El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy y el presidente Joe Biden definieron claramente sus puntos de desacuerdo sobre el aumento del techo de la deuda y el recorte del gasto federal, allanando el camino para que los negociadores de ambas partes lleguen a un acuerdo.
Tras una conversación de 90 minutos en la Casa Blanca el 22 de mayo, McCarthy describió la reunión en términos positivos. El portavoz también dijo a los periodistas que creía que el Congreso podría aprobar un acuerdo antes de que el país incumpla el pago de su deuda, lo que podría ocurrir el 1 de junio.
«Creo que el tono de esta noche ha sido mejor que en cualquier otra ocasión en la que hayamos mantenido conversaciones», dijo McCarthy. «Todavía tendremos algunas diferencias filosóficas, pero sentí que fue productivo (…) y creo que pudimos centrarnos realmente en las áreas de diferencia».
El presidente también calificó la reunión en términos positivos y ofreció esperanzas de un próximo acuerdo para elevar el techo de la deuda de la nación, que asciende a 31.4 billones de dólares.
«Acabo de concluir una productiva reunión con el presidente McCarthy sobre la necesidad de prevenir el impago y evitar una catástrofe para nuestra economía», escribió el presidente Biden.
«Reiteramos una vez más que el impago está fuera de la mesa y que la única manera de avanzar es de buena fe hacia un acuerdo bipartidista. Si bien hay áreas de desacuerdo, el presidente y yo, y sus principales negociadores, el presidente de comité McHenry, y el congresista Graves, y nuestro personal, seguiremos discutiendo el camino a seguir».
El representante Patrick McHenry (R-N.C.), que ha sido uno de los principales negociadores de los republicanos, dijo que la reunión proporcionó la claridad de ambos líderes que sus equipos de negociación necesitaban para elaborar los detalles de un acuerdo.
«Recibimos muy buenas indicaciones del presidente de la Cámara y del presidente, del presidente de la Cámara a su equipo y del presidente a su equipo en la misma sala. Estamos en la misma página donde el mismo set de cuestiones que se llevó para ser abordado fue productivo», dijo McHenry.
«Los equipos presentes en la sala han establecido un cierto nivel de relación y confianza que nos permite llegar a un acuerdo mutuo», añadió McHenry.
McCarthy se negó a nombrar los puntos de acuerdo alcanzados o las concesiones hechas por cada parte. «No hay nada acordado. Se está hablando de todo». «No acordamos nada hasta que acordemos todo», añadió McCarthy en una rueda de prensa posterior en el Capitolio.
Los republicanos han exigido limitar el gasto federal de 2024 al nivel de 2023, limitar los aumentos del gasto al 1% anual, aumentar los requisitos de trabajo para algunos beneficiarios de Medicaid y del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria, recuperar los fondos COVID-19 no gastados y flexibilizar los requisitos para la concesión de permisos de petróleo y gas.
Sin embargo, McCarthy dijo que solo dos puntos no son negociables.
«Desde el primer día que me senté con el presidente, hemos tenido dos criterios. Le dije que no íbamos a subir los impuestos porque ingresamos más dinero que nunca y no vamos a aprobar un techo de deuda limpio», dijo McCarthy.
«Todo lo demás está abierto a negociaciones. Pero al final, tiene que encajar en ese lugar».
McHenry y otros negociadores se reunirán ahora para encontrar un terreno común basado en las prioridades expuestas en la reunión con Biden, según McCarthy.
«Creo que el presidente y yo vamos a hablar todos los días para intentar encontrar la manera de conseguirlo», dijo McCarthy.
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