Los pronósticos de este miércoles indican que el clima podría seguir impulsando incendios en el sur de California, una situación que el Servicio Meteorológico Nacional en Los Ángeles ha descrito como «particularmente peligrosa».
Los bomberos recibieron cierto respiro el martes, ya que los vientos fueron inesperadamente suaves, lo que les permitió avanzar en la sofocación de los incendios de Los Ángeles y extinguir rápidamente varios fuegos más pequeños que habían surgido en el territorio.
Miles de hogares de Los Ángeles y otros lugares han sido arrasados por los múltiples incendios que asolan la ciudad desde hace más de una semana.
Con alrededor de 13 personas aún desaparecidas, es probable que aumente la cifra de 25 muertos, dijo el martes el sheriff del condado de Los Ángeles, Robert Luna.
Algo menos de 90,000 personas en el condado de Los Ángeles siguen bajo órdenes de evacuación, la mitad que la semana pasada.
El incendio Eaton, al norte de Los Ángeles, y el incendio Palisades, que arrasó gran parte de la zona costera de Pacific Palisades, comenzaron el 7 de enero en condiciones climáticas similares a las previstas para este miércoles.
En la actualidad, el incendio de Eaton está contenido en un 45%, mientras que el incendio de Palisades está contenido en un 19%.
Los cuatro incendios más grandes alrededor de Los Ángeles han quemado más de 63 millas cuadradas, un área similar en tamaño a Washington, DC.
Los fuertes vientos de Santa Ana de la semana pasada avivaron las llamas rápidamente y arrastraron las brasas de los incendios, en algunos casos, a kilómetros de distancia.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió alertas rojas para el miércoles, desde las 3 a.m. hasta las 3 p.m., abarcando 275 millas desde la Costa Central hasta la frontera con México, indicando que los vientos podrían alcanzar picos de alrededor de 70 mph.
Las alertas rojas o avisos meteorológicos de incendio se emiten cuando las temperaturas son cálidas, la humedad es baja y se prevén vientos fuertes.
La designación de «situación particularmente peligrosa» está en vigor para un área que incluye partes del condado de Los Ángeles y el vecino condado de Ventura.
«Mensaje clave: No estamos fuera de peligro todavía. Por favor, manténgase en guardia para un fuego de rápido movimiento. Los vientos han soplado mal hoy, pero entre esta noche y mañana podría producirse una nueva mejora», dijo el servicio meteorológico en un posteo en las redes sociales a última hora del martes.
Más de 80,000 hogares se encuentran sin electricidad, ya que las compañías eléctricas cortaron el suministro para evitar que las líneas desaten nuevos incendios, y los residentes han sido advertidos de estar preparados para emprender la huida en cualquier momento.
La policía informó hasta ahora de unas 50 detenciones, por saqueos, por vuelo de drones en zonas incendiadas, violación del toque de queda y otros delitos.
Las autoridades aún no han determinado qué provocó los grandes incendios.
Un hombre fue acusado de incendio provocado por iniciar intencionadamente un fuego en Azusa, dijo el lunes el fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, Nathan Hochman.
Nueve personas se enfrentan también a cargos por delitos graves en relación con robos en viviendas evacuadas en Pacific Palisades y Altadena, declaró Hochman.
«Estos crímenes son atroces y representan un ataque directo a nuestra comunidad en un momento de pérdida y vulnerabilidad sin precedentes».
«Permítanme ser claro: si explotan esta tragedia aprovechándose de las víctimas de estos incendios mortales, les encontraremos y les procesaremos con todo el peso de la ley», dijo el fiscal en la declaración.
Para proteger a las comunidades, el gobernador Gavin Newsom desplegó a 2500 miembros de la Guardia Nacional de California.
En preparación para el posible regreso de los fuertes vientos, la respuesta a los incendios de California se ha reforzado con bomberos de otros estados. Los aviones también rociaron viviendas y laderas con productos químicos retardantes del fuego, mientras que las cuadrillas y camiones de bomberos ya se han desplegado en puntos especialmente vulnerables con matorrales secos.
No se espera que los vientos alcancen las mismas velocidades feroces vistas la semana pasada, pero podrían dejar en tierra a los aviones de extinción de incendios, dijo el jefe de bomberos del condado de Los Ángeles, Anthony Marrone.
El jefe de bomberos instó a las personas sin hogar a evitar encender fuego para calentarse y a buscar refugio.
Prácticamente, sin lluvia desde abril de 2024, la zona ha tenido más de una docena de incendios forestales este año, la mayoría en el área metropolitana de Los Ángeles.
En términos de costo financiero, AccuWeather estima que los daños y las pérdidas económicas totales se sitúan entre 250,000 y 275,000 millones de dólares, lo que lo convertiría en el desastre natural más costoso de la historia de Estados Unidos.
Con información de Associated Press y Reuters.
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