Una integrante del equipo de campaña de Robert F. Kennedy Jr. en Nueva York que dijo que el candidato presidencial independiente ayudaría al expresidente Donald Trump a derrotar al presidente Joe Biden si aparece en la boleta estatal, fue despedida por “tergiversación”, según el director de campaña de Kennedy.
La semana pasada, circuló un video de Rita Palma alentando a la audiencia a respaldar a Kennedy en las elecciones de Nueva York porque ayudaría a Trump a vencer a Biden en noviembre.
Palma se identificó falsamente como la directora de la campaña de Kennedy en el estado de Nueva York, informó Amaryllis Fox Kennedy el 10 de abril en X, anteriormente Twitter.
Después de que el equipo de campaña vio el video, dieron por terminada la participación de Palma, según Fox Kennedy, quien es la directora de campaña y nuera del candidato Kennedy.
«Rescindimos su contrato por tergiversación inmediatamente después de ver el video más largo en el que daba un título de trabajo inexacto y describía una conversación que no sucedió», escribió Fox Kennedy en X.
Palma emitió un comunicado después del despido y dijo: “Mi tiempo con el Equipo Kennedy ha sido una de las mejores aventuras políticas de mi vida, llena de algunas de las mejores personas que he conocido, y he conocido a muchas. No tengo ninguna mala voluntad y espero con ansias ver brillar a Bobby durante los próximos siete meses”.
En el video, Palma dijo a los asistentes a una reunión de republicanos del Estado Imperial que apoyar los intentos de Kennedy para entrar en las boletas de Nueva York ayudaría a “deshacerse de Biden” y facilitaría que Trump consiguiera el estado tradicionalmente demócrata.
“Si se trata de Trump contra Biden, Biden gana. Biden gana seis días, siete días a la semana. Con Bobby en la mezcla, cualquier cosa puede pasar”, dijo Palma en el video.
“La única manera de que él, Bobby, cambie las cosas y se deshaga de Biden es si está en las boletas electorales en todos los estados, incluido Nueva York”, añadió Palma.
Al enterarse de los comentarios de Palma, la secretaria de prensa del Sr. Kennedy, Stefanie Spear, dijo que Palma es una consultora de acceso a boletas que programa turnos de voluntarios para el próximo proceso de recolección de firmas en Nueva York.
“Ella no está involucrada en la estrategia electoral, ni a nivel nacional ni en Nueva York. Este no fue un evento de campaña. Palma hablaba como una ciudadana privada y sus declaraciones de ninguna manera reflejan la estrategia de la campaña de Kennedy, que es ganar la Casa Blanca con votos de expartidarios tanto de Trump como de Biden”, explicó Spear.
Palma señaló que anteriormente hizo campaña a favor de Trump en Pensilvania en 2016 y 2020. Sostuvo que respaldar a Kennedy podría evitar que ningún candidato alcance los 270 votos del Colegio Electoral, lo que llevaría a una elección contingente decidida por las delegaciones estatales en la Cámara de los Estados Unidos.
“Así que mi opinión es que Bobby está moviendo a los azules por su cuenta. Si los republicanos enfrentan, bueno, supongo que aceptaron el hecho de que Nueva York, Maryland, Illinois, California, Nueva Jersey, Connecticut y la mayor parte del noreste serán azules, ¿por qué no votaríamos por Bobby y al menos deshacerse de Biden y obtener esos 28 votos electorales en Nueva York… darle esos 28 votos electorales a Bobby en lugar de a Biden, reduciendo así los 270 de Biden”, dijo Palma.
“¿A quién van a elegir? Si se trata de un Congreso republicano, elegirán a Trump. Así que nos deshacemos de Biden de cualquier manera”, añadió Palma.
“Todos estamos en el mismo equipo ahora y estaremos en el mismo equipo más adelante, siempre que ganen Trump o Kennedy”, continuó.
El portavoz del Comité Nacional Demócrata (DNC), Matt Corridoni, señaló que los comentarios de Palma muestran que la campaña de Kennedy “no está elaborando un plan o una estrategia para obtener 270 votos electorales, están elaborando uno para ayudar a Trump a regresar a la Oficina Oval”.
El Comité Nacional Demócrata acusó a Kennedy de ser una “pantalla” para “apuntalar” al presidente Trump.
El mes pasado, la organización anunció la creación de un equipo para contrarrestar a los candidatos presidenciales independientes y de terceros partidos.
Contrató a Lis Smith, una veterana estratega demócrata que dirigió la fallida campaña presidencial de Pete Buttigieg en 2020, para encabezar un agresivo plan de comunicación para combatir a Kennedy, al independiente Cornel West y a la candidata del Partido Verde, Jill Stein.
El DNC y los partidarios del presidente acusan a Kennedy de estar respaldado por el movimiento de Trump, además de resaltar posturas políticas similares entre Trump y Kennedy en áreas como la seguridad fronteriza, la financiación para Ucrania y las órdenes de vacunación.
“Está claro que Donald Trump y sus aliados están apoyando y financiando a Robert F. Kennedy Jr. porque creen que es un ‘candidato de fachada’ útil que podría arruinar las elecciones a favor de Trump.
«Necesitamos hacer sonar esa alarma todos los días desde ahora hasta las elecciones», dijo Smith.
Kennedy entró en la carrera presidencial en abril pasado, desafiando al presidente Biden por la nominación del Partido Demócrata.
Después de encontrar múltiples obstáculos por parte del Comité Nacional Demócrata y acusar a la organización de “manipular las primarias” y no permitir que ningún candidato compita contra el presidente Biden, Kennedy anunció que se postularía como independiente en octubre de 2023.
Mientras que el DNC y los grupos pro-Biden están trabajando para descarrilar la campaña de Kennedy, la campaña de Trump ha guardado silencio sobre el candidato presidencial independiente.
Trump ha llamado a Kennedy “el candidato de izquierda más radical en la carrera”, pero también ha dicho que le “encanta que se presente” y “es mucho mejor que Biden. Si fuera demócrata, votaría siempre por RFK Jr. en lugar de Biden”.
La campaña de Kennedy está trabajando para aparecer en las boletas electorales en los 50 estados y el Distrito de Columbia, una hazaña que el candidato ha dicho varias veces que logrará.
El 13 de abril, aparecerá en un mitin de votantes en Des Moines, Iowa, donde la campaña pretende reunir suficientes firmas en un día para calificar para las elecciones en ese estado.
En Nueva York, la campaña de Kennedy debe recolectar 45,000 firmas válidas entre el 16 de abril y el 28 de mayo para aparecer en la boleta electoral.
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