El precio del bitcoin se ha estabilizado después de una espectacular caída repentina que hizo que la criptodivisa cayera casi un 19% intradía el martes —el día en que El Salvador la adoptó como moneda de curso legal— pero los analistas dicen que los inversores deberían prepararse para más volatilidad.
«Las liquidaciones posteriores pueden empujar los precios durante unos días», escribió el técnico en criptodivisas Daniel Joe, en una nota analítica en CryptoPotato.
A primera hora del jueves, el bitcoin operaba perpendicularmente en un patrón de V más estrecho en torno a la marca de 46,000 dólares, una configuración técnica que sugiere que está preparado para una explosión, ya sea al alza o a la baja.
«La acción del precio de Bitcoin encuentra soporte a corto plazo, pero la inclinación sigue siendo mixta», escribió el equipo de criptodivisas de FXStreet, en una nota de análisis, añadiendo que la criptodivisa está «entre dos zonas clave que dictarán la tendencia futura», es decir, alrededor de 48,000 dólares y 44,500 dólares.
A las 5:06 de la mañana, hora de Nueva York, el bitcoin cotizaba a 46,298 dólares en Coinbase y seguía haciendo rebotes más cortos entre las líneas de tendencia mientras se acercaba al vértice de la cuña.
A más corto plazo, los analistas de FXStreet abogan por una mayor inclinación a la baja.
Las perspectivas a más largo plazo, según Daniel Joe, son más optimistas.
«Aunque la acción del precio parece bajista a corto plazo, los aspectos técnicos fundamentales, de mayor marco temporal, en la cadena, y el impulso permanecen en una tendencia alcista, lo que sugiere que esto es solo un evento de liquidación y que se producirá una continuación alcista», escribió Joe.
Un nuevo equipo de investigación de criptomonedas de Standard Chartered ha predicho que el bitcoin duplicará su valor y alcanzará los 100,000 dólares a principios del próximo año. A largo plazo, el equipo cree que el bitcoin podría llegar a valer 175,000 dólares.
Aunque no hay un catalizador claro para la fuerte venta del bitcoin, los analistas apuntan a una serie de factores, entre los que se incluye que los inversores compraron el rumor de que El Salvador adoptaría la criptodivisa como moneda de curso legal, y luego vendieron el hecho.
«Creo que había cierta expectación antes de ese acontecimiento [de El Salvador], similar a la que vimos antes de que Coinbase cotizara en el Nasdaq», dijo Henrik Andersson, director de inversiones de Apollo Capital, un fondo de criptoactivos de Melbourne, Australia.
«El obtener ganancias estaba muy presente», dijo Naeem Aslam, analista jefe de mercado con sede en Londres de la agencia de corredores AvaTrade, a The Wall Street Journal. «En nuestra opinión, es un retroceso muy saludable».
Daniel Joe argumentó que un factor importante en lo abrupto de la venta fue que los inversores no pudieron cumplir con los requisitos de margen para las posiciones de excesivo endeudamiento.
«La velocidad de la caída masiva de los precios hizo que pareciera que las ballenas [quienes poseen grandes cantidades de bitcoins] y los titulares a largo plazo estaban deshaciéndose, pero en su mayoría se trataba de liquidaciones forzadas que ocurrieron todas a la vez, haciendo que los precios cayeran hasta la siguiente oferta», escribió.
«Este es el precio que paga el mercado por añadir apalancamiento [deuda] y derivados. Cuando el interés abierto aumenta rápidamente o una operación se acumula, el apalancamiento tiende a desaparecer», añadió.
Mientras tanto, el experimento de El Salvador de hacer del bitcoin una moneda de curso legal se vio empañado el día de su adopción por pequeños fallos técnicos que dificultaron su uso, al mismo tiempo que estallaron en el país protestas en la calles de ciudadanos que desconfiaban.
Con información de Reuters.
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