Nuevas normas propuestas por el gobierno de Joe Biden exigirían a las aseguradoras de salud a cubrir ciertos anticonceptivos de venta libre, sin receta y sin costo alguno para los pacientes.
Los reglamentos propuestos requerirían la cobertura de píldoras anticonceptivas sin receta, recientemente aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), así como preservativos, anticonceptivos de emergencia y espermicidas en virtud de la Ley de Asistencia Asequible.
Las protecciones federales de conciencia para los empleadores y aseguradoras que se oponen a la anticoncepción por motivos morales, no se modificarían con estas normas.
«En un momento en que el acceso a la anticoncepción está siendo atacado, la vicepresidenta [Kamala] Harris y yo estamos decididos en nuestro compromiso de ampliar el acceso a la anticoncepción de calidad y asequible», dijo el presidente Joe Biden en una declaración el 21 de octubre.
«Nosotros creemos que las mujeres de todos los estados deben tener la libertad de tomar decisiones profundamente personales sobre el cuidado de su salud, incluido el derecho a decidir si quieren formar una familia o hacerla crecer y cuándo».
La propuesta se hizo apenas dos semanas antes de las elecciones presidenciales. Harris, la candidata demócrata, hizo de las cuestiones reproductivas un punto central de su campaña política.
La vicepresidenta calificó la norma propuesta como «la mayor ampliación de la cobertura anticonceptiva en más de una década» y según su declaración, afirmó que proporcionará «a millones de mujeres más opciones para acceder a la anticoncepción asequible, que necesitan y merecen».
La Ley de Asistencia Sanitaria Asequible ya obliga a la mayoría de las aseguradoras privadas a cubrir las píldoras anticonceptivas con receta sin costo alguno para las pacientes. La ley no incluye el control de la natalidad sin receta, que la FDA aprobó por primera vez en julio de 2023, con su aprobación de Opill.
La medida de ampliar la cobertura de los anticonceptivos se produjo tras la decisión de la Corte Suprema de 2022, en el caso Dobbs vs. Jackson Women’s Health Organization, que anuló el derecho federal al aborto. Los demócratas señalaron un endurecimiento de las restricciones al aborto en algunos estados a raíz de esa sentencia como motivo para temer restricciones similares en el acceso a los anticonceptivos.
En junio, los demócratas del Senado presentaron un proyecto de ley para establecer un derecho federal a la anticoncepción. El proyecto fue finalmente bloqueado por los republicanos, que señalaron que los anticonceptivos están ampliamente disponibles en los 50 estados.
«No es que ellos crean que hay un problema que realmente están tratando de resolver. Ellos están dando prioridad a sus propios intereses políticos partidistas a corto plazo», dijo entonces la senadora Katie Britt ( R-Ala.), que acusó a sus colegas de llevar a cabo un «verano de tácticas de intimidación» de cara a las elecciones presidenciales.
Algunos estados, como Missouri, han intentado restringir la financiación pública de la anticoncepción, a lo que algunos contribuyentes se oponen por principio. Sin embargo, ningún estado ha intentado recientemente prohibir o restringir el uso de anticonceptivos.
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