El gobierno de Biden anunció el miércoles que condonará otros 4800 millones de dólares en deudas de préstamos estudiantiles a 80,300 prestatarios, con lo que la carga total para los contribuyentes asciende a 132,000 millones de dólares.
«No cejaré en mi empeño de utilizar todas las herramientas a nuestra disposición para conseguir que los deudores de préstamos estudiantiles obtengan el alivio que necesitan para alcanzar sus sueños», dijo el presidente Joe Biden en una declaración el 6 de diciembre, en la que dejó claro que su administración no se deja intimidar por la reciente decisión de la Corte Suprema de bloquear una iniciativa de amplio alcance para cancelar hasta 20,000 dólares de deuda por estudiante.
«A raíz de la decisión de la Corte Suprema sobre nuestro plan de alivio de la deuda estudiantil, seguimos buscando un camino alternativo para ofrecer alivio de la deuda estudiantil a tantos deudores como sea posible, tan pronto como sea posible», agregó el presidente.
Con esta última medida, el número total de deudores cuyos préstamos estudiantiles han sido condonados asciende a más de 3,6 millones.
«Este nivel de alivio de la deuda no tiene paralelo y no tenemos intención de desacelerarlo», dijo el secretario de Educación, Miguel Cardona, en una declaración.
La última ronda de condonación de préstamos estudiantiles incluye USD 2600 millones para 34,400 prestatarios en el marco del plan de condonación de préstamos por servicios públicos (PSLF) y USD 2200 millones para 46,000 prestatarios en el marco del ajuste de pago único para los planes de pago basado en los ingresos (IDR).
El anuncio generó reacciones encontradas en línea, con comentarios críticos que incluyeron llamados a la administración Biden para que «deje de dar dinero gratis a personas que voluntariamente se endeudaron para comprar títulos inútiles».
Muchos opositores del plan de condonación de préstamos estudiantiles del presidente Biden han criticado la eliminación de la deuda, describiéndola injusta para las personas que se sacrificaron para pagar sus préstamos estudiantiles o que en principio nunca acumularon deudas y ahora se ven obligadas a pagar la factura de las deudas de otras personas.
La condonación de la deuda en foco
En medio de la promesa de larga data del presidente de eliminar la deuda estudiantil, la administración Biden dio a conocer en agosto de 2022 un plan para condonar hasta USD 20,000 en deuda estudiantil por persona para unos 40 millones de deudores.
En ese momento, la Casa Blanca dijo que el plan de condonación de préstamos estudiantiles del presidente Biden costaría USD 24,000 millones, o USD 240,000 millones en un período de 10 años. En cambio, las proyecciones del Modelo de Presupuesto de Penn Wharton y del Comité para un Presupuesto Federal Responsable situaron el costo con una cifra entre USD 330,000 y 500,000 millones en una década, respectivamente.
Según ese amplio plan, los contribuyentes habrían absorbido hasta USD 10,000 en deuda estudiantil pendiente para prestatarios individuales que ganan menos de USD 125,000 por año o USD 250,000 entre declarantes conjuntos que están casados.
En ese momento, el líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), calificó el plan de cancelación de préstamos estudiantiles del presidente Biden como «socialismo» y una «bofetada a cada familia que se sacrificó para ahorrar para la universidad, a cada graduado que pagó su deuda y cada estadounidense que eligió una determinada carrera profesional o se ofreció como voluntario para servir en nuestras Fuerzas Armadas para evitar endeudarse”.
Una demanda puso fin a tal plan de condonación de USD 20,000 por estudiante de la administración Biden. En una decisión dividida, el 30 de junio, la Corte Suprema votó 6 votos a favor y 3 en contra, para derogarla.
Se había aprobado el alivio de la deuda de 16 millones de personas y “el dinero estaba literalmente a punto de salir por la puerta”, según las declaraciones del presidente Biden tras el fallo de la corte.
«Luego intervinieron los funcionarios electos republicanos y los intereses especiales», continuó el presidente.
“Ellos dijeron que no, no, literalmente arrebatando de las manos de millones de estadounidenses miles de dólares en alivio de la deuda estudiantil que estaba a punto de cambiar sus vidas”.
Prometiendo proporcionar más alivio para los préstamos estudiantiles por otros medios, el presidente dijo en ese momento que “la decisión había cerrado un camino y ahora vamos a seguir otro”.
Campaña presidencial
Algunos estrategas políticos han dicho que las acciones de condonación de deuda, como la que anunció la Casa Blanca el 6 de diciembre, podrían ayudar al presidente Biden en su candidatura a la reelección, incluso si esas acciones son bloqueadas por los tribunales.
«Muchos votantes promedio se muestran escépticos sobre el alivio de la deuda estudiantil, pero no es su principal tema. Para los prestatarios jóvenes, es una preocupación que cambia sus vidas y podría llevarlos a las urnas», dijo John Pitney, politólogo del Claremont McKenna College. Newsweek a principios de este año.
Otros han dicho que si los esfuerzos del presidente por cancelar la deuda se ven frustrados, esto podría ayudarlo al generar «un gran combustible de ira para una campaña política el próximo año», según el consultor político Jay Townsend, en declaraciones a Newsweek.
Los candidatos republicanos a la presidencia, incluido el favorito, con diferencia, el expresidente Donald Trump, han expresado su oposición a la condonación de la deuda estudiantil.
El presidente Trump reaccionó al fallo de la Corte Suprema diciendo en un evento de campaña en junio que la cancelación de la deuda «habría sido muy injusta para los millones y millones de personas que pagaron su deuda mediante trabajo duro y diligencia, muy injusto».
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, que ocupa el segundo lugar detrás del presidente Trump, ha dicho que está mal que los contribuyentes se vean obligados a cargar con la deuda acumulada por otras personas.
Nikki Haley, exembajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, que actualmente ocupa el tercer lugar en las encuestas para las elecciones presidenciales, dijo que cancelar la deuda estudiantil es injusto para aquellos que trabajaron duro para pagar sus préstamos o que debieron tomar otras decisiones profesionales que no implicaran endeudarse profundamente.
Las encuestas muestran que los votantes generalmente están divididos sobre la condonación de la deuda estudiantil, aunque las personas que todavía están pagando sus préstamos estudiantiles (tal vez comprensiblemente) tienden a favorecer la cancelación de su deuda.
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