El régimen chino pagó casi USD 4.4 millones a una estación de radio con sede en Washington para transmitir propaganda a los hogares estadounidenses, según muestran nuevas divulgaciones federales.
CGTN, el brazo global de la cadena estatal CCTV de China, ha pagado USD 4.35 millones desde julio de 2019 a WCRW, una estación de radio diurna que cubre Washington, Virginia y Maryland, para transmitir su contenido durante 12 horas al día.
Poco sabido por los oyentes es que Beijing controla gran parte de lo que sale al aire. Un acuerdo firmado en julio pasado, y revelado en una presentación ante el Departamento de Justicia la semana pasada, prohíbe a la estación de radio alterar o acortar el contenido del programa de CGTN o insertar anuncios sin el permiso expreso de la emisora china. El contrato es entre la WCRW y la Oficina de Planificación de Comunicaciones Internacionales, un organismo supervisado por el Departamento de Propaganda del régimen chino.
Según el acuerdo, la oficina recibe datos de rendimiento trimestrales del propietario de la red de radio, Potomac Radio Group, con sede en Virginia, informó el Washington Free Beacon. Dichos informes incluyen comentarios de la audiencia y «evaluación de organizaciones internacionales», que el contrato no especificó. La oficina también puede nombrar a un tercero para monitorear los efectos de la transmisión y realizar evaluaciones de manera periódica.
La WCRW no respondió a las consultas de The Epoch Times al cierre de esta edición.
El sitio web de la WCRW afirma que desde 1992 emite desde Washington a China Radio International, otra importante emisora estatal china de radio internacional.
El registro de Potomac Media como agente extranjero se produce cuando Washington se vuelve cada vez más cauteloso con las actividades de propaganda china en Estados Unidos.
China Daily, un periódico estatal chino en inglés, pagó millones de dólares en 2021 a los principales medios de comunicación occidentales, como Foreign Policy y Financial Times, para difundir su contenido. El consulado chino también firmó recientemente un contrato para vincular a decenas de personas influyentes en las redes sociales a través de una empresa intermediaria en Nueva Jersey. El contrato hace parte de una intensa campaña de marketing que va hasta marzo y que busca promover los próximos Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing.
CGTN ha sufrido una serie de reveses en varios países en los últimos años.
Los funcionarios del Reino Unido revocaron la licencia de transmisión del medio de televisión en el Reino Unido en febrero, diciendo que la licencia estaba en manos de una entidad que no tiene control editorial sobre los programas que muestra. Posteriormente, el regulador británico de transmisiones le impuso a CGTN dos multas por un total de USD 273,000 a causa de dos programas que contenían confesiones forzadas.
La emisora china ha provocado controversia recientemente al publicar un correo electrónico atribuido a Peng Shuai, la tenista china cuya seguridad ha sido cuestionada desde que hizo una denuncia de agresión sexual contra un exfuncionario chino de alto rango.
El correo electrónico, publicado en Twitter, muestra a Peng supuestamente retractándose de las acusaciones que hizo, afirmando: «He estado descansando en casa y todo está bien», aunque muchos observadores han cuestionado la autenticidad del mensaje.
En ese momento, Peng había desaparecido de la vista del público a raíz de las acusaciones, lo que generó preocupación internacional por su seguridad. En respuesta, CGTN y otros medios estatales chinos publicaron videos y declaraciones en los que se afirmaba que la estrella del tenis estaba bien, lo que solo generó más preocupaciones.
Desde entonces, Peng ha hecho apariciones públicas. En una entrevista, llevada a cabo el 19 de diciembre con un medio de comunicación de Singapur a favor de Beijing, la tenista retiró sus acusaciones, pero las preocupaciones sobre su seguridad no han disminuido.
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