La mayoría de los grupos poblacionales no tendrán acceso a las vacunas contra el virus del PCCh por un tiempo, dijo el miércoles un asesor de la Casa Blanca.
«Estamos tomando medidas para aumentar la oferta y la capacidad, pero, aun así, pasarán meses antes de que todos los que quieran una vacuna puedan obtenerla», dijo Andy Slavitt, asesor principal de la Casa Blanca para la respuesta al virus del PCCh, durante una sesión informativa virtual.
Los dos factores limitantes son obtener dosis suficientes con la suficiente rapidez y tener la capacidad de administrar dosis una vez que se producen y envían a sitios de todo el país.
Las reservas de dosis se han terminado y la administración actual ha proseguido con una iniciativa que busca apresurar la entrega de dosis en los sitios de vacunación para tratar de acelerar el ritmo de las vacunaciones.
“Confiamos en que recibiremos un suministro continuo de los fabricantes para que podamos proseguir”, dijo Slavitt.
Hasta el 27 de enero el gobierno federal distribuyó a los estados 47,2 millones de dosis de vacunas contra COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino). De ese número se han administrado 24,6 millones de dosis. Casi 4 millones de personas han recibido dos inyecciones.
Ambas vacunas, autorizadas para uso de emergencia, requieren dos dosis con un intervalo de tres semanas o un mes.
La administración de Biden estableció el objetivo de administrar 100 millones de dosis en sus primeros 100 días en el cargo. Los funcionarios son optimistas de que se alcanzará la meta, y Biden dijo esta semana que esperaba que el número por día pudiera llegar a 1,5 millones de vacunados.
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