El 23 de junio, la Casa Blanca se negó a hacer comentarios sobre las acusaciones de un denunciante que sugerían que el presidente Joe Biden podría haber estado implicado en los negocios chinos de su hijo.
El 22 de junio, el Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes hizo públicas unas sorprendentes revelaciones del agente especial supervisor del IRS Gary Shapley, denunciante de irregularidades, quien afirmó que el IRS y el Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) habían dado a Hunter Biden un «trato preferente» para evitar que se emitieran órdenes de registro o se presentaran cargos contra él durante una investigación sobre posibles delitos fiscales cometidos por el hijo del presidente.
En su testimonio, Shapley alegó que él y otros investigadores del IRS habían validado un mensaje de WhatsApp en el que se mencionaba indirectamente a Joe Biden.
El mensaje iba dirigido a Henry Zhao, un socio comercial chino de Hunter que mantiene estrechos vínculos con el Partido Comunista Chino.
En el mensaje, Hunter Biden parece exigir un pago a Zhao.
«Estoy sentado aquí con mi padre y nos gustaría entender por qué no se ha cumplido el compromiso adquirido», escribió el Biden más joven, según el testimonio de Shapley. Luego expresó su deseo de «resolver esto antes de que se nos fuera de las manos».
«Ahora significa esta noche», dijo Biden, advirtiendo que si alguien que no fuera Zhao, «Zhang o el presidente» intentaba ponerse en contacto con él para tratar el asunto, «me aseguraré de que entre el hombre que se sienta a mi lado y todas las personas que conoce y mi capacidad de guardar rencor para siempre, lamentarán no haber seguido mis indicaciones».
«Estoy aquí sentado con mi padre esperando la llamada».
De ser cierta, esta información contradiría la afirmación tantas veces repetida de Biden de que nunca ha hablado de los negocios de su hijo ni ha participado en ellos. En 2019, Biden dijo: «Nunca he hablado con mi hijo ni con mi hermano ni con nadie —ni siquiera con familiares lejanos— sobre sus intereses empresariales. Punto».
Cuando se presionó a la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, y al portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, sobre las acusaciones, desviaron las preguntas.
James Rosen, de Newsmax, fue el primero en preguntar sobre los textos mientras Kirby estaba en el estrado.
Rosen preguntó si las acusaciones contradecían la afirmación de Biden, repetida a lo largo de las elecciones de 2020, de que no estaba implicado en los negocios de su hijo.
«No, y no voy a hacer más comentarios al respecto», dijo Kirby.
Cuando Rosen intentó continuar con otra pregunta, Kirby dijo: «James, déjame ahorrarte algo de aliento en esto».
Rosen protestó diciendo que tenía más preguntas.
«Sé que las tienes, más de las que me gustaría que tuvieras», dijo Kirby. «No voy a abordar este tema desde este podio, simplemente no».
Jean-Pierre esquiva las preguntas
Más tarde, después de que Jean-Pierre subiera al estrado, un periodista de la CNN le preguntó por la decisión del presidente de invitar a su hijo a una cena de Estado en la Casa Blanca el mismo día en que salieron a la luz las acusaciones.
«No voy a entrar en discusiones familiares», respondió Jean-Pierre, calificando el tema de «discusión familiar personal».
«Como sabes, Hunter es su hijo, simplemente no voy a meterme en eso».
El periodista preguntó, refiriéndose al recientemente anunciado acuerdo de culpabilidad de Biden con el Departamento de Justicia (DOJ): «Si Hunter Biden no fuera hijo del presidente, ¿habría invitado [Joe Biden] a alguien que acababa de llegar a un acuerdo de culpabilidad con los fiscales federales?».
«De nuevo, es su hijo; es un miembro de la familia. No es raro que los miembros de la familia asistan a actos en la Casa Blanca», respondió Jean-Pierre. «En lo que se refiere a cualquier cosa relacionada con Hunter, no voy a responder a ello desde aquí arriba».
Peter Baker, del New York Times, presionó a Jean-Pierre para que respondiera a la pregunta anterior de Rosen a Kirby, diciendo: «Kirby no quiso responder a la pregunta de James; ¿vas a responder a la pregunta? No es una pregunta irrazonable plantearse si el presidente de Estados Unidos estuvo implicado, como parece sugerir este mensaje, en algún tipo de conversación coercitiva para negocios de su hijo. Si no lo estuvo, quizá debería decírnoslo».
«Ésta es la cuestión: agradezco la pregunta, creo que mi colega del Consejo de la Casa Blanca ya ha respondido a esta pregunta, se ha ocupado de esto, lo ha dejado muy claro», Jean-Pierre. «Simplemente no tengo nada que compartir fuera de lo que mis colegas han compartido, por lo que te remitiría a él y al DOJ. Simplemente no voy a hacer comentarios desde aquí».
Parecía una referencia a un comunicado del portavoz de la Casa Blanca, Ian Sams, del 20 de junio, tras la declaración de culpabilidad de Hunter Biden por dos cargos federales de delito fiscal y uno de tenencia ilícita de un arma de fuego.
«El presidente y la primera dama quieren a su hijo y lo apoyan mientras sigue rehaciendo su vida», decía un comunicado de Sams a The Epoch Times. «No haremos más comentarios».
Mientras se oía a otro periodista gritar sobre un «mensaje de texto», Jean-Pierre interrumpió: «Lo que puedo decirte es que sé que mi colega se ha ocupado de esto, lo abordó en el consejo de la Casa Blanca, simplemente no tengo nada que compartir».
Caos en la sala de prensa
En ese momento, estalló el caos en la sala de prensa de la Casa Blanca cuando varios periodistas —entre ellos representantes de la CBS y la NBC— empezaron a hablar unos por encima de otros en busca de una respuesta más sustanciosa.
«Acabo de responder a la pregunta, acabo de responder a la pregunta», dijo Jean Pierre por encima del barullo.
«No depende de ti cómo responda a la pregunta», dijo cuando se le insistió más. «Acabo de responder a la pregunta diciéndote que mis colegas del consejo de la Casa Blanca se han [sic] ocupado de esto, y te remito a ellos».
A la pregunta de Rosen sobre si mantendría sus declaraciones en las que afirmaba lo dicho por Biden durante las elecciones de 2020 de que nunca había hablado de negocios con su hijo, Jean-Pierre respondió: «Lo que diré es que nada ha cambiado. Nada ha cambiado. Y lo dejaré ahí».
«¿Entonces esto no es un cambio?», insistió Rosen.
«Acabo de responder a la pregunta», replicó Jean-Pierre.
Otro periodista preguntó a la secretaria de prensa si había «algo que [ella] pudiera decir sobre este mensaje de texto. … ¿Estaba el presidente allí o no?».
Una vez más, Jean-Pierre remitió al periodista al abogado de la Casa Blanca.
Más tarde, dijo que no había hablado del asunto con el presidente.
«¿Piensas tener esa conversación con el presidente?», preguntó un periodista.
«No», respondió Jean-Pierre.
El abogado de Hunter Biden responde
Aunque la Casa Blanca se ha mantenido muy hermética al respecto, el abogado de Hunter Biden, Chris Clark, hizo pública una declaración sobre el asunto.
«Esta semana ha concluido una investigación exhaustiva de cinco años de duración llevada a cabo por el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ, por sus siglas en inglés), que ha dado como resultado que mi cliente se responsabilice de dos delitos menores de omisión del pago de impuestos, así como de un cargo por arma de fuego, que será objeto de un acuerdo de desviación previo al juicio», declaró Clark.
«Como su abogado durante todo este asunto, puedo decir que cualquier sugerencia de que la investigación no fue minuciosa, o de que se tomaron atajos, o de que se le hizo el vacío a mi cliente, es absurda y profundamente irresponsable».
Clark dijo que la investigación coincidió con «una época de confusión y adicción para mi cliente».
«Cualquier palabra o acción verificable de mi cliente, en medio de una horrible adicción, es exclusivamente suya y no tiene relación con nadie de su familia».
Clark protestó: «Las filtraciones selectivas, sesgadas y políticamente motivadas han plagado este asunto durante años. No sólo son irresponsables, sino ilegales».
Clark sugirió que el agente del IRS Gary Shapley era un «individuo muy parcial», a pesar de que el denunciante dijo en su testimonio que en el pasado había votado tanto por republicanos como por demócratas.
«Al final, un hecho es un hecho, independientemente de la afiliación política de la persona que te lo haya presentado», declaró Shapley.
Aun así, Clark escribió: «Un examen detenido del documento hecho público ayer por un individuo muy parcial plantea serias dudas sobre si es lo que él afirma que es. Es peligrosamente engañoso hacer conclusiones o inferencias basadas en este documento».
El fiscal general Merrick Garland también ha protestado contra las acusaciones, afirmando que el DOJ no interfirió en el asunto.
Al igual que la Casa Blanca, los demócratas del Congreso han eludido en gran medida comentar el asunto.
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