La cebada es un cereal con beneficios medicinales y dietéticos. El valor nutricional de la cebada atrajo la atención del público en los últimos años. Muchos estudios demostraron que apenas puede mejorar el entorno intestinal, aliviar el estreñimiento y reducir la grasa corporal visceral.
En 2007, una investigación realizada en Japón demostró que la cebada podía reducir el colesterol visceral corporal y el colesterol de lipoproteínas de baja densidad. Cuarenta y cuatro hombres japoneses hipercolesterolémicos con un índice de masa corporal superior a 22 kg/m2 (peso en kilogramos y altura en metros al cuadrado) fueron asignados aleatoriamente a dos grupos.
El grupo de prueba consumió arroz mezclado con cebada y el grupo placebo consumió arroz sin cebada durante 12 semanas. Los resultados mostraron que, en comparación con el grupo placebo, la grasa corporal visceral y el colesterol de lipoproteínas de baja densidad se redujeron en el grupo de prueba.
Un segundo tipo de cebada, llamada cebada glutinosa, también es beneficiosa para la salud, según revela una investigación realizada por el Centro de Investigación del Oeste de Japón. La investigación se publicó en la revista Journal of Physiological Anthropology en 2017.
Siguiendo las directrices del equipo de investigación, los cuidadores de una residencia de ancianos proporcionaron a los residentes mayores arroz mezclado con cebada glutinosa como alimento básico durante cinco meses.
La investigación descubrió que entre los 28 ancianos que siguieron la dieta, cuya edad media era de 89 años, 14 que sufrían estreñimiento aumentaron significativamente el número de deposiciones, con un aumento mensual medio de 9,2 veces a 12,1 veces, lo que indica que una ingesta suficiente de fibra dietética, como la que aporta la cebada, podría favorecer el peristaltismo de los ancianos. Además, el uso de laxantes se redujo notablemente.
Además, los ancianos participantes en el estudio disfrutaron más comiendo cebada glutinosa que otros alimentos ricos en fibra, como la cebada no glutinosa y las setas.
La cebada es rica en carbohidratos, proteínas, fibra dietética soluble β-glucano, fibra dietética insoluble, vitamina B y más. La fibra dietética es beneficiosa para el organismo y ayuda a aliviar el estreñimiento y a reducir peso. El β-glucano de la cebada puede inhibir el aumento de los niveles de glucosa en sangre postprandial, reducir los niveles de colesterol y alimentar las bacterias intestinales, regulando así el entorno intestinal y mejorando el peristaltismo.
Salud y longevidad
Mejorar el entorno intestinal no es solo una cuestión de corregir el estreñimiento: mantener una buena microbiota intestinal también desempeña un papel importante en la salud general.
Japón es uno de los países con mayor esperanza de vida del mundo. Más concretamente, el número de centenarios en la ciudad de Kyotango es tres veces superior al de la prefectura de Kioto. Según las estadísticas del gobierno de Kyotango, hay 124 ciudadanos centenarios a 1 de septiembre del 2022, y 237 centenarios por cada 100,000, 3,3 veces más que el nivel nacional en el resto de Japón.
El profesor Yuji Naito, del Departamento de Investigación de la Universidad Prefectural de Medicina de Kioto, estudió los «secretos» de los centenarios de la ciudad de Kyotango. Descubrió un número significativamente mayor de Clostridium butyricum en los intestinos de los ancianos que en los de los ancianos de la ciudad adyacente de Kioto.
Yuji supuso que los ancianos locales tenían una gran cantidad de Clostridium butyricum en su microbiota intestinal asociada al alto contenido en fibra de su dieta. El metabolismo del Clostridium butyricum puede aumentar el número de inmunocitos y reducir la inflamación, además de proteger el cerebro y el sistema nervioso central. «Quizá ésta sea una de las razones fundamentales de su longevidad».
Según Yuji, la investigación sobre el análisis genético de las bacterias intestinales de los pueblos antiguos mostró una variedad más rica y mayor que la de los pueblos modernos. Los nutrientes y materiales necesarios para una salud óptima no pueden producirse sin una gran variedad genética de bacterias intestinales. Sin embargo, la dieta moderna, que contiene muchos alimentos poco saludables, como grasas animales, azúcar y alimentos procesados, conduce a la reducción del número de Clostridium butyricum en el intestino en el ambiente intestinal.
Según las directrices del gobierno japonés en 2020, la cantidad de ingesta de fibra dietética es de al menos 21 gramos al día para los hombres de 18 a 64 años y de al menos 18 gramos para las mujeres.
La fibra dietética es relativamente abundante en las verduras, pero menos en alimentos como el pescado y la carne. Una forma eficaz de ingerir fibra dietética es consumir cebada, arroz integral, arroz con germen o pan integral como alimentos básicos e incluir alubias, fruta, setas, algas, zanahoria seca, calabaza, raíz de bardana, brotes de bambú, brécol, hongos, natto (un alimento tradicional japonés elaborado con soja entera), judías verdes, judías rojas y setas shiitake.
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