El exasesor de campaña del presidente Donald Trump, Carter Page, presentó una demanda contra el Comité Nacional Demócrata y el bufete de abogados Perkins Coie por el lamentable expediente que ayudaron a financiar, producido por el exespía británico Christopher Steele.
La demanda, presentada esta semana en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos, del Distrito Norte de Illinois, alega que el comité, o el DNC, el bufete de abogados, y otros partidos, «utilizaron información falsa, tergiversaciones y otras malas conductas para dirigir el poder del sistema internacional de inteligencia y la industria de los medios de comunicación contra [Page] para promover su agenda política».
Page sirvió como asesor informal de política exterior en la campaña de Trump durante las elecciones de 2016. Fue acusado de ser un agente ruso y vigilado por agentes del FBI, que no encontraron pruebas de irregularidades. El informe del Inspector General del Departamento de Justicia, Michael Horowitz, de cómo el FBI utilizó la aplicación de la Ley de Control de Inteligencia Extranjera para espiar a Page, mostró una serie de omisiones y errores, entre ellos confiar en el expediente sin fundamento elaborado por Steele.
El expediente fue financiado por la campaña de Clinton y el DNC a través del bufete de abogados Perkins Coie, que contrató a la empresa Fusion GPS. Esa firma contrató a Steele en abril de 2016 para producir información negativa sobre el entonces candidato Trump.
«En relación con un esfuerzo para contrarrestar la campaña de Trump, los demandados se comprometieron a desarrollar una investigación en oposición a Trump y a su campaña, incluyendo a las personas asociadas con esa campaña», dice la nueva demanda.
«Como parte de este esfuerzo, los demandados desarrollaron un expediente repleto de falsedades sobre numerosos individuos asociados con la campaña Trump, especialmente el Dr. Page. Los demandados entonces buscaron empañar la campaña Trump y a sus afiliados (incluyendo al Dr. Page) al publicar esta información falsa», añadió.
El expediente movilizó a los medios de comunicación contra Page, según la demanda, destruyendo efectivamente su vida. Page se enfrentó a amenazas de muerte y luchó por conseguir clientes para sus negocios. Page señaló que las partes lo difamaron y dañaron su reputación e interfirieron en sus posibilidades y en las de sus negocios.
La demanda no busca una cantidad específica. Page quiere «una concesión de daños compensatorios, especiales y punitivos en cantidades apropiadas que se establezcan en juicio; medidas cautelares que prohíban la publicación o republicación de las declaraciones difamatorias» y los costos judiciales.
El Comité Nacional Demócrata y Perkins Coie no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentario.
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