Un canadiense residente en China se declaró culpable en una Corte federal de Nueva York de conspirar para robar secretos comerciales de un importante fabricante de vehículos eléctricos (EV) estadounidense, según el Departamento de Justicia (DOJ).
Klaus Pflugbeil, de 58 años, trabajaba para un fabricante canadiense que vendía bombas dosificadoras de precisión y líneas de montaje a fabricantes de baterías alcalinas y de iones de litio, dijo el Departamento de Justicia en un comunicado de prensa del 13 de junio. La empresa estadounidense compró la empresa canadiense en 2019, obteniendo un “ventaja competitiva sustancial”, según el comunicado.
Aunque el Departamento de Justicia no nombró la empresa, la descripción coincide con la empresa canadiense Hibar Systems Ltd., que fue adquirida por Tesla en 2019. Los perfiles de LinkedIn y Xing del Sr. Pflugbeil dicen que trabajó para Hibar en Canadá y China hasta 2009.
Según un documento judicial, el Sr. Pflugbeil trabajó para la empresa canadiense durante 12 años, una vez dirigió la oficina en China y tuvo acceso a dibujos y diagramas de los secretos comerciales de fabricación de baterías de la empresa.
Shao Yilong, técnico de ventas y servicio de la empresa canadiense de 2010 a 2020, está acusado de conspirar con Pflugbeil, pero sigue prófugo, según el documento.
En julio de 2020, Pflugbeil y Shao abrieron una entidad comercial con ubicaciones en Brasil, Canadá, China y Alemania que fabricaba “las mismas bombas dispensadoras de precisión y líneas de ensamblaje de baterías” que el fabricante de vehículos eléctricos de EE.UU., según el documento judicial.
Luego, Pflugbeil comercializó el negocio “como una fuente alternativa para las ventas de productos que utilizan secretos comerciales [del fabricante estadounidense de vehículos eléctricos]”, según el documento judicial.
Pflugbeil creó un perfil de LinkedIn y una cuenta de YouTube para la empresa en 2022, según el documento judicial. También compró anuncios en Google para la empresa, incluido uno que decía: “¿Está buscando bombas dosificadoras y repuestos [del fabricante estadounidense de vehículos eléctricos]? No busque más”.
En septiembre de 2023, agentes encubiertos del FBI fueron a una feria comercial en Las Vegas y se hicieron pasar por empresarios interesados en comprar una línea de ensamblaje de baterías para usarla en Long Island, Nueva York. Los agentes se reunieron con el Sr. Shao en el evento, pero no con el Sr. Pflugbeil.
Aproximadamente dos meses después, Pflugbeil envió un documento de 66 páginas a los agentes del FBI. En el documento, al menos media docena de dibujos contenían información del fabricante estadounidense de vehículos eléctricos, según el Departamento de Justicia.
Pflugbeil fue arrestado el 19 de marzo, el día en que voló desde Hong Kong al Aeropuerto Internacional John F. Kennedy en Queens, Nueva York, para terminar de negociar un acuerdo relacionado con la línea de montaje.
El 13 de junio, Pflugbeil se declaró culpable de conspirar para enviar secretos comerciales. La sentencia está fijada para el 9 de octubre. El cargo conlleva una sentencia máxima de 10 años de prisión.
“A pesar del acuerdo de Pflugbeil de proteger lo que sabía que era tecnología patentada y sensible, decidió fugarse con estos secretos comerciales a China, donde buscó una ventaja injusta e ilegal en industrias críticas como la fabricación de vehículos eléctricos”, dijo el Fiscal General Adjunto Matthew G. Olsen, de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia, en un comunicado.
“Con su declaración de culpabilidad, Pflugbeil ahora debe rendir cuentas por esta conducta ilegal que puso en peligro nuestra seguridad nacional”, añadió Olsen.
The Epoch Times se puso en contacto con Tesla para pedirle comentarios.
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