Las autoridades de Beijing recientemente colocaron carteles de ataques aéreos en las calles, mientras que un medio estatal agresivo instó al régimen chino a desarrollar más misiles nucleares para atacar a Estados Unidos.
La atmósfera de guerra se produce en torno a las crecientes tensiones entre los dos países más poderosos del mundo, con ambas partes enfrentadas en temas que van desde el Mar de la China Meridional, las protestas de Hong Kong, hasta el encubrimiento de la pandemia de Beijing.
Ataque aéreo
La última vez que aparecieron carteles de ataques aéreos en China fue hace casi medio siglo a fines de la década de 1960, cuando el sentimiento antiestadounidense aumentó debido a la propaganda política de la Revolución Cultural.
El 25 de julio, los trabajadores fueron capturados en video instalando nuevos carteles en el distrito de Haidian, Beijing. La capital es el hogar de aproximadamente 21.54 millones de residentes.
Los carteles contenían información sobre cómo protegerse durante ataques aéreos, incluido cómo encontrar e ingresar a un refugio.
«El gobierno entregó esta información y estamos muy nerviosos», dijo el 27 de julio el residente de Beijing, el Sr. Wu, a Radio Free Asia.
El 10 de julio, el ejército de China, el Ejército Popular de Liberación (EPL), anunció en su sitio web que una oficina del gobierno central enviaría personal para visitar a las familias de los soldados que custodian las regiones fronterizas.
El Partido Comunista Chino (PCCh) generalmente no se involucra en la vida privada de los soldados. El inusual gesto llevó a algunos observadores de China a especular que el régimen tenía planes de movilizar soldados para una misión peligrosa.
Palabras agresivas
Tras la decisión de Estados Unidos y China de cerrar un consulado en sus respectivos países, Hu Xijin, editor jefe del tabloide estatal Global Times, escribió en Weibo, una plataforma de redes sociales similar a Twitter, un posteo que abogaba por una guerra entre los dos países.
Hu afirmó que debido a que la relación entre Estados Unidos y China se estaba deteriorando, el régimen de Beijing debería «darse prisa para fabricar suficientes misiles nucleares, lo suficiente como para amenazar a Estados Unidos. Deberíamos trabajar día y noche», escribió en un posteo del 26 de julio.
Du Wenlong, un comentarista militar de la campaña de propaganda global del régimen chino, y Song Zhongping, comentarista militar de la cadena estatal CCTV, hicieron comentarios recientes de que era muy posible que Estados Unidos y China entraran en un conflicto por el Mar de la China Meridional.
Estados Unidos rechazó formalmente el 13 de julio los reclamos territoriales de Beijing en el Mar de la China Meridional, donde el régimen reclama casi toda la vía marítima.
Otros países, como Filipinas, Vietnam, Malasia, Brunei y Taiwán tienen demandas rivales allí. En los últimos años, Beijing ha tratado de reforzar sus reclamos en la vía marítima estratégica mediante la construcción de puestos militares en islas y arrecifes artificiales.
El periódico taiwanés pro-Beijing, Economic Daily, informó el 23 de julio que un grupo de expertos afiliado al partido político local Kuomintang, a favor de Beijing, la National Policy Foundation, analizó que las tensiones en el estrecho de Taiwán habían alcanzado sus niveles más altos en 25 años. El objetivo del PCCh es Estados Unidos, según el artículo.
El PCCh reclama a Taiwán como parte de su territorio, a pesar de que la isla autónoma tiene su propio sistema político, militar y monetario. Los funcionarios estadounidenses han denunciado en varias ocasiones la retórica agresiva de Beijing y las fuerzas militares estadounidenses han monitoreado las maniobras militares de China cerca de Taiwán.
Programas de TV con temas de guerra
El 17 de julio, el gobierno central chino ordenó a sus estaciones de televisión que reprodujeran la Guerra de Corea, la Segunda Guerra Sino-Japonesa y otras películas y programas de televisión con temas de guerra para fomentar el sentimiento antiestadounidense entre los chinos.
La Administración Nacional de Radio y Televisión de China, un órgano gubernamental a nivel ministerial que rige la prensa, los periódicos, la radio, el cine y la televisión en China, anunció nuevas reglas de transmisión, explicando que las estaciones deberían emitir programas de televisión con temas sobre el pueblo chino luchando contra los japoneses durante la segunda guerra chino-japonesa; el ejército chino luchando junto a las fuerzas norcoreanas contra el ejército surcoreano ayudado por Estados Unidos durante la Guerra de Corea; e historias positivas que promuevan la idea de que las autoridades fueron eficaces para contener la pandemia.
Para lograr un mejor efecto, la administración solicitó a cada canal de televisión que transmitiera otros programas cortos, no relacionados con la guerra, para atraer a la gente a sintonizar.
El 23 de julio, la administración emitió otro mandato, diciendo a las cadenas de televisión que no emitieran programas que «violaran el sentido común, interpretaran arbitrariamente o bromearan sobre la historia, o fueran excesivamente entretenidos».
El régimen chino ha producido muchas películas de guerra y programas de televisión en los últimos años, a menudo con histrionismos violentos y exagerados. Algunas escenas escandalosas incluyen un panecillo al vapor que de repente se convirtió en una bomba; soldados chinos que usan sus propias manos para destrozar el cuerpo de un soldado japonés; y soldados chinos que usan granadas para derribar aviones que vuelan a 2500 pies sobre ellos.
La última vez que Beijing alentó este tipo de programación fue en mayo de 2019, en medio de la escalada de las tensiones de la guerra comercial. El Departamento de Propaganda del gobierno central ordenó a todos los canales de películas de la televisión nacional y a las estaciones provinciales de televisión por satélite que emitieran una película diaria en horario de máxima audiencia sobre la lucha de los chinos contra Estados Unidos en la Guerra de Corea.
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