Las autoridades sanitarias informaron el 25 de octubre de que el brote de E. coli relacionado con las hamburguesas de cuarto de libra de McDonald’s se extendió y enfermó a más personas, con 75 pacientes en 13 estados, incluidas 22 personas hospitalizadas y un fallecido.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades anunciaron por primera vez el brote el 22 de octubre, afirmando que las investigaciones iniciales sugerían que las cebollas fileteadas utilizadas en los cuartos de libra podrían ser la fuente de las infecciones de E. coli, que en aquel momento ascendían a 49 pacientes en 10 estados.
Ahora, en una actualización del 25 de octubre, los CDC señalaron que notificaron 26 casos más, que 12 personas más fueron hospitalizadas y que el brote se extendió a otros tres estados: Michigan, Nuevo México y Washington.
«Se notificaron más enfermedades y todas las personas entrevistadas siguen declarando haber comido en McDonald’s antes de que comenzara su enfermedad», dijeron los CDC en la actualización del viernes. «Las hamburguesas Quarter Pounder de McDonald’s están enfermando a la gente».
La mayoría de los casos de E. coli se reportaron en Colorado y Nebraska, donde existen 26 y 15 casos, respectivamente, informaron los CDC. También se notificaron infecciones en Oregón, Montana, Wyoming, Utah, Kansas, Iowa, Misuri y Wisconsin.
«Es posible que este brote no se limite a los estados con casos conocidos, y es probable que el número real de enfermos sea mucho mayor que el notificado», señalaron los CDC en una declaración.
La razón por la que los CDC crean que hay más infecciones de las que se han notificado es que muchas personas se recuperan de las infecciones por E. coli sin tratamiento médico y no se hacen las pruebas.
Los síntomas de las infecciones por E. coli suelen incluir calambres estomacales intensos, diarrea (a menudo sanguinolenta) y vómitos, que suelen comenzar 3-4 días después de la exposición. La mayoría de las personas se recuperan en una semana, pero los casos graves pueden provocar síndrome urémico hemolítico, una afección potencialmente mortal que puede causar insuficiencia renal.
Los CDC recomendaron a las personas que hayan consumido un cuarto de libra de McDonald’s y presenten síntomas como diarrea sanguinolenta, fiebre de más de 38 grados o deshidratación, que acudan inmediatamente al médico.
Los casos de enfermedad comenzaron a aparecer el 27 de septiembre, y la última infección confirmada se produjo el 10 de octubre, según la actualización más reciente de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Hasta la fecha, dos personas desarrollaron síndrome urémico hemolítico y una, un adulto mayor de Colorado, falleció.
Aunque aún no se ha confirmado el origen exacto del brote, una investigación de la FDA sugiere que las cebollas fileteadas son las probables culpables.
«La FDA está utilizando todas las herramientas disponibles para confirmar si las cebollas son la fuente de este brote», informó la agencia en una actualización del 25 de octubre. «Esto incluye trabajar con socios federales y estatales y las empresas involucradas para recopilar y evaluar los registros y la información de distribución como parte de nuestra investigación de rastreo».
Taylor Farms, el proveedor de las cebollas fileteadas para los locales de McDonald’s afectados, puso en marcha una retirada voluntaria del producto, que también se vendió a otros clientes de servicios de alimentos. La FDA declaró que los clientes que recibieron las cebollas retiradas han sido notificados.
Yum Brands declaró el 24 de octubre que retiraría las cebollas frescas de sus comidas en ciertos restaurantes Taco Bell, Pizza Hut y KFC por «abundancia de precaución» a la luz del brote. Restaurant Brands International, propietaria de Burger King, indicó que alrededor del 5% de los restaurantes retiraron las cebollas frescas del menú.
En una declaración del 23 de octubre, el director de la cadena de suministro de McDonald’s en Norteamérica, César Pina, informó que el brote está relacionado con las cebollas utilizadas en los cuartos de libra, que ya fueron retiradas de los menús de los restaurantes de las zonas afectadas.
«Como resultado, y en línea con nuestros protocolos de seguridad, todos los restaurantes locales recibieron instrucciones de retirar este producto de su suministro y hemos pausado la distribución de todas las cebollas fileteadas en la zona afectada», dijo Pina en la declaración. «Seguiremos trabajando con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y nos comprometemos a proporcionar actualizaciones oportunas a medida que restauremos nuestro menú completo».
«Nos tomamos la seguridad alimentaria muy en serio y eso es lo que hay que hacer».
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