Será interesante ver si Kanye West es realmente serio acerca de postularse a la presidencia porque ciertamente él podría desviar una buena cantidad de votos afroamericanos, además de que los blancos Elon Musk y Mark Cuban ya han prometido su apoyo a su compañero multimillonario.
Espero que él lo haga porque alguien tiene que hacer algo con respecto a la forma en que el Partido Demócrata trata a los negros.
Este fin de semana continuó con 80 disparos en Chicago y 44 en Nueva York, casi todos hacia negros, a excepción de un par de policías que fueron baleados por el parabrisas de su automóvil.
17 de los tiroteos en Chicago fueron fatales.
Memphis, Omaha y Cleveland también tuvieron tiroteos, según el Daily Mail. Además, están los sospechosos habituales —L.A., D.C., Baltimore, Filadelfia, etc.
¡Feliz cuatro de julio!
Según Kevin McCullough de Townhall, las ciudades lideradas por los demócratas han representado 600 muertes en seis semanas.
Hace unos días, cuando el gobernador demócrata de Minnesota, Tim Walz, le pidió al presidente Trump que declarara a su estado como un área de «desastre mayor» debido a la matanza que ocurrió tras la muerte de George Floyd, yo habría puesto los ojos en blanco si me quedara un bocado de respeto.
¿Dónde estaban estas personas, estos líderes electos, cuando ocurría toda la violencia y la destrucción? ¿Asumían alguna responsabilidad por las ciudades y los estados bajo su control y las vidas y propiedades de los ciudadanos en ellas?
Para decirlo sin rodeos, Walz y la mayoría de los otros gobernadores y alcaldes se comportaron de una manera absolutamente infantil durante los disturbios, como niños cobardes de seis años escondidos debajo de las sábanas.
Aterrorizados por los aspirantes a maoístas de Black Lives Matter y sus partidarios, estaban tan «ausentes sin permiso oficial», tan lejanos sin haberse ido, que bien podrían haber estado en otro país.
Ahora están corriendo hacia Trump, a quien generalmente desprecian, como si fuera su papá, solicitando su ayuda para limpiar las cosas. Hay algo oscuramente psicoanalítico en todo esto, por no decir nauseabundamente irónico.
Ira contra la figura paterna y luego suplicar su ayuda —esto en una situación en la que ellos mismos deberían haber ejercido el control parental. Ellos abdicaron.
Lo interesante en todo esto es que uno de los objetivos políticos de BLM, mencionado en su sitio web, es el fin de la familia nuclear.
El Partido Demócrata, involuntariamente o no, ha estado ayudando en esto desde la administración de Lyndon Johnson cuando se instituyeron programas de bienestar para los negros que contribuyeron al declive de la familia negra, de modo que ahora solo el 25 por ciento de los niños negros nacen en hogares de dos padres (por debajo del 75 por ciento).
Con los padres ausentes del hogar, el crimen y la adicción aumentaron. Las tasas de asesinatos aumentaron. La llamada Guerra contra la Pobreza se convirtió en una Guerra contra los Negros.
Hablando de la familia nuclear, uno de los objetivos principales, junto con la desaparición de los «seguidores del camino capitalista», de la Gran Revolución Cultural Proletaria de Mao Zedong fue romper los lazos familiares tradicionales que unían a la gente de ese país desde tiempos inmemoriales.
Se alentó a los padres a denunciar a sus hijos y viceversa, para que el estado se convirtiera en el verdadero padre que tuviera todo el control. (¡Uno de aquellos que fue denunciado por su propia madre durante una «sesión de lucha» no fue otro que el joven Xi Jinping!)
Muchos ahora están reconociendo misteriosas similitudes entre lo que está sucediendo en nuestro país y la Revolución Cultural China, que se prolongó durante varios años hasta la muerte de Mao y fue devastadora para el pueblo chino.
¿Cómo resolvemos esto? ¿Cómo terminamos con ello? Tal vez necesitamos un hombre negro de familia para liderar el camino.
Oh, espere… ¡Kanye!
Él es… un hombre de familia por excelencia, sin mencionar un hombre de fe y un genio creativo, sin mencionar que su esposa, la sra. Kardashian, lideró el camino, con el apoyo de Trump, en la reforma de la prisión para los delincuentes no violentos, liberando a muchos negros de una vida de encarcelamiento.
Si fuera demócrata, tendría miedo, mucho miedo.
Intentaría analizar la letra de su nuevo sencillo Wash Us In The Blood (Lávanos en la sangre) y su próximo álbum, que seguro será otro gran éxito entre la juventud de este país.
Entonces, ¿qué está pasando? ¿Kanye es un caballo de acecho para Trump? ¿Está confabulado? ¿Quién sabe? Tal vez él mismo no lo sabe. Quizás tampoco importa.
Roger L. Simon es un novelista galardonado, guionista nominado al Oscar y cofundador de PJ Media. Sus libros más recientes son «Yo sé mejor: cómo el narcisismo moral está destruyendo nuestra república, si aún no lo ha hecho» (no ficción) y » La cabra» (ficción).
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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
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