El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, recibió este martes el alta médica tras pasar la noche ingresado en un hospital de Brasilia por dolores abdominales, informaron fuentes oficiales.
«Buenos días con una óptima noticia. ¡El Presidente ya recibió el alta y está muy bien!», escribió en sus redes sociales el ministro de las Comunicaciones, Fabio Faria.
La primera dama, Michelle Bolsonaro, también confirmó el alta hospitalaria esta mañana y agradeció las «oraciones» recibidas.
«¡Buen día! Recibimos el alta. Glorias a Dios. Gracias a todos por las oraciones. Que Dios os bendiga», señaló en sus redes sociales.
Bolsonaro fue hospitalizado en Brasilia a última hora del lunes tras sentir molestias abdominales, informó el ministro Faria.
Bolsonaro, de 67 años, fue trasladado al Hospital del Ejército en Brasilia para ser sometido a unos análisis médicos, dijo Faria, señalando que «está bien».
El presidente se sintió mal y acudió al hospital para que le hicieran los análisis ya que tiene un historial de obstrucciones intestinales, añadió.
El presidente fue sometido a múltiples cirugías de emergencia después de ser apuñalado durante su anterior campaña electoral, en septiembre de 2018. También fue sometido a varias cirugías para corregir una hernia en la zona herida.
La última vez fue hospitalizado en enero para eliminar una obstrucción intestinal y le dieron de alta dos días después sin necesidad de cirugía.
«Ya estoy de alta. Gracias a todos», dijo Bolsonaro en Twitter en enero, compartiendo una fotografía suya junto a sus médicos mostrando un pulgar hacia arriba.
En julio del año pasado, tras 11 días de síntomas fue hospitalizado con fuertes dolores de estómago que los médicos también trataron sin necesidad de cirugía.
Bolsonaro, quien comenzó en octubre a hacer campaña para ser reelegido, debía asistir a una reunión política del Partido Republicano, pero no se presentó, informaron los medios locales.
El presidente del partido, Marcos Pereira, dijo durante el evento que el presidente había ido al hospital sintiéndose mal, citó a un ayudante de Pereira.
El presidente conservador inició el domingo su campaña de reelección.
«Primera dama, reciba mis saludos, nuestras oraciones», dijo Pereira a los asistentes. «Estoy seguro de que el presidente está bien: son unas pruebas que se está haciendo, por eso no está aquí».
En agosto del año pasado, Bolsonaro dijo que ve tres alternativas para su futuro: ganar las elecciones presidenciales de 2022, morir o ir a la cárcel.
«Tengo tres alternativas para mi futuro: ser arrestado, ser asesinado o ganar» las elecciones, dijo Bolsonaro en una reunión de líderes evangélicos. Bolsonaro añadió después que la primera opción había sido descartada. «Ningún hombre en la Tierra me amenazará».
El año pasado cuestionó el sistema de votación electrónica de Brasil y pidió la adopción de recibos impresos, diciendo que las boletas electrónicas son vulnerables al fraude.
Bolsonaro fue apuñalado en la ciudad de Juiz de Fora en 2018, en un incidente en que quedó en estado grave. Un hombre se abalanzó sobre él mientras un simpatizante lo llevaba por los hombros a través de la multitud y lo apuñaló en el abdomen.
En ese momento su hijo dijo en Twitter que Bolsonaro estaba «casi muerto» cuando llegó al hospital Santa Casa de Misericordia.
Con información de Reuters y EFE.
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