Un anarquista buscado por presuntamente incitar a un disturbio se entregó el lunes.
Brian Jordan Bartels, de 20 años, rompió las ventanas de un vehículo policial durante el fin de semana en Pittsburgh «en contra de los deseos de los manifestantes pacíficos que trataron de detenerlo», dijo la Oficina de Policía de la ciudad.
Bartels se entregó el lunes por la tarde y estaba siendo interrogado por detectives, dijo la oficina.
Las imágenes de video mostraron al hombre caminando hacia la jefatura de policía con una mujer y otro hombre adulto. Bartels no respondió a las preguntas realizadas en voz alta por los periodistas.
De acuerdo con una demanda criminal obtenida por The Epoch Times, Bartels fue acusado de delito contra la propiedad, vandalismo institucional, incitación a un motín, y poner en peligro imprudentemente a otra persona. Se le acusó el martes a primera hora, la fianza se fijó en 10,000 dólares.
La entrega se produjo después de que los detectives, agentes del FBI y otros oficiales ejecutaran una orden de registro el domingo en el lugar de residencia de Bartels en el parque Allison.
Los detectives encontraron pruebas que incluían guantes, libros y literatura variada, seis latas de pintura en aerosol, un iPhone y dos armas de fuego.
20-year-old anarchist Brian Jordan Bartels turned himself in on Monday after police searched his home and found evidence he incited a riot in Pittsburgh over the weekend.
Bartels was charged with criminal mischief and three other crimes. Preliminary hearing slated for June 12.
— Zachary Stieber (@ZackStieber) June 2, 2020
Bartels fue grabado en video—vistiendo ropa negra y una cubierta facial negra con un símbolo anarquista blasonado en ella—rompiendo las ventanas de una camioneta policial durante una protesta que había sido pacífica, dijeron los oficiales de policía.
La violencia comenzó, según la denuncia, con vandalismo y finalmente con el incendio del vehículo.
Un detective vestido de civil en la multitud presenció cómo Bartels causaba grandes daños a la furgoneta mientras animaba a la multitud a cometer también actos delictivos, incluso cuando algunos manifestantes instaron al hombre a que dejara de hacer lo que estaba haciendo.
«A medida que Bartels continuaba su destrucción, la multitud se defendía cada vez más y más gente comenzó a unirse a él para dañar el coche», según la denuncia penal.
Bartels trabaja en Amazon. Un compañero de trabajo que lo conoce vio las imágenes del vandalismo, llamó a la policía y les informó sobre la identidad de Bartels. Bartels escribió al compañero de trabajo el sábado: «Si no estoy en el trabajo mañana, pídele al jefe que me dé permiso con goce de sueldo».
Amazon no ha respondido a las peticiones de comentarios sobre los cargos criminales, incluyendo preguntas sobre si el anarquista sigue empleado.
Entre las pruebas descubiertas en la residencia de Bartels había una sudadera con capucha negra y escritura blanca que coincidía con la camisa que Bartels fue visto usando en la escena del crimen.
Funcionarios de Pittsburgh dijeron en los últimos días que los anarquistas y gente de fuera de la ciudad eran responsables de gran parte de la violencia vista durante las protestas y disturbios de la semana pasada.
Se produjeron disturbios junto con protestas pacíficas en ciudades de todo el país a raíz de la muerte de George Floyd, un hombre negro que fue arrestado el mes pasado en Minneapolis y murió bajo custodia policial después de que se mostrara a un agente de policía arrodillado sobre su cuello.
La gente atacó a periodistas y «transeúntes inocentes» el sábado, día en que se registró a Bartels rompiendo las ventanas, mientras dañaba unos 60 negocios.
El jefe de la policía de Pittsburgh, Scott Schubert, dijo a los periodistas en una conferencia de prensa que una protesta pacífica se convirtió en un disturbio, con gente arrojando piedras a la población, lanzando latas e hiriendo a agentes de policía y periodistas.
Los agentes estaban trabajando para localizar a los que infligieron daños y fomentaron la violencia, dijo, culpando a «hombres blancos, vestidos con [ropa] anarquista de Antifa».
«Miraremos todos los videos que tenemos, y haremos todo lo que podamos con nuestra tecnología para encontrar a los responsables de gran parte de esto», dijo Schubert. «Estoy muy enojado por el hecho de que algún sector secuestró esto y luego tomó a algunos de los jóvenes y los trajo a la confusión».
Los funcionarios federales están investigando a los organizadores e instigadores de la violencia en los disturbios, utilizando las 56 Fuerzas de Tarea Conjunta contra el Terrorismo, según el fiscal general William Barr.
«La violencia instigada y llevada a cabo por Antifa y otros grupos similares en relación con los disturbios es terrorismo nacional y será tratada en consecuencia», dijo en un comunicado.
El alcalde de Pittsburgh, Bill Peduto, demócrata, dijo que la protesta fue «secuestrada» por un grupo de 100 o más anarquistas que estaban «centrados solo en la violencia», dirigiendo a la gente en el vídeo que muestra a Bartels.
Una audiencia preliminar para Bartels está programada para el 12 de junio.
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