México y Estados Unidos, así como para promover el desarrollo en el Triángulo Norte de Centroamérica”, dice el comunicado. “También reconocieron la importancia de la coordinación para combatir la pandemia del COVID-19”.
En junio de 2019, el presidente mexicano firmó un acuerdo con el expresidente Donald Trump bajo el cual México acordó tomar medidas para frenar la inmigración ilegal. Trump, a cambio, retiró la amenaza de imponer aranceles a los productos mexicanos.
Durante los últimos meses, López Obrador se había negado a reconocer a Biden como presidente electo y también defendió a Trump luego de que fue bloqueado por Twitter, Facebook y otras plataformas de redes sociales.
“No me gusta que a nadie lo censuren y le quiten el derecho de transmitir un mensaje en Twitter o en Facebook. No estoy de acuerdo con eso, no acepto eso”, dijo López Obrador, según informó el Associated Press a principios de este mes luego de que se suspendieran las cuentas de Trump.
“¡Cómo se va a censurar a alguien! ‘A ver: Te castigo porque yo, como juez de la Santa Inquisición, considero que lo que estás diciendo es perjudicial’”, dijo el presidente de México. “¿Dónde está incluso la norma?, ¿dónde está la legislación?, ¿dónde está reglamentado? Eso es un asunto de Estado, eso no es un asunto de las empresas”.
Mientras tanto, Biden habló con el primer ministro canadiense Justin Trudeau la semana pasada, luego de que Trudeau expresó su decepción porque Biden emitió una orden ejecutiva para detener el oleoducto Keystone XL. El proyecto, que durante mucho tiempo fue disputado, debía transportar alrededor de 800,000 barriles de petróleo por día desde las arenas petrolíferas de Alberta hasta la costa del Golfo.
La Casa Blanca, citando la llamada entre los dos líderes, dijo que Biden reconoció la decepción de Trudeau con la decisión.
«No siempre va a ser una alineación perfecta con Estados Unidos», dijo Trudeau, según AP. “Ese es el caso de cualquier presidente, pero estamos en una situación en la que estamos mucho más alineados con los valores y el enfoque. Tengo muchas ganas de trabajar con el presidente Biden».
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