Cinco universidades estadounidenses tienen vínculos no revelados con una importante universidad de investigación militar china sancionada por Estados Unidos, según un reciente reporte del Washington Free Beacon. Un experto en defensa afirma que Estados Unidos debe cortar esos vínculos y asociaciones para proteger la seguridad nacional estadounidense.
El reporte mostró un registro de archivo de Internet de una asociación entre la principal escuela de ingeniería militar de China, la Universidad de Beihang, y cinco universidades estadounidenses.
Beihang, también conocida como Universidad de Aeronáutica y Astronáutica de Beijing es una de las siete principales universidades de investigación de defensa de China. En 2001, el Departamento de Comercio de Estados Unidos impuso sanciones a Beihang por sus vínculos con el ejército y su participación en el desarrollo de sistemas de cohetes y misiles.
Asociarse con una universidad de este tipo pone en peligro la seguridad nacional de Estados Unidos, dijo Tzu-Yun Su, director del Departamento de Defensa Nacional y Recursos del Instituto de Investigación de Defensa y Seguridad Nacional de Taiwán, en una entrevista con The Epoch Times el 4 de agosto.
«El Departamento de Defensa de Estados Unidos y otras entidades gubernamentales suelen asignar sus iniciativas clave de investigación a las universidades», dijo. «La Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada (DARPA) del Departamento de Defensa, por ejemplo, financia a universidades como la MIT para ejecutar investigaciones sobre tecnologías emergentes como la inteligencia artificial».
Es difícil acceder a tecnologías tan delicadas a través de los canales oficiales, dijo Su.
«Por lo tanto, China ha utilizado las universidades estadounidenses como una forma de adquirir tales tecnologías indirectamente», dijo. «Sus tácticas incluyen colaboraciones en proyectos de investigación y el envío de estudiantes chinos a los programas relacionados en las principales universidades estadounidenses».
De las cinco universidades que se ha descubierto que colaboran con Beihang, al menos cuatro reciben fondos de DARPA para la investigación de tecnologías de vanguardia, como la IA, la neurociencia, la robótica y la ciberseguridad. Estas universidades son la Universidad Carnegie Mellon, la Universidad de Columbia, el Instituto Tecnológico Rose-Hulman y la Universidad de Michigan.
«China pretende alcanzar dos objetivos a través de las relaciones con las universidades estadounidenses», dijo Su. «Uno es adquirir las tecnologías. El segundo es sesgar las opiniones y actitudes del mundo académico estadounidense».
Aunque Estados Unidos incluyó a Beihang en la lista negra de control de exportaciones hace 20 años, las acciones más serias para evitar la infiltración a través del sistema educativo comenzaron durante el mandato del expresidente Donald Trump.
En 2018, el Departamento de Estado acortó la duración de los visados para los estudiantes chinos de posgrado que estudian aviación, robótica y fabricación avanzada para ayudar a prevenir el espionaje y el robo de propiedad intelectual. En 2020, Trump emitió una proclamación que prohibía la entrada de estudiantes e investigadores chinos que tuvieran vínculos con el Ejército Popular de Liberación.
La prohibición continúa en la Administración de Biden. En julio, más de 500 estudiantes chinos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas fueron rechazados por motivos de seguridad.
Su dijo que estas medidas reducirán eficazmente el espionaje y el robo de tecnología a través de las universidades, pero que hay que hacer más.
«Estados Unidos debe seguir examinando las solicitudes de visa de los ciudadanos chinos. Las oficinas de seguridad de las universidades también deberían poner en marcha programas educativos y éticos diseñados para los estudiantes chinos», dijo.
«El ámbito académico rara vez se asociaba con la seguridad nacional en el pasado», dijo Su. «China se aprovechó de la libertad académica de este país, y se infiltró discreta y profundamente mientras la academia estadounidense estaba expuesta (…) Esto ha sido un eslabón débil de la seguridad nacional».
Su dijo que el Partido Comunista Chino (PCCh) se infiltra en todo, en todas partes. «Frenar la infiltración del PCCh en todos los ámbitos es cada día más crítico para Estados Unidos», dijo.
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