Biden fija la vista en la carrera de 2024 tras victoria en Carolina del Sur, pero se avecinan desafíos

¿Puede el presidente Biden, como algunos presidentes anteriores con bajos índices de aprobación, cambiar las cosas y ganar las elecciones de 2024?

Por Emel Akan
04 de febrero de 2024 7:14 PM Actualizado: 04 de febrero de 2024 7:14 PM

Después de conseguir una victoria decisiva en las primarias de Carolina del Sur el 3 de febrero, el presidente Joe Biden ha centrado su atención en la carrera presidencial de 2024. Sin embargo, enfrenta una serie de desafíos difíciles, incluidos índices de aprobación históricamente bajos, un problema fronterizo sin resolver y una crisis sustancial de inflación en el país, lo que sugiere que tiene un camino más alto que escalar.

El presidente Biden comenzó su campaña de reelección con índices de aprobación laboral muy bajos. Su desempeño es el segundo peor en la historia moderna para un presidente en su primer mandato. En promedio, el 39.8 por ciento de los estadounidenses aprobó su desempeño laboral en su tercer año en el cargo, según una encuesta reciente de Gallup.

Sólo Jimmy Carter obtuvo peores resultados entre los presidentes anteriores en la era de las encuestas Gallup, con un promedio del 37.4 por ciento en su tercer año.

Si bien algunos presidentes han experimentado mejoras significativas en su cuarto año, consiguiendo un segundo mandato, la pregunta sigue siendo si el presidente Biden podrá mejorar sus mediocres índices de aprobación y salir victorioso en la carrera de 2024.

Numerosas encuestas también han demostrado que el presidente Biden está detrás del expresidente Donald Trump en un hipotético enfrentamiento en las elecciones generales.

Según el promedio de encuestas de RealClearPolitics, el presidente está detrás del favorito republicano en cinco de los seis estados clave en el campo de batalla. Los resultados muestran que el presidente Biden perdió ante Donald Trump entre 0.2 y 7.2 puntos porcentuales entre los votantes registrados en Arizona, Georgia, Michigan, Nevada y Wisconsin. Sólo en Pensilvania mantiene una ligera ventaja de 0.3 puntos porcentuales.

Algunos demócratas, sin embargo, confían en las posibilidades del presidente Biden de ganar las elecciones de 2024, haciendo caso omiso de estas encuestas. Dicen que la “ola roja” pronosticada por las encuestas en las elecciones intermedias de 2022 nunca se materializó.

Del mismo modo, a pesar de las pesimistas encuestas, señalan que los demócratas superaron las expectativas en noviembre de 2023 en varias contiendas en todo el país. En Ohio, un bastión tradicionalmente republicano, por ejemplo, los jóvenes votantes demócratas del estado desempeñaron un papel importante al votar para proteger el derecho al aborto y aprobar la legalización de la marihuana recreativa en el estado.

La crisis de asequibilidad se cierne sobre Biden

Aunque el presidente Biden enfrenta desafíos para aumentar sus índices de aprobación, los indicadores económicos se mantienen saludables, lo que deja a muchos perplejos. La tasa de desempleo sigue siendo baja, la economía está creciendo con fuerza y los principales índices bursátiles (Dow Jones y S&P 500) han alcanzado recientemente niveles récord.

La economía estadounidense añadió 353,000 nuevos empleos en enero, casi duplicando las previsiones de los economistas y reflejando un mercado laboral sólido.

“El último tipo tuvo el peor historial laboral desde la Gran Depresión”, dijo el presidente Biden el 3 de febrero en una publicación en la plataforma de redes sociales X. “Nuestro historial es un poco diferente”.

Sin embargo, muchos estadounidenses todavía están descontentos. Y esto muestra la marcada disparidad entre los datos macroeconómicos y las realidades financieras que experimentan las personas y los hogares.

La tasa de inflación anual ha disminuido significativamente desde junio de 2022, pero los precios de muchos productos básicos siguen siendo aproximadamente un 20 por ciento más altos que cuando el presidente Biden asumió el cargo. Además, como las tasas hipotecarias y los costos de la vivienda siguen siendo altos, un número cada vez mayor de jóvenes estadounidenses están abandonando su sueño de ser propietarios de una vivienda. Austin Clauhs, de 28 años, residente de Charleston, Carolina del Sur, es uno de ellos.

“Si tienes mi edad, en torno a los 20 años, obviamente es difícil comprar una casa”, le dijo a The Epoch Times.

Clauhs dice que sus padres tienen opiniones políticas opuestas. Su madre, una demócrata de Nueva Jersey, se opone firmemente al expresidente, mientras que su padre, un republicano de Carolina del Norte, apoya al presidente Trump. El señor Clauhs se encuentra en el medio.

No obstante, cree que probablemente votará por el presidente Biden en noviembre.

«Realmente no quiero votar en sentido contrario», dice, describiéndose a sí mismo como «moderado».

Steve Traher, demócrata de Boston, Massachusetts, de 69 años, critica al presidente Biden por no prestar suficiente atención a los problemas más apremiantes que enfrenta la nación.

“Sí, puede que la inflación esté bajando, pero la gente no puede pagar el alquiler; no pueden permitirse el lujo de vivir”, le dijo Traher a The Epoch Times.

Los problemas críticos que afectan actualmente a los estadounidenses incluyen la inmigración, la crisis fronteriza y la asequibilidad, señaló.

“El presidente Biden y el Partido Demócrata en general consideran el aborto como su boleto para ganar. Lo siento, pero no lo es”, dijo.

Las primarias ponen a prueba el entusiasmo de los votantes negros

Tras su decisiva victoria en Carolina del Sur, el presidente Biden emitió una declaración recordando cómo el estado dio nueva vida a su campaña en 2020 y lo impulsó hacia el camino de ganar la presidencia.

“Ahora, en 2024, el pueblo de Carolina del Sur ha vuelto a hablar y no tengo ninguna duda de que nos han puesto en el camino para volver a ganar la presidencia y convertir a Donald Trump en un perdedor”, dijo el presidente Biden.

Encuestas recientes sugieren que pilares clave de la base demócrata, incluidos los votantes negros, hispanos y jóvenes, se están distanciando del presidente Biden. En una encuesta de AP-NORC de diciembre de 2023, por ejemplo, solo el 50 por ciento de los adultos negros aprobaba al presidente, frente al 86 por ciento en julio de 2021.

En sus recientes viajes a Carolina del Sur durante el mes pasado, el presidente Biden hizo un esfuerzo concertado para conectarse con los votantes negros. Estos esfuerzos parecen haber dado frutos, ya que hay un claro aumento del entusiasmo entre los votantes negros en las primarias de Carolina del Sur, según la campaña de Biden.

Los votantes negros representaron aproximadamente el 76 por ciento del voto anticipado, lo que supone un salto significativo con respecto al 56 por ciento en el electorado primario de 2020, según Michael Tyler, director de comunicaciones de Biden-Harris 2024.

“Los votantes negros acudieron a Carolina del Sur porque entienden que Joe Biden ha cumplido sus promesas”, le dijo Tyler a CNN el 3 de febrero.

Enfrentamiento a causa del proyecto de ley fronterizo

Sin embargo, noticias inesperadas de Washington empañaron la victoria del presidente Biden en Carolina del Sur. El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (R-La.), anunció el 3 de febrero su intención de avanzar con un proyecto de ley independiente para entregar financiación a Israel, distanciándose así del proyecto de ley bipartidista del Senado que vinculará las medidas de seguridad fronteriza con la ayuda a Ucrania e Israel.

La Casa Blanca calificó la medida de Johnson como una “maniobra política cínica”.

«Nos oponemos firmemente a esta estratagema», dijo la secretaria de prensa Karine Jean-Pierre en un comunicado de respuesta, añadiendo que no logra asegurar la frontera, no ofrece apoyo a Ucrania ni ofrece ayuda humanitaria a los civiles palestinos.

“Los republicanos de la Cámara de Representantes deberían, en cambio, trabajar de manera bipartidista, como lo están haciendo la administración y el Senado, en estas urgentes cuestiones de seguridad nacional”.

La semana pasada, el presidente prometió utilizar una autoridad ampliada para cerrar la frontera sur si el Congreso aprueba el proyecto de ley bipartidista anticipado por el Senado. Culpó a los republicanos de la Cámara de Representantes por bloquear el acuerdo.

Pero Johnson advirtió que cualquier acuerdo fronterizo que permitiera incluso un solo cruce ilegal sería “un fracaso”.

La inmigración ilegal ha eclipsado a la inflación como el problema más apremiante del país. Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, ha habido más de 8.5 millones de cruces ilegales en todo el país desde que el presidente Biden asumió el cargo.

Encuestas recientes revelan que el presidente Biden tiene el índice de aprobación más bajo en el tema de la inmigración. Algunos expertos culpan al presidente de retrasar demasiado el problema. Advierten que, si este problema persiste sin solución, puede representar un desafío considerable para el presidente en las próximas elecciones.

El multimillonario Elon Musk, con más de 170 millones de seguidores en su plataforma de redes sociales X, recientemente comenzó a compartir sus pensamientos sobre la crisis fronteriza, criticando al presidente en ejercicio.

En una de sus publicaciones, Musk dijo: “La estrategia de Biden es muy simple: 1. Traer tantos ilegales al país como sea posible. 2. Legalizarlos para crear una mayoría permanente: Un estado de partido único”.

“Por eso están fomentando tanta inmigración ilegal. Sencillo pero eficaz”, añadió.

Musk también comentó sobre el impacto del aumento de la inmigración ilegal en los costos de la vivienda, afirmando en otra publicación: «Si se pregunta por qué la vivienda es tan cara, este es un factor importante».


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