El gobernador de California, Gavin Newsom, anunció la instalación de cientos de cámaras en Oakland y East Bay en un esfuerzo por mejorar la seguridad pública, una medida criticada por crear un estado de vigilancia.
La Patrulla de Caminos de California (CHP) celebró un contrato con la empresa de tecnología de lucha contra el crimen Flock Safety, con sede en Georgia, para instalar aproximadamente 480 cámaras de alta tecnología en un intento por “combatir la actividad criminal y la violencia en las autopistas”, según un comunicado de prensa del 29 de marzo de la oficina del Sr. Newsom. De las 480 cámaras, se espera que 290 se implementen en Oakland y sus alrededores, mientras que 190 se instalarán a lo largo de las carreteras estatales en East Bay. «La red de cámaras utilizará una tecnología patentada que permitirá a las fuerzas del orden identificar atributos de vehículos más allá de los números de matrícula».
La red permite a las fuerzas del orden “buscar vehículos relacionados con delitos por tipo de vehículo, marca, color, estado de la matrícula, placas faltantes/cubiertas y otras características únicas (por ejemplo, calcomanías en los parachoques, pegatinas y portaequipajes)”.
La red también viene con alertas de delitos en tiempo real que informan a las autoridades cuando la cámara detecta un vehículo sospechoso de estar involucrado en un delito. La oficina de Newsom afirmó que las cámaras ayudarán a combatir el crimen y al mismo tiempo protegerán los intereses de privacidad.
“La red empleará un período de retención limitado de 28 días, las imágenes de las cámaras no se divulgarán a terceros más allá de las autoridades policiales de California y la red cumplirá con los boletines legales recientes emitidos por el Departamento de Justicia de California para garantizar el almacenamiento, recopilación, intercambio y uso de los datos consistente con la ley de California”.
El Sr. Newsom dijo que la nueva inversión contribuirá a mejorar la seguridad pública y al mismo tiempo “combatir el crimen organizado y la violencia vial” en Oakland. La red de cámaras brindará a las fuerzas del orden las herramientas necesarias para “combatir eficazmente la actividad criminal y responsabilizar a los perpetradores”, dijo.
El anuncio se produce cuando las tasas de criminalidad aumentaron en Oakland el año pasado. Según datos del Departamento de Policía de Oakland, el índice de delitos violentos en la ciudad aumentó un 21 por ciento en 2023 con respecto al año anterior. Las agresiones con agravantes aumentaron un 9 por ciento, los robos un 38 por ciento, los hurtos un 23 por ciento y los robos de vehículos a motor un 44 por ciento.
El anuncio de Newsom ha sido criticado. «Ustedes ni siquiera persiguen a verdaderos criminales en este momento… Todo lo que están haciendo es crear un estado de vigilancia como China para tener más control», dijo el presentador del podcast Hodgetwins en una publicación del 30 de marzo.
El empresario de biotecnología Houman David Hemmati señaló: «Ustedes saben muy bien que los delincuentes utilizan cubiertas de placas o placas robadas cuando cometen delitos».
“Estas cámaras se utilizan para apuntar al resto de nosotros y seguir nuestros movimientos. Incluso si atraparan a los ladrones, no serían procesados y están cerrando prisiones, entonces, ¿cuál es el punto?”
El comentarista político Anthony Hughes dijo: “Me encanta cómo [sic] California cree que instalar cámaras de alguna manera hará que los californianos estén más seguros. No te preocupes, tenemos el crimen en video».
Delincuencia en Oakland
La decisión de California de equipar a Oakland con más cámaras se produce ante una creciente preocupación pública por los crímenes violentos en la ciudad, especialmente contra las mujeres.
Durante una reunión comunitaria el año pasado a la que asistieron cientos de personas, varios ciudadanos contaron historias de haber sido sometidos a delitos violentos. Los oradores en la reunión expresaron frustración; dijeron que la policía de Oakland está sujeta a demasiadas restricciones.
En una entrevista de febrero con California Insider, LeRonne Armstrong, exjefe de policía que sirvió en el Departamento de Policía de Oakland durante más de dos décadas, dijo que la seguridad pública de la ciudad enfrenta desafíos.
La fuerza policial de Oakland se está reduciendo y sus agentes están sometidos a estrictas restricciones que limitan su capacidad para combatir eficazmente la delincuencia, afirmó.
“Cuando piensas en una ciudad que está creciendo, pero un departamento de policía que se está reduciendo, es una receta para el desastre. No queremos vivir en una sociedad donde todo el mundo necesita estar armado. La imagen de la ciudad tiene que cambiar”.
“La ciudad ha sido parte de mi vida. Oakland me construyó: una ciudad tan hermosa. Hay tantas áreas en esa ciudad de las que estar orgullosos, pero lo único que la gente sabe sobre la ciudad es el crimen violento”.
El crimen fuera de control está afectando negativamente a los negocios de Oakland, alejando a la gente de la ciudad. El 31 de enero, la cadena de restaurantes Denny’s cerró su establecimiento en Oakland, y la empresa citó preocupaciones sobre la seguridad de los empleados.
A principios de ese mes, la cadena de hamburguesas In-N-Out también anunció el cierre de su local en Oakland después de que empleados y clientes fueran víctimas de robos a mano armada, hurtos y robos de automóviles.
El 28 de marzo, los directores ejecutivos de cuatro de los empleadores más grandes de Oakland anunciaron una colaboración por USD 10 millones para mejorar la seguridad buscando proteger a los empleados y mejorar la seguridad pública. El anuncio fue realizado por Blue Shield of California, The Clorox Company, Kaiser Permanente y Pacific Gas and Electric Company (PG&E).
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