Casi la mitad de los periodistas y corresponsales de Hong Kong están considerando marcharse ya que el ambiente de trabajo se ha «deteriorado significativamente» bajo la ley de seguridad nacional impuesta por Beijing.
La encuesta sobre la libertad de prensa, publicada el 5 de noviembre por el Club de Corresponsales Extranjeros de Hong Kong, reveló que cerca del 46 por ciento de los encuestados estaba considerando o tiene planes de abandonar la ciudad.
Casi el 84 por ciento de los 99 periodistas encuestados piensan que las condiciones de trabajo «han empeorado» desde que Beijing introdujo una amplia ley de seguridad nacional el pasado mes de junio.
La legislación, de redacción imprecisa, castiga los discursos o actos considerados secesionistas, subversivos, terroristas o que se perciben como colusión con individuos o grupos políticos extranjeros contra el Partido Comunista Chino (PCCh). Desde entonces, la policía de Hong Kong ha detenido a más de 100 disidentes, la mayoría de ellos políticos democráticos, activistas, periodistas y estudiantes.
«El rápido deterioro del ambiente político en Hong Kong me ha hecho considerar la posibilidad de acortar mi estancia en la ciudad», dijo un encuestado al Club de Corresponsales Extranjeros. «Aunque no estamos planeando una salida inminente de ninguna manera, yo mismo y varias personas que conozco estamos reconsiderando los planes anteriores de permanecer en Hong Kong durante más tiempo, dado que la ciudad a la que llegamos era muy diferente a la ciudad en la que vivimos actualmente».
A diferencia de otras ciudades del continente, Hong Kong gozó días de una vibrante libertad de prensa, protegida por la mini constitución de la ciudad, conocida como Ley Básica. Estos derechos estaban garantizados durante al menos 50 años en virtud de la Declaración Conjunta Sino-Británica de 1984, un tratado internacional legalmente vinculante firmado por Beijing.
Sin embargo, la mayoría de los reporteros encuestados, más del 56 por ciento, dijeron que se autocensuraron o han evitado informar sobre lo que podría considerarse como temas sensibles.
En cuanto a los «temas sensibles», cerca del 48 por ciento no sabe dónde están las «líneas rojas» de la información. Los que están más seguros de las definiciones de temas sensibles dieron una amplia gama de ellos, incluyendo el Tíbet, Xinjiang y Taiwán. Según el Club de Corresponsales Extranjeros de Hong Kong (FCC), varios encuestados dijeron que la «definición podría cambiar en cualquier momento».
«Estos resultados muestran claramente que las garantías de que Hong Kong sigue gozando de la libertad de prensa, garantizada por la Ley Básica, no son suficientes», declaró el presidente de la FCC, Keith Richburg. «Hay que tomar más medidas para restablecer la confianza de los periodistas y asegurarse de que Hong Kong mantiene su reputación de décadas como lugar acogedor para los medios de comunicación internacionales».
En respuesta a la encuesta, la Oficina del Comisionado del Ministerio de Asuntos Exteriores de China en Hong Kong acusó a la organización a través de una declaración este viernes de ser «manos negras» que se inmiscuyen en los asuntos de la ciudad. El portavoz advirtió al FCC que dejara de hacer «ruido».
«Es una práctica internacional habitual que los países supervisen los medios de comunicación que trabajan en sus propios países de acuerdo con la ley», añadió.
La encuesta del Club de Corresponsales Extranjeros de Hong Kong se produjo en medio de la creciente preocupación internacional por la disminución de la libertad de prensa, después de que el partido comunista gobernante en China haya puesto en marcha una serie de medidas, especialmente tras la drástica ley de seguridad nacional.
En julio, Estados Unidos y otros 20 países exigieron a Beijing que pusiera fin al ataque a la libertad de prensa en el centro financiero tras el cierre forzoso de Apple Daily.
El popular periódico local Apple Daily, que a menudo criticaba al gobierno de la ciudad y al PCCh, imprimió su última edición en junio, después de que 500 policías hicieran una redada en su redacción, detuvieran a cinco ejecutivos y congelaran los principales activos. Las autoridades afirman que decenas de artículos del periódico pueden haber violado la ley de seguridad nacional.
El fundador de Apple Daily y célebre empresario de los medios de comunicación, Jimmy Lai, cumple actualmente una condena de 20 meses en prisión y está a la espera de juicio por tres cargos de la ley de seguridad nacional. Según esta legislatura Lai podría enfrentarse a la cadena perpetua.
Hong Kong Epoch Times, uno de los pocos medios de comunicación independientes que quedan en la ciudad, también ha sufrido ataques. Las instalaciones de la imprenta sufrieron daños por parte de cuatro intrusos y la agresión a un periodista, lo que provocó críticas generalizadas contra las autoridades.
La clasificación de Hong Kong descendió del 18º puesto en 2002 al 80º en la clasificación de la libertad de prensa de 2021 de Reporteros sin Fronteras.
«En muchos sentidos, se ha convertido en algo peor que el continente, porque nadie sabe cuáles son las líneas rojas y existe un verdadero temor a que la cobertura anterior pueda ser examinada», dijo un periodista al Club de Corresponsales Extranjeros de Hong Kong (FCC).
La encuesta del FCC se llevó a cabo entre fines de agosto y finales de octubre de 2021, poniéndose en contacto solo con sus miembros corresponsales y periodistas. Recibió 99 respuestas, 70 de ellas de corresponsales que trabajan para medios de comunicación extranjeros y 29 de periodistas que trabajan para medios locales.
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