El senador Bob Casey (D-Pa.) reconoció el triunfo de su oponente republicano para la carrera al Senado por Pensilvania, después de semanas de mantener que podía ganar una carrera ya definida por los medios de comunicación el 7 de noviembre.
«Acabo de llamar a Dave McCormick para felicitarle por ser elegido para representar a Pensilvania en el Senado de Estados Unidos», dijo Casey, de 64 años, el 21 de noviembre, en un vídeo posteado en las redes sociales.
El senador electo, McCormick (R-Pa.), de 59 años, ya se dirigió a Washington para recibir orientación mientras se prepara para jurar su cargo el 3 de enero de 2025.
Los resultados casi definitivos no-oficiales mostraban a McCormick liderando por unos 30,000 votos, según el anuncio a principios de noviembre del secretario de la Mancomunidad de Pensilvania, Al Schmidt. El margen entre ambos era inferior al 0.5%, lo que provocó un recuento automático.
Los resultados del recuento no se harán públicos hasta el 27 de noviembre. Casey no mencionó el recuento en su anuncio de reconocimiento, y dijo que se retiraba después de que el Departamento de Estado de Pensilvania anunciara que todos los condados habían completado el recuento inicial de los votos emitidos en las elecciones.
Los resultados actuales del departamento muestran a McCormick liderando con 3.398 millones de votos frente a los 3.382 millones de Casey.
Casey afirmó que estaba orgulloso de que su equipo hubiera luchado para «otorgar derechos a los votantes» en todo el estado, sin importar a quién votaran, siempre y cuando votaran legalmente.
Él destacó un caso legal presentado por McCormick y otros republicanos que desafiaban a la Junta Electoral del Condado de Filadelfia por su decisión de contar casi 1000 votos provisionales a pesar de que las papeletas tenían errores, incluyendo algunas con declaraciones juradas de votantes incorrectas o inexistentes. Un juez desestimó el caso, lo que significa que las papeletas fueron contadas.
La Corte Suprema de Pensilvania ordenó por separado a las juntas de Filadelfia y otros condados que no contaran las papeletas a las que les faltaban fechas.
El senador Casey, que lleva en el cargo desde 2007, indicó que estaba agradecido a los funcionarios electorales y otras personas que trabajaron para asegurarse de que «cada voto elegible emitido pudiera ser contado». También dio las gracias a su familia, al personal de su campaña y a los empleados de su oficina en el Senado.
«Pero sobre todo, quiero dar las gracias al pueblo de Pensilvania por concederme el privilegio de servirles durante 28 años consecutivos en cargos públicos, como Auditor General, Tesorero del Estado y Senador de Estados Unidos».
Los republicanos consiguieron varios escaños en el Senado, incluido el que ocupa Casey, por lo que tomarán el control del Senado en enero.
McCormick declaró en la plataforma de medios sociales X que Casey «dedicó su carrera a mejorar nuestra mancomunidad». También indicó que él y su esposa estaban agradecidos por el servicio, el trabajo duro y el sacrificio de Casey y su familia.
«Me siento muy honrado de representar a todos y cada uno de los ciudadanos de Pensilvania en el Senado de Estados Unidos y lucharé por ustedes todos los días», dijo McCormick. «¡Gracias!».
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