El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró el jueves en una entrevista con la cadena MSNBC que las recientes sentencias de la Corte Suprema de Estados Unidos fueron demasiado lejos, pero añadió que se mantenía opuesto a ampliar los tribunales, al sostener que podría politizar permanentemente la institución.
La entrevista del presidente fue su primera en televisión desde mayo, y expresó su preocupación de que los jueces conservadores «puedan hacer demasiado».
«Pero creo que si iniciamos el proceso de intentar ampliar la corte, vamos a politizarla, quizá para siempre, de una forma que no es saludable y que no se puede recuperar», dijo Biden.
Los comentarios del presidente se produjeron después de que la Corte Suprema decidiera el jueves poner fin a la discriminación positiva en las admisiones universitarias.
Tras la decisión, Biden criticó a la corte por romper con décadas de precedentes.
«Esta no es una corte normal», dijo Biden en la Casa Blanca antes de partir hacia Nueva York.
Durante la entrevista en la MSNBC, cuando se le pidió que aclarara a qué se refería, Biden citó sentencias recientes como la anulación de Roe vs. Wade y la derogación de la discriminación positiva y criticó a la Corte Suprema por ir en contra de 50-60 años de precedentes.
«Se ha salido de su camino», dijo Biden, acusando a la corte de perder contacto con «el sistema de valores básicos del pueblo estadounidense».
En mayo, los demócratas del Senado presentaron un proyecto de ley que ampliaría la Corte Suprema, añadiendo cuatro nuevos asientos además de los nueve actuales, una medida que podría amenazar la actual mayoría conservadora del tribunal.
Cuando se le preguntó sobre la ampliación del tamaño de la Corte Suprema del país, Biden lo calificó de «error».
Biden afirmó que había reunido a un grupo de eruditos constitucionales para tratar de ampliar el tribunal.
«El juicio fue que no tenía sentido porque puede politizarse mucho en el futuro», explicó Biden.
Sin embargo, se mostró esperanzado porque la legitimidad de la Corte está siendo cuestionada como nunca antes.
Por 6 votos a favor y 3 en contra, la Corte Suprema anuló el uso de políticas de admisión racialmente discriminatorias en las universidades estadounidenses. La decisión del 29 de junio puso fin a la llamada discriminación positiva en la enseñanza superior, un antiguo objetivo de los conservadores.
El fallo se dejará sentir de inmediato cuando un millón de estudiantes de último curso de secundaria empiecen a solicitar su admisión en otoño en las universidades de todo el país.
«Estoy totalmente en desacuerdo con la decisión de la corte», dijo Biden en la Casa Blanca.
«Mucha gente cree erróneamente que la discriminación positiva permite que los estudiantes no cualificados sean admitidos antes que los cualificados. No es así como funcionan las admisiones universitarias», afirmó el presidente.
Luego instó a las universidades a tener en cuenta los desafíos únicos que cada estudiante ha soportado a lo largo de su vida, incluida la discriminación racial.
«Los estudiantes procedentes del 1% de las familias con mayores ingresos de Estados Unidos tienen 77 veces más probabilidades de entrar en una universidad de élite», señaló Biden.
Durante la entrevista en la MSNBC, también se le preguntó por qué el Departamento de Justicia tardó un año en iniciar una investigación sobre el expresidente Donald Trump en relación con su papel el 6 de enero.
En respuesta, hizo hincapié en la independencia del Departamento de Justicia.
«Me he comprometido a que no interferiría de ninguna manera con el Departamento de Justicia», dijo Biden, acusando a Trump de convertir en arma a las fuerzas del orden.
«Nunca me he dedicado a eso. No es mi papel hacerlo».
Con la contribución de Matthew Vadum.
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