El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, prometió el 11 de abril «investigar y voltear cada piedra» para descubrir quién está detrás de la filtración de los documentos del Pentágono.
«Nos tomamos esto muy en serio y seguiremos investigando hasta que encontremos el origen y el alcance de todo esto», declaró Austin durante una rueda de prensa en el Departamento de Estado, después de una reunión con el secretario de Estado, Antony Blinken, el secretario de Asuntos Exteriores filipino, Enrique Manalo, y el oficial filipino a cargo del Departamento de Defensa Nacional Carlito Gálvez.
«Ahora, no puedo decir mucho más mientras la investigación del Departamento de Justicia esté en curso. Pero nos lo tomamos muy en serio», añadió Austin. «Nosotros seguiremos trabajando estrechamente con nuestros destacados aliados y socios y nada nos impedirá mantener la seguridad de Estados Unidos».
Austin indicó que fue informado por primera vez de la filtración de documentos el 6 de abril. Desde entonces, afirmó, ha «estado reuniendo diariamente a los altos dirigentes del departamento sobre nuestra respuesta, y he dirigido un esfuerzo interdepartamental urgente y hemos remitido el asunto al [Departamento de Justicia] DOJ».
La investigación del Pentágono sobre la filtración se centra en los documentos fechados el 28 de febrero y el 1 de marzo, dijo Austin.
«Seguiremos investigando y tratando de determinar el alcance total de la actividad», declaró el secretario de Defensa.
Los documentos filtrados se refieren supuestamente a información e inteligencia estadounidense en torno a Rusia, Ucrania, Israel y Corea del Sur. Incluían especialmente información relacionada con la guerra entre Rusia y Ucrania.
El Pentágono anunció el 9 de abril que se está llevando a cabo una investigación interinstitucional.
«Se ha puesto en marcha un esfuerzo interinstitucional, centrado en evaluar el impacto que estos documentos fotografiados podrían tener en la seguridad nacional de Estados Unidos y en la de nuestros aliados y socios», dijo la vicesecretaria de prensa del Pentágono, Sabrina Singh, en una declaración. «Durante el fin de semana, los funcionarios estadounidenses se han comprometido con los aliados y socios y han informado a los comités pertinentes del Congreso de jurisdicción sobre la divulgación».
The New York Times fue el primero en informar de la filtración. Desde entonces, otros medios han seguido su ejemplo.
A pesar de las informaciones aparecidas en la prensa sobre la filtración, el Coordinador de Comunicaciones Estratégicas del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, afirmó que los medios de comunicación no deberían informar sobre el contenido de los documentos filtrados.
«Se trata de información que no tiene nada que hacer en el dominio público», declaró Kirby durante la rueda de prensa celebrada en la Casa Blanca el 10 de abril.
«No tiene nada que hacer — si no les importa que lo diga— en las páginas de (…) las portadas de los periódicos o en la televisión», añadió Kirby. «No está destinado al consumo público y no debería estar ahí fuera».
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