El 15 de noviembre, el presidente Joe Biden no asistió a una cena y a un acto al que tenía previsto asistir después de que un funcionario con el que se reunió a principios de la semana diera positivo en la prueba por COVID-19.
Biden, que se encontraba en Asia para asistir a la cumbre del Grupo de los 20 y a otros actos, optó por no asistir a la cena de gala del G20 con Joko Widodo, el presidente de Indonesia, y otros líderes mundiales.
Biden también tenía previsto asistir a lo que se describió como un evento cultural después de la cena.
La elección se produjo después de que el primer ministro camboyano Hun Sen, con quien Biden se reunió el fin de semana, diera positivo en la prueba por COVID-19.
«No es COVID. Acababa de pasar un día entero en reuniones y necesitaba atender algunas cosas esta noche (¡nada urgente!). Habló con Widodo para enviarle sus disculpas por haber faltado a la cena y Widodo le dijo que no era un problema y que espera verle mañana en lo de los manglares», dijo un funcionario de la Casa Blanca.
Biden dio negativo en la prueba por COVID-19 el martes por la mañana, según la Casa Blanca.
Biden, de 79 años, ya contrajo el COVID-19 anteriormente este año, a pesar de haber recibido una serie de vacunas primarias y un refuerzo. Las vacunas contra el COVID-19 proporcionan poca o ninguna protección contra la infección de la variante ómicron.
Durante la cumbre, Biden mantuvo reuniones programadas con la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el primer ministro indio Narendra Modi y Widodo, y una reunión no programada con el presidente turco Recep Tayyip Erdoğan.
Biden y Meloni hablaron de la coordinación en una serie de temas, incluidos los retos que plantea el régimen comunista chino, los problemas climáticos y Rusia, según un comunicado de la Casa Blanca. Biden discutió con Modi y Widodo su compromiso compartido de utilizar el G20 para la cooperación económica internacional y cómo abordar «las actuales crisis climática, energética y alimentaria», según un comunicado.
Con Erdoğan, Biden expresó su aprecio por los esfuerzos de Turquía para renovar una iniciativa sobre los cereales y las cuestiones relacionadas con la Organización del Tratado del Atlántico Norte, que está proporcionando armas y alimentos a Ucrania durante la guerra entre Rusia y Ucrania.
Biden dijo en declaraciones preparadas a la prensa que cree que los países del G20 van a salir de la pandemia del COVID-19 «más fuertes de lo que entramos» y que el grupo de naciones estaba «centrado en invertir juntos e invertir más fuerte de lo que hemos hecho en el pasado».
Uno de los nuevos esfuerzos anunciados durante la cumbre fue la Asociación para la Inversión y la Infraestructura Global, cuyo objetivo es invertir dinero para infraestructuras en países de ingresos bajos y medios. Los países del G20 quieren invertir 600,000 millones de dólares en cinco años.
«Las inversiones que hagamos juntos hoy tendrán un impacto de gran alcance en el mundo para las generaciones venideras. Si no las hacemos, también tendrán impactos de largo alcance —si no hacemos estas inversiones», dijo Biden. «Y así, crear oportunidades reales, mayor igualdad y un mundo más seguro, saludable y próspero es lo que pretendemos».
El presidente tenía previsto partir de Indonesia el 16 de noviembre tras reunirse con el primer ministro británico Rishi Sunak, y llegar a Washington el jueves.
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