Una biblioteca pública en Glen Ridge, Nueva Jersey, se ha puesto del lado de los activistas para bloquear los esfuerzos de los residentes locales que piden retirar de los estantes los libros con gráficos sexuales y guías sexuales instructivas dirigidas a los niños.
Después de recibir solicitudes para retirar seis libros de los estantes, la directora de la Biblioteca Pública de Glen Ridge se ha negado, según la activista local por los derechos de los padres, Fran Deacon.
“Estas personas están tan perdidas dentro de su burbuja ideológica que no pueden verse a sí mismas”, dijo Deacon a The Epoch Times.
Ahora, otros a favor de mantener los libros disponibles para los niños también se han unido a la lucha, dijo Deacon. Los activistas LGBT se hicieron cargo de una reunión el 8 de febrero en la escuela Ridgewood Avenue para hablar sobre los libros cuestionables, dijo.
“La junta de la biblioteca tuvo su gran reunión y estaba revisando la apelación que enviamos con respecto a los materiales del libro”, dijo Deacon. “Se convirtió en una gran manifestación y protesta a la que asistieron activistas dentro y fuera de nuestra ciudad”.
Deacon es parte de un grupo local de ocho personas llamado Citizens Defending Education (CDE). Ella era el único miembro dispuesto a usar su nombre real. Por temor a represalias, otros entrevistados pidieron no ser identificados.
Si ganan los activistas que luchan por hacer accesibles libros estilo manual de sexo a los niños, “los niños pierden”, dijo Deacon.
La batalla de la biblioteca comenzó cuando una madre de Glen Ridge, que pidió ser identificada como Kathryn, encontró el libro “You Know, Sex” (Ya sabes, sexo) en la sección de niños de la Biblioteca Pública de Glen Ridge.
Cuando lo abrió, descubrió que explicaba la pubertad y también servía como guía sexual, le dijo a The Epoch Times.
“Lo que vi me horrorizó. Estaba estupefacta. Y mi mandíbula estaba en el suelo”.
Una página tenía docenas de imágenes de genitales femeninos, dijo.
Los actos sexuales en solitario son «una forma en que aprendemos sobre nuestros cuerpos y descubrimos dónde se siente bien en nuestros cuerpos y cómo nos gusta que nos toquen», dice una página del libro.
Una tercera página hablaba sobre cómo ocultar la evidencia de la excitación masculina y mostraba a un niño vestido con ropa de mujer, dijo. La ilustración mostraba claramente que no logró ocultar su excitación.
Otros libros en la biblioteca también proporcionaron a los adolescentes instrucciones sobre cómo participar en el comportamiento sexual, dijo.
Guías sexuales para niños pequeños
Otro libro de la biblioteca, “Let’s Talk About It” (Hablemos de eso), ofrece consejos sobre cómo realizar actos sexuales en solitario y les dice a los adolescentes cómo enviar imágenes de desnudos a otros.
La dedicatoria del libro indica que fue escrito “para quien lo necesite, sea cual sea su edad”.
“Antes de comenzar a enviar sus traviesas obras maestras alrededor del mundo, tómese un tiempo para familiarizarse con el software o las aplicaciones de edición de fotos”, sugiere un consejo de sexting del libro.
Los miembros del CDE señalan que fomenta la violación de la ley. Los adolescentes que envían imágenes sexuales de sí mismos desnudos a otra persona cometen ilegalmente tráfico de pornografía infantil según las leyes federales y de Nueva Jersey.
El mismo libro también aconseja a los niños sobre actos sexuales en solitario.
“Cuando estés listo para jugar con tu cuerpo, hay algunas cosas que puedes probar”, aconseja el libro. El libro combina imágenes gráficas con todas estas guías.
“Let’s Talk About It” también recomienda que los lectores jóvenes vean pornografía.
«Un lugar estupendo para investigar fantasías y manías de forma segura es Internet», dice el libro.
Los padres del grupo de Deacon también se han opuesto al libro «Gender Queer», que incluye imágenes gráficas de sexo oral y sexo en solitario. Y han cuestionado el libro «All Boys Aren’t Blue», que incluye una escena de incesto de niños homosexuales.
“It’s Not the Stork!” (¡No es la cigüeña!) es otro texto que creen que es inapropiado para los niños. Escrito para niños de hasta 4 años, fomenta los actos sexuales en solitario.
“Si toca o frota sus partes íntimas porque le hace cosquillas o se siente bien, está bien”, dice ese libro.
«Here and Queer» está etiquetado como «una guía para la vida de una chica queer». Incluye instrucción en ocho tipos de sexo lésbico y el uso de juguetes sexuales.
“Considere esta lista como un menú”, dice sobre su lista de sexo. “Al igual que en un restaurante, este menú es una lista de opciones posibles: Puede ordenar algunos platos diferentes, probar algunos de los platos de su pareja y puede obtener algo diferente la próxima vez.
“This Book is Gay” (Este libro es gay), enfrenta la identidad LGBT con la ética sexual del judaísmo, el cristianismo y el islam. El autor dice que planea «romper algunas viejas cosas religiosas en pedazos» porque generalmente se cree que esos sistemas de creencias se oponen a las relaciones entre personas del mismo sexo.
El libro “Not being funny, but these guys kinda started it,”, habla de los judíos, culpándolos por iniciar la oposición a la homosexualidad.
El libro sugiere que, si los lectores tienen la “desgracia de toparse con un cristiano homofóbico y literal”, deberían contar la historia bíblica de Rut y Noemí, porque es “como un episodio de Desperate Housewives con crack”.
El libro afirma que el islam tiene problemas con las relaciones entre personas del mismo sexo debido al Hadith, una fuente de orientación moral para los musulmanes que contiene una colección de dichos del profeta Mahoma.
Defender la inocencia
Los estilos artísticos son una de las razones por las que los miembros de CDE se oponen a los libros, los cuales probablemente son utilizados para distraer la atención de su contenido explícito, dijo un miembro del grupo que pidió ser identificado como Gloria.
“Todos están hechos en dibujos con formas e imágenes caricaturescas con el propósito de que, si no lo fueran, serían pura pornografía”, dijo Gloria.
Otro integrante del grupo, Kathryn, dijo que le llevó el libro «You Know, Sex» a la bibliotecaria y lo hojeó. La bibliotecaria reaccionó conmocionada, dijo.
«¿Le parecería bien que sus hijos se toparan con estas páginas?», preguntó a la bibliotecaria.
La bibliotecaria, dijo, respondió: “Me sentiría muy incómoda”.
Luego, la bibliotecaria retiró el libro de la sección de niños, dijo Kathryn.
“¿Por qué estos libros tienen que estar en estanterías? ¿Qué mérito tienen? No tienen ningún mérito”, dijo Gloria. Como contribuyente, se opone a ayudar a que estén disponibles en la biblioteca pública de su comunidad.
Para Glen Ridge, una ciudad de menos de 8000 habitantes, la biblioteca local sirve como un centro social, le dijeron miembros del grupo CDE a The Epoch Times.
“Es como el verdadero centro cultural de nuestra ciudad”, dijo Deacon. “Está intercalado entre la escuela secundaria y la escuela intermedia. Y se puede caminar desde casi cualquier casa en Glen Ridge. Glen Ridge tiene solo tres millas de largo, en total”.
Después de descubrir los seis libros objetables, los miembros de CDE presentaron impugnaciones a la biblioteca, solicitando la eliminación de los libros, con la esperanza de proteger a los niños de la comunidad de ver materiales que podrían ser dañinos, dijo Deacon.
“¿Es eso lo que necesitan las personas LGBTQ? ¿Novelas sexuales gráficas y manuales sexuales a edades tempranas? ¿Es así como ‘afirmamos a los niños?’”, preguntó Deacon.
Dos semanas después, la directora de la biblioteca respondió y desestimó las llamadas para retirar los libros. La biblioteca no respondió a las solicitudes de comentarios de The Epoch Times.
“Ella negó cualquier solicitud de revisión”, dijo un miembro del grupo CDE que pidió ser identificado como Lisa. Y la directora de la biblioteca les dijo a los miembros del grupo que ‘Estos libros sirven a la comunidad. Y cumplen con los criterios de nuestra política de selección de libros”, dijo Lisa.
La batalla se vuelve personal
En respuesta a las preocupaciones de los padres sobre los libros, se formó otro grupo.
El grupo Glen Ridge United Against Book Bans dijo que Deacon y otros padres estaban tratando de «prohibir» los libros para eliminar la presencia LGBT en Glen Ridge, dijo Deacon.
“Todos estos libros tienen contenido relacionado con la comunidad LGBTQ+ y está claro que el grupo CDE está apuntando a este grupo aquí en Glen Ridge”, se lee en su sitio.
Rápidamente, los padres se vieron señalados como intolerantes, racistas, supremacistas blancos y homófobos en las publicaciones de las redes sociales y en los correos electrónicos, dijo Deacon.
Los miembros del grupo recibieron correos electrónicos diciéndoles que “¡saquen el [improperio] de Glen Ridge!”. dijo Deacon. “Rápidamente nos convertimos en destinatarios de mensajes de odio y amenazas veladas. Y rápidamente se volvió muy inseguro para nosotros. Y tuvimos que involucrar a la policía”.
La asambleísta del estado de Nueva Jersey, Britnee Timberlake, dijo públicamente que creía que los esfuerzos del grupo CDE eran «sobre el odio» y «sobre la discriminación» hacia las personas LGBT.
Eso simplemente no es cierto, dijo un miembro del CDE que pidió ser identificado como Elijah. Varios miembros del grupo de derechos de los padres tienen familiares que se identifican como LGBT, dijo. Entonces no son «homofóbicos» y no tienen odio hacia las personas LGBT, dijo.
Y aunque algunos cristianos en el grupo creen que cualquier tipo de sexo fuera del matrimonio es un pecado, no pretenden imponer su visión del mundo a los demás, agregó.
“El gran problema era el hecho de que estos libros son vulgares”, dijo Elijah. “Son muy sexualmente explícitos. Quiero decir, hasta el punto en que tienes fotos de niños [improperio] jugando y teniendo relaciones sexuales entre ellos”.
Otros miembros del grupo estuvieron de acuerdo con él.
“Lo que realmente nos preocupa no es que sea una historia sobre este individuo LGBTQ”, dijo Kathryn. “Nos preocupa la enseñanza de poder encontrar pornografía, o hacer sexting, o sus relaciones pedófilas. Solo cosas que no son educativas, sino criminales, si están fuera de las paredes de la biblioteca”.
Postura política
Pero la junta de la biblioteca se negó a responder a las objeciones del CDE sobre la naturaleza pornográfica de los libros, dijo Deacon.
Gloria, miembro de CDE, dice que las estructuras de poder del pueblo están controladas por personas con puntos de vista liberales o progresistas, incluida la junta local de educación. Los valores conservadores están subrepresentados, dijo.
La junta de la biblioteca votó por unanimidad para mantener todos los libros cuestionados, dijeron los miembros de CDE.
Deacon dijo que la ira por la oposición a los libros la conmocionó.
“Honestamente, nunca pensé que eso nos pasaría a nosotros”, dijo. “Lo trataron como si fuéramos una mafia y que íbamos contra la comunidad LGBT en nuestra ciudad”.
The Epoch Times contactó a Glen Ridge United Against Book Bans, pero no respondieron al momento de la publicación.
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