Buques de la Guardia Costera china y filipina chocan en aguas en disputa

Beijing y Manila se culpan mutuamente de la colisión

Por Lily Zhou
25 de agosto de 2024 2:09 PM Actualizado: 25 de agosto de 2024 2:09 PM

Buques guardacostas de China y Filipinas se culpan mutuamente tras colisión ocurrida el domingo en el disputado Mar de China Meridional.

Es el segundo incidente de colisión de buques en una semana y se produjo un día después de que Filipinas condenara a la Fuerza Aérea china por lanzar bengalas contra un avión de patrulla filipino.

Según las autoridades filipinas, el incidente se produjo el domingo por la tarde, cuando el BRP Datu Sanday (MMOV 3002) de Filipinas se dirigía a “reabastecer a los pescadores filipinos con diésel, alimentos y suministros médicos”. El motor del buque falló tras la colisión.

Los guardacostas chinos acusaron al MMOV 3002 de colisionar deliberadamente con un buque chino, mientras que Filipinas afirmó que el intento de los guardacostas chinos de rodear y bloquear al buque filipino provocó la colisión y publicó imágenes del incidente.

En dos declaraciones publicadas en las redes sociales chinas, Gan Yu, portavoz de la Guardia Costera china, afirmó que el MMOV 3002 había “invadido” la zona marítima próxima a Sabina Shoal, en las islas Spratly, a pesar de las advertencias de la parte china.

Gan afirmó que el MMOV 3002 causó el incidente al acercarse a un buque de la Guardia Costera china “de forma peligrosa y embistiéndolo deliberadamente”, y añadió que Filipinas debía asumir toda la responsabilidad.

Gan también reiteró la reivindicación territorial del régimen chino sobre las islas Spratly y las zonas marítimas circundantes, y apuntó a la presunta “intrusión, provocación, difamación y sensacionalismo” que Filipinas llevaba a cabo en la zona marítima.

En respuesta, Filipinas dijo que el MMOV 3002 había “encontrado maniobras agresivas y peligrosas de ocho fuerzas marítimas chinas” en una declaración publicada en la plataforma de redes sociales X.

El Grupo de Trabajo Nacional para el Mar de Filipinas Occidental (NTF-WPS), un grupo de trabajo interinstitucional formado por el Departamento de Defensa Nacional, las Fuerzas Armadas de Filipinas y la Guardia Costera filipina, declaró que los buques chinos habían “intentado rodear y bloquear” al buque filipino y “realizado maniobras peligrosas de aproximación que desembocaron en embestidas, bocinazos y despliegue de cañones de agua” contra el buque filipino, lo que finalmente provocó la avería de su motor.

“Estas acciones poco profesionales, agresivas e ilegales supusieron graves riesgos para la seguridad de la tripulación filipina y de los pescadores a los que debían servir. A pesar de estas maniobras de provocación, la tripulación a bordo del buque de la BFAR [Oficina de Pesca y Recursos Acuáticos] mantiene la moral alta y permanece a salvo e ilesa.

“Las afirmaciones que sugieren que nuestro personal cayó por la borda y fue rescatado posteriormente por los guardacostas chinos son completamente infundadas”, declaró el NTF-WPS, añadiendo que la “desinformación sirve como una clara ilustración” de la “voluntad del régimen chino de distorsionar la verdad y participar en la desinformación para reforzar su imagen pública”.

En reacción al incidente en X, la embajadora estadounidense MaryKay Carlson dijo que la “conducta insegura, ilegal y agresiva” de Beijing había “perturbado una misión legal filipina, poniendo vidas en peligro”, lo que representa “la última de múltiples acciones peligrosas de la RPC”, utilizando el acrónimo oficial de la República Popular China bajo el gobierno del Partido Comunista Chino.

“Nos mantenemos firmes en el apoyo a nuestros #AmigosSociosAliados [filipinos]”, escribió.

El incidente se produjo sobre el Scarborough Shoal, en el mar de China Meridional, un atolón de 58 millas cuadradas que ha sido objeto de una disputa de años entre Filipinas y China.

Los pescadores filipinos frecuentan el atolón, una cadena de arrecifes a unas 220 millas de Manila. Sin embargo, China considera el territorio como propio y da a conocer periódicamente su presencia militar en la zona.

En 2016, la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya falló a favor de Filipinas en su disputa con el régimen chino en el mar de China Meridional. Beijing rechazó el fallo y sigue reclamando la propiedad del territorio.

El régimen chino reclama como suya casi la totalidad del Mar de China Meridional, lo que enemista a países vecinos como Vietnam, Brunei, Malasia y Taiwán, que dependen de la región para la pesca y el comercio. Por el mar de China Meridional transitan anualmente intercambios comerciales por valor de unos 3 billones de dólares, y se cree que la vía fluvial es rica en yacimientos de petróleo y gas natural.

El 19 de agosto, China y Filipinas se culparon mutuamente tras dos colisiones entre sus buques guardacostas.

Catherine Yang contribuyó a este artículo


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