El programa de Asistencia para Salarios Perdidos de la administración Trump, que ofrecía USD 300 a la semana durante un máximo de 6 semanas, después de que el aumento del beneficio por desempleo de USD 600 caducara en julio, se está agotando en varios estados.
Al menos siete estados, incluidos Arizona, Massachusetts, Missouri, Montana, New Hampshire, Carolina del Norte y Texas, han terminado de pagar el suplemento de desempleo semanal de USD 300, según un rastreador de Asistencia para salarios perdidos. Veintinueve estados se encuentran en diversas etapas de desembolso de los pagos, mientras que unos pocos aún se encuentran en la fase de procesamiento.
El Programa de Asistencia para Salarios Perdidos, que está financiado por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) del Departamento de Seguridad Nacional y fue promulgado mediante un memorando presidencial, proporciona hasta USD 400 por semana en beneficios adicionales, con USD 300 provenientes de fondos federales, mientras que USD 100 son una recarga opcional procedente de las arcas de los estados.
“El presidente Trump ha autorizado a FEMA a utilizar los fondos de ayuda ante desastres de la Ley Stafford para proporcionar pagos suplementarios por salarios perdidos. Hay disponibles hasta USD 44,000 millones en fondos de ayuda en casos de desastre para apoyar esta iniciativa”, dice FEMA en el sitio web del programa.
A medida que más estados se quedan sin fondos bajo el programa, los trabajadores desempleados enfrentan la perspectiva de que no recibirán más ayuda federal, ya que el Congreso y los funcionarios de la Casa Blanca siguen estancados en la promulgación de más medidas de estímulo.
Mientras tanto, decenas de millones de trabajadores estadounidenses continúan ayudándose de las ayudas de desempleo en todos los programas a nivel nacional, según cifras del Departamento de Trabajo.
El informe de solicitudes de desempleo más reciente de la agencia (pdf), publicado el 17 de septiembre, mostró que 29,8 millones de personas solicitaron beneficios en todos los programas en la semana que finalizó el 29 de agosto, un aumento de casi 100,000 personas respecto a la semana anterior. En la semana comparable de 2019, alrededor de 1,5 millones de personas solicitaron prestaciones por desempleo, lo que demuestra el impacto colosal que ha generado la crisis del virus del PCCh (Partido Comunista Chino) en el mercado laboral.
“Las reclamaciones de seguros de desempleo indican que el crecimiento del empleo será más lento durante el resto de 2020 y que la recuperación total del mercado laboral llevará años”, dijo Gus Faucher, economista jefe de PNC Financial.
Los principales responsables de la política económica de Estados Unidos abrieron el martes la puerta a más ayuda para las pequeñas empresas afectadas por la recesión provocada por el virus, pero difirieron en cuanto a la amplitud de la misma y la forma en que debería ser entregada.
En su testimonio ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, y el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, fueron cuestionados por legisladores, quienes se mostraron preocupados debido a que el esfuerzo multimillonario para combatir las consecuencias económicas de la pandemia había dejado a una amplia franja de empresas vulnerables, desde los más pequeños restaurantes de esquina hasta propiedades de oficinas comerciales y hoteles.
Después del colapso histórico durante marzo y abril, cuando se cerraron muchas tiendas, la recuperación económica ha sido sorprendentemente fuerte. La economía agregó 1.37 millones de empleos en agosto y recuperó 10.6 millones de los 22.2 millones de empleos perdidos en la etapa más dura de la crisis del virus del PCCh. En su testimonio, Powell dijo que había habido una «mejora relevante» en muchas otras medidas económicas.
No obstante, Mnuchin y Powell dijeron que estaban buscando formas de extender más ayuda, y el presidente de la Fed dijo que la ayuda a las pequeñas empresas vendría mejor a través de un programa tipo subvención, como el Programa de Protección de Cheques de Pago.
Si bien el repunte económico ha sido fuerte, particularmente en sectores como la renta variable y la vivienda, sigue existiendo una sensación generalizada entre los economistas, incluida la Fed, de que la recuperación cesará si no se proporciona más ayuda, especialmente a familias y pequeñas empresas.
Con información de Reuters.
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