La Cámara de Representantes podría votar este miércoles por el proyecto de ley de financiamiento provisional de una semana para evitar el cierre del gobierno. Esto indica que los legisladores están necesitando más tiempo para llegar a un acuerdo sobre la financiación del gobierno, incluyendo la ayuda por COVID-19.
«Estoy decepcionado de que no hayamos llegado a un acuerdo sobre el financiamiento del gobierno», anunció el líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, Steny Hoyer (D-Md.) en una declaración. «La Cámara de Representantes votará el miércoles una resolución de una semana para mantener al gobierno abierto mientras las negociaciones continúan».
El financiamiento actual está programado para expirar este viernes. La votación daría a los negociadores al menos hasta el 18 de diciembre para llegar a un acuerdo sobre el nuevo presupuesto.
El líder de la mayoría del senado, Mitch McConnell (R-Ky.) dijo que es probable que la medida provisional sea aceptada por la cámara alta.
Ayuda por COVID-19
Hasta ahora no se ha llegado a ningún acuerdo sobre un segundo gran paquete de ayuda por COVID-19, pese a que las negociaciones se han desarrollado durante meses.
«Hemos visto algunas señales esperanzadoras de compromiso por parte de nuestros colegas demócratas. Pero no tenemos ninguna razón para pensar que los desacuerdos subyacentes sobre la política se van a evaporar de la noche a la mañana», dijo McConnell en el Senado.
«La nación necesita que nuestros colegas demócratas resistan la tentación de jugar a la ‘política arriesgada’ con temas políticos largamente establecidos o de empujar a los que usan píldoras de veneno que saben que pueden hacer fracasar el proceso», dijo a continuación.
Al argumentar a favor de un paquete «específico», McConnell dijo que los legisladores estaban ahora de acuerdo en tres puntos: la ampliación de los beneficios de desempleo, la ayuda a las pequeñas empresas y la financiación de las vacunas. Los legisladores deberían «hacer leyes en los muchos lugares donde tenemos puntos en común» y dejar de lado otras demandas, añadió.
McConnell culpó a los demócratas por no haber podido aprobar más estímulos en los últimos meses, señalando una lista de demandas en las que ellos no se comprometerían y que se extendían más allá de abordar las necesidades inmediatas durante la pandemia.
«No hay ninguna razón real por la que el destino de las políticas de sentido común como una segunda ronda del Programa de Protección de Cheques de Pagos que ahorra trabajo tuviera que estar vinculado al destino de propuestas marginales como los cheques de estímulo para los inmigrantes ilegales», dijo en su momento. «No hay ninguna razón por la que el destino de la financiación para la distribución de vacunas o la ampliación de la ayuda al desempleo o la certeza jurídica para las universidades debería haber estado vinculada a ideas radicales como pagar a la gente más por no trabajar de lo que los trabajadores esenciales ganan en el trabajo. Estos vínculos han sido totalmente arbitrarios».
El 3 de diciembre, McConnel dijo que tenía esperanzas de llegar a un compromiso sobre un paquete de estímulo revisado de COVID-19. Se cree que el presidente Donald Trump apoya el paquete de ayuda de COVID-19 que el senador elaboró.
«El compromiso está al alcance de la mano. Sabemos dónde estamos de acuerdo. Podemos hacerlo. Déjeme decirlo otra vez, podemos hacerlo y tenemos que hacerlo. Así que, vamos a hacer una ley», dijo el 3 de diciembre.
Los demócratas del Senado bloquearon en septiembre un estímulo de USD 300,000 millones y en octubre bloquearon un paquete de USD 500,000 millones, diciendo que no incluían suficientes provisiones. Por su parte, McConnell se negó a someter a votación la Ley de Héroes de USD 2.2 billones, que la mayoría demócrata de la Cámara de Representantes aprobó a principios de este año, argumentando que era demasiado amplia e incluía adiciones innecesarias.
La Casa Blanca subió la cifra a cerca de USD 1.9 billones durante el punto álgido del proceso de negociación, aunque el alcance del proyecto de ley difería de la oferta de 2.2 billones de dólares de los demócratas. Tanto Pelosi como la Casa Blanca se acusaron mutuamente de obstruccionismo.
Proyecto de ley bipartidista
El 1 de diciembre, un grupo bipartidista de miembros de la Cámara de Representantes y senadores emitió una propuesta para un paquete de ayuda de USD 900.000 millones por COVID-19. El proyecto de ley tiene el apoyo de 25 demócratas y 25 republicanos. Esta propuesta no incluye otra ronda de pagos directos a los estadounidenses.
El senador Mark Warner (D-Va.), que es miembro del grupo bipartidista, dijo a CNN en una entrevista el 6 de diciembre que es un proyecto de ley que se publicará pronto. La propuesta de USD 900.000 millones «dará un alivio específico a los desempleados, a las personas en situación de inseguridad alimentaria, ayuda para el alquiler, pequeñas empresas que se han quedado sin fondos del PPP», añadió Wamer.
El senador Josh Hawley (R-Mo.) dijo que quiere ver el paquete con un cheque de estímulo.
«Me gustaría ver eso incluido», dijo Hawley a NBC News la semana pasada. «No sé por qué no daríamos asistencia directamente a las familias e individuos que lo necesitan», dijo.
«No estoy seguro de por qué es polémico», añadió. «Estoy un poco desconcertado por ello».
El senador Bill Cassidy (R-La.), dijo en el programa Fox News Sunday que los cheques de estímulo podrían ser parte de un paquete posterior, pero que este proyecto de ley se centraría en las preocupaciones más urgentes.
«Este no es un proyecto de Ley de estímulo. Es un proyecto de Ley de alivio y es algo para los próximos tres o cuatro meses, para ayudar a los más necesitados», dijo Cassidy. «Puede que haya una revisión del estímulo, pero eso sería parte de una legislación diferente».
Con información de Zachary Stieber, Jack Phillips, Tom Ozimek y Reuters.
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