El presidente Joe Biden ha expresado su desaprobación por la decisión de Meta de eliminar su actual programa de verificación de hechos en las redes sociales.
Esta semana, Meta, propietaria de las plataformas de redes sociales Facebook e Instagram, anunció que dejaría de utilizar su programa de verificación de hechos de terceros para evaluar contenidos en Estados Unidos.
El CEO de Meta, Mark Zuckerberg, dijo que tomó la decisión porque el programa de verificación de hechos existente se ha vuelto «demasiado sesgado políticamente», lo que resulta en la censura y la pérdida de confianza.
«Es hora de volver a nuestras raíces en lo que respecta a la libertad de expresión en Facebook e Instagram», dijo en una declaración en vídeo el 7 de enero.
Cuando se le pidió su opinión sobre la medida en una rueda de prensa el 10 de enero, Biden dijo: «Es solo completamente contrario a todo lo que significa Estados Unidos».
Hasta esta semana, Meta se había asociado con la International Fact-Checking Network (IFCN) para gestionar su servicio de verificación de hechos por terceros. La IFCN está administrada por el Instituto Poynter, que también gestiona la publicación de comprobación de hechos PolitiFact.
«La idea de que un multimillonario pueda comprar algo y decir ‘por cierto, a partir de este momento no vamos a comprobar nada’ es realmente vergonzosa», dijo Biden.
Meta no está eliminando la comprobación de hechos. Más bien, Zuckerberg dijo que las plataformas de Meta avanzarán hacia un sistema del estilo de «notas comunitarias más completas», similar al empleado por la red social X. El nuevo modelo comenzará en Estados Unidos.
En lugar de confiar en una organización de comprobación de hechos como la IFCN para que evalúe los contenidos, la función de notas de la comunidad de X permite a los usuarios opinar directamente. Los usuarios de X pueden sugerir una nota de comprobación de hechos en publicaciones controvertidas de la plataforma y, a continuación, dar su opinión sobre si la nota de comprobación de hechos sugerida es precisa y necesaria para la publicación en cuestión. Las entradas que han sido marcadas con suficiente participación de la comunidad muestran una nota de verificación de hechos adjunta que explica por qué la entrada en particular es inexacta o puede faltar contexto importante.
Zuckerberg también anunció que el equipo de moderación de contenidos de Meta se trasladará de California a Texas «donde había menos preocupación por la parcialidad de nuestros equipos».
Zuckerberg y otros responsables de Meta han defendido el traslado como necesario para restaurar la libertad de expresión en sus plataformas.
En una entrada de blog publicada el 7 de enero, Joel Kaplan, director de asuntos globales de Meta, dijo que, por muy bien intencionados que fueran sus anteriores esfuerzos de comprobación de hechos, «se han ampliado con el tiempo hasta el punto de que estamos cometiendo demasiados errores, frustrando a nuestros usuarios y obstaculizando con demasiada frecuencia la libertad de expresión que nos propusimos permitir».
«Demasiado contenido inofensivo es censurado, demasiada gente se encuentra encerrada erróneamente en la ‘cárcel de Facebook’, y a menudo somos demasiado lentos a la hora de responder», dijo Kaplan.
Las decisiones de Meta sobre comprobación de hechos y moderación de contenidos habían sido un punto de controversia durante el ciclo electoral presidencial de 2020.
En octubre de 2020, las plataformas de Meta redujeron el alcance de las publicaciones que enlazaban a artículos de The New York Post relativos a un ordenador portátil que el hijo del entonces candidato Joe Biden, Hunter Biden, había abandonado supuestamente en un taller de reparación de ordenadores de Delaware. Los artículos del New York Post detallaban el contenido del portátil, incluidos documentos que indicaban que el mayor de los Biden mantenía cierto nivel de interacción con los socios comerciales extranjeros de su hijo.
En una entrevista el 10 de enero con el presentador de podcast Joe Rogan, Zuckerberg alegó que funcionarios de la administración Biden se ponían en contacto habitualmente con Meta para exigirles que eliminaran o suprimieran determinados contenidos, incluidos memes y publicaciones satíricas.
«Básicamente, esta gente de la administración Biden llamaba a nuestro equipo y les gritaba y maldecía», dijo Zuckerberg.
The Epoch Times se puso en contacto con la Casa Blanca para solicitar comentarios, pero no recibió respuesta al cierre de esta edición.
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