El presidente Joe Biden anunció que su administración destinará más fondos para cancelar o reducir los saldos de los préstamos estudiantiles de otras 35,000 personas a través del Programa de Condonación de Préstamos del Servicio Público (PSLF).
En una declaración del 18 de julio, el presidente Biden dijo que el número total de estadounidenses que se han beneficiado de las diversas acciones de ayuda del gobierno para el pago de las deudas estudiantiles hasta la fecha es de al menos 4.76 millones y contando.
“Cada uno de esos prestatarios ha recibido un promedio de más de 35,000 dólares en cancelación de deudas”, dijo.
“Estos 35,000 prestatarios aprobados para la condonación de hoy son trabajadores de los servicios públicos -maestros, enfermeras, agentes del orden y personal de primera respuesta- que han dedicado sus vidas a fortalecer sus comunidades, y debido a las correcciones que hicimos a la Condonación de Préstamos del Servicio Público, ahora tendrán más espacio para respirar y mantenerse a sí mismos y a sus familias”.
Según el Presidente Biden, esta última condonación de deuda asciende a 1200 millones de dólares en cancelación de préstamos estudiantiles, que se suman a los casi 169,000 millones de dólares ya condonados a 4.8 millones de personas en todo el país.
El Secretario de Educación de EE.UU., Miguel Cardona, dijo que las personas adicionales aprobadas para el PSLF son “servidores públicos” que recibirán un “respiro financiero”.
“Esta ayuda traerá un cambio real en sus vidas y marca otra victoria para el trabajo implacable y sin disculpas de esta administración para arreglar un sistema de préstamos estudiantiles roto”, dijo.
Cambios en el programa PSLF con Biden
El programa PSLF ayuda a los empleados de organizaciones gubernamentales o sin ánimo de lucro y a los funcionarios públicos, como profesores, enfermeros y bomberos. Perdona los saldos pendientes de préstamos estudiantiles, siempre que primero se realicen 120 reembolsos mensuales cualificados en virtud de un plan de reembolso aceptado.
También es requisito trabajar a tiempo completo para una empresa que reúna los requisitos. Se considera trabajo a tiempo completo el realizado para una empresa que cumpla los requisitos durante una media semanal de al menos 30 horas. Solo unos 7000 empleados del sector público habían cumplido los requisitos para la condonación de préstamos en el marco del programa PSLF antes del cambio de normativa de la administración Biden.
Desde el 1 de julio, el programa PSLF está gestionado íntegramente por el Departamento de Educación. La última condonación de deuda también incluye a los prestatarios que formaban parte de la exención limitada PSLF, una oportunidad temporal que terminó en octubre de 2022. Según el Departamento de Educación de los Estados Unidos (DOE), a partir de octubre de 2021, casi 616,000 empleados del sector público tuvieron sus deudas de préstamos estudiantiles perdonadas bajo las reglas temporalmente flexibilizadas.
“El anuncio de hoy viene a sumarse a los importantes avances que hemos logrado para los estudiantes y los prestatarios en los últimos tres años”, dijo el presidente Biden.
“Eso incluye proporcionar los mayores aumentos a la beca Pell máxima en más de una década; arreglar el reembolso basado en los ingresos para que los prestatarios obtengan el alivio al que tienen derecho según la ley; y responsabilizar a las universidades por aprovecharse de los estudiantes y las familias”.
Política de pagos de deuda encuentra resistencia
Anteriormente, algunos de los esfuerzos del Presidente Biden para condonar los préstamos estudiantiles no habían tenido éxito.
En junio de 2022, la Corte Suprema, en una decisión de 6-3, anuló el plan original de condonación de préstamos de la administración Biden alegando que el poder ejecutivo no tenía autoridad en virtud de la Ley HEROES. Esa propuesta pretendía cancelar 430,000 millones de dólares en amortizaciones relacionadas con la deuda de préstamos estudiantiles sin la aprobación del Congreso.
La Ley HEROES, una ley federal aprobada tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, permitía al secretario de Educación modificar los programas de préstamos estudiantiles para los afectados por el ataque. En 2003, el Congreso prorrogó la ley para que el gobierno federal pudiera conceder préstamos a los estudiantes afectados por una guerra o una emergencia nacional. El Presidente Biden dijo que podría ampliar ese poder para proporcionar ayuda sobre los préstamos estudiantiles a los estudiantes afectados por la emergencia COVID-19.
En aquel momento, 21 gobernadores firmaron una carta abierta en la que pedían que se suprimiera el plan de condonación de la deuda alegando que iría en detrimento de los contribuyentes estadounidenses, fomentaría el endeudamiento de los estudiantes, incentivaría el aumento de las tasas de matrícula, impulsaría la inflación y penalizaría a las personas que han pagado sus préstamos o a las que han decidido no pedirlos.
En marzo, los fiscales generales de Kansas, Alabama, Alaska, Idaho, Iowa, Luisiana, Montana, Nebraska, Carolina del Sur, Texas y Utah también presentaron una demanda para detener el plan SAVE (Saving on a Valuable Education), que introduciría un plan de reembolso de la deuda estudiantil basado en los ingresos. La demanda argumentaba que el Presidente Biden se había extralimitado en sus funciones con el programa.
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