Desde Starbucks hasta Red Bull y Coca-Cola, la cafeína se ha convertido en el sustento energético para el 75 por ciento de los estadounidenses que la consumen a diario. Es la chispa que enciende nuestro cerebro y nuestro cuerpo para superar un largo día.
Sin embargo, no toda la cafeína se presenta igual, según una investigación emergente que demuestra que la cafeína sintética puede acelerar el envejecimiento, mientras que la cafeína natural podría frenar el deterioro relacionado con la edad.
¿La cafeína sintética acelera el envejecimiento?
El tipo de cafeína en el café puede influir en su efecto protector contra el envejecimiento.
Aproximadamente el 60 por ciento de la cafeína que consumen los estadounidenses se sintetiza en un laboratorio, lo que significa que no proviene de fuentes naturales como los granos de café o las plantas de té. La cafeína sintética es lo que empresas populares como Pepsi, Coca-Cola y Red Bull incorporan en sus bebidas para darles un toque extra.
En un estudio de 2017 publicado en Nutrition & Metabolism, una mayor ingesta de cafeína se asoció con telómeros más cortos, un marcador del envejecimiento celular, en adultos. Sin embargo, el aumento del consumo de café estuvo relacionado con telómeros más largos. Esto sugiere que compuestos además de la cafeína pueden proporcionar efectos antienvejecimiento. «A primera vista, se podría suponer que la ingesta de cafeína y el consumo de café son esencialmente la misma variable», escribieron los investigadores. «Pero no es así».
Estos hallazgos se hacen eco de otros hallazgos anteriores que descubrieron que un mayor consumo de café se asociaba con telómeros más largos entre 4780 enfermeras en el Reino Unido.
Sin embargo, un estudio de 2023 publicado en Nutrients encontró que el café instantáneo se asocia negativamente con la longitud de los telómeros, potencialmente debido a un mayor contenido de plomo mineral que daña el ADN. El café filtrado estándar no mostró efectos adversos.
Las investigaciones también indican que el té verde podría proteger contra el acortamiento de los telómeros, mientras que la cafeína sintética indica daños en el ADN. «Por lo tanto, según nuestros hallazgos», articularon los autores de un estudio que investiga el té verde, el café y la cafeína de los refrescos, «sugerimos efectos beneficiosos del consumo de té verde y efectos potencialmente desventajosos del consumo de refrescos sobre la reducción de LTL, lo que puede reflejan un envejecimiento biológico acelerado”.
Los secretos antienvejecimiento del café y el té
Según algunas investigaciones, es probable que múltiples compuestos antioxidantes presentes en el café y el té contribuyan a sus efectos antienvejecimiento.
Los estudios demuestran que el café y el té protegen la integridad del ADN y reducen el daño oxidativo. En un estudio controlado aleatorio en el que participaron 50 hombres y 50 mujeres, el café tostado oscuro redujo el daño al ADN en un 23 por ciento en sólo cuatro semanas. Se identificaron resultados similares en otro estudio intervencionista de ocho semanas que incluyó a 96 adultos.
«La cafeína que se encuentra en el café o el té existe en una matriz de más de 1000 compuestos químicos, en particular compuestos polifenólicos que tienen potentes efectos antioxidantes», explicó a The Epoch Times David Wiss, doctor en salud pública y dietista-nutricionista titulado. Se sabe que los polifenoles reducen el estrés oxidativo al eliminar los radicales libres que pueden causar daños celulares, añadió. Por esta razón, dijo, tanto el café como el té tienen propiedades antiinflamatorias que “la cafeína aislada no ofrece”.
Si bien el café y el té han demostrado efectos protectores contra afecciones neurogenerativas como el Parkinson y el Alzheimer, algunas investigaciones muestran que la cafeína aislada no protege contra la neurodegeneración. El café puede seguir siendo la mejor fuente de cafeína para proteger contra la enfermedad de Alzheimer debido a un componente que tiene sinergia con la cafeína para mejorar la protección contra la progresión de la enfermedad.
¿Cuánto es demasiada cafeína?
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) recomienda consumir no más de 400 miligramos de cafeína, aproximadamente cuatro o cinco tazas de café, al día.
Mientras que un alimento con cafeína natural como el chocolate contiene aproximadamente 12 miligramos de cafeína, y bebidas como el café y el té contienen hasta 95 miligramos de cafeína natural por porción, las bebidas energéticas pueden contener hasta 300 gramos de cafeína sintética por porción.
Si bien este aumento en el contenido de cafeína se ha asociado con ataques cardíacos en los jóvenes, estudios contrastantes muestran que el café y el té tienen efectos cardioprotectores.
La dependencia estadounidense de la cafeína (tanto natural como sintética) refleja una “crisis de adicción” que es problemática, afirmó Wiss. «Nuestra sociedad depende demasiado de la cafeína como estimulante», añadió.
Recomienda desayunar antes de tomar cafeína y esperar de 60 a 90 minutos después de despertarse antes de consumir bebidas con cafeína u otras fuentes de cafeína. «Mi otra recomendación es tomar un descanso de la cafeína de tres días (o más) cada tres a seis meses», añadió.
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