Las autoridades bolivianas han decidido este martes «encapsular» a la ciudad de Montero desde este próximo jueves, al considerarla uno de los focos de contagio por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como nuevo coronavirus, por alrededor de una veintena de casos reportados, en la primera medida de este tipo para una urbe importante en Bolivia.
El ministro interino de Defensa, Luis Fernando López, declaró a los medios que la «decisión más importante» implica que «a partir del día jueves a las 00.00 (4.00 GMT) horas vamos a encapsular Montero».
López anunció esa determinación tras una reunión con el delegado presidencial en el departamento de Santa Cruz, el ministro interino Wilfredo Rojo, el gobernador cruceño, Rubén Costas, y el alcalde de Montero, Miguel Ángel Hurtado, en esa ciudad.
El titular interino de Defensa detalló que ese aislamiento implica establecer un proceso de «movilidad cero» en esta ciudad de más de 110.000 habitantes a 62 kilómetros de Santa Cruz, que es la urbe más poblada de Bolivia con más de un millón y medio de habitantes.
A lo largo de las horas previas se espera que se emita una ley municipal para detallar las características de esta cuarentena estricta.
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López declaró que la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, «está alarmada por la cantidad de casos positivos» en esa ciudad cruceña, conocida por la producción de azúcar y un importante ingenio azucarero en la zona.
La provisión de comida está prevista, para que los productos básicos no falten a la población, además de la entrega de un paquete de alimentos o canasta familiar para familias con menos posibilidades económicas, apuntó.
Un último reporte del Ministerio de Salud estableció catorce fallecidos y 194 casos confirmados de COVID-19 en Bolivia, prácticamente la mitad en Santa Cruz, la región más poblada y extensa, además de motor económico del país.
Una de las medidas inmediatas en Montero es el traslado de pacientes con coronavirus a hospitales de Santa Cruz para «aliviar el sistema de salud montereño», explicó a los periodistas el secretario de Salud de la Gobernación cruceña, Óscar Urenda.
Antes de esta decisión para Montero acordada por las autoridades algunas ciudades bolivianas habían decidido por su cuenta aislarse, pero no se había tomado una medida similar obligatoria en una urbe con tanta población.
La pequeña localidad de Patacamaya hace una semana está en cuarentena total debido al deceso de una persona que se cree contrajo el virus durante una masiva fiesta patronal pese a que estaba prohibido.
Por contra, uno de los casos esperanzadores en Bolivia de control del COVID-19 es Oruro, una ciudad andina que hace más de dos semanas no presenta casos nuevos después de los ocho primeros y que se mantiene en una cuarentena estricta.
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