Imágenes satelitales muestran que China estaría expandiendo sus bases de espionaje en Cuba, según reveló un nuevo informe. Estas instalaciones situadas a menos de 100 millas del sur de Florida tendrían la capacidad de vigilar las comunicaciones sensibles, incluyendo las del ejército de Estados Unidos.

«Los rumores sobre el espionaje chino desde la isla han estado latentes durante décadas. El asunto resurgió a mediados de 2023 en medio de informes de los medios sobre una “base de espionaje” china cerca de La Habana», indica el informe del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS, por sus siglas en inglés) .

Si bien la administración del presidente Joe Biden ha dicho que China ha estado operando una base de espionaje en Cuba desde 2019, el CSIS no especifica si esa base espía está entre las 4 identificadas en su informe.

CSIS reportó que estas cuatro bases se encuentran ubicadas en Bejucal, El Salao, Wajay y Calabazar.

“Son lugares activos con un conjunto de misiones en evolución”, dijo Matthew Funaiole, investigador del CSIS y autor principal del último informe a The Wall Street Journal.

Y de acuerdo con el experto en relaciones entre China y América, Leland Lazarus, estas instalaciones «también podrían impulsar el uso de las redes de telecomunicaciones por parte de China para espiar a los ciudadanos estadounidenses”.

Cuba es un lugar privilegiado para el espionaje debido a que se encuentra a menos de cien millas de Florida y cerca de 7 instalaciones militares estadounidenses. Eso incluye los cuarteles generales del Comando Sur y Comando Central de EE.UU. en Florida, instalaciones de lanzamiento espacial y sitios de pruebas militares.

Un exfuncionario de inteligencia dijo al Wall Street Journal que el acceso de Beijing a estas instalaciones podría hacer que Beijing esté en mejores condiciones de identificar objetivos para atacar a Estados Unidos, en caso de un conflicto.

De acuerdo con el informe de CSIS, la base en El Salao, cuya construcción comenzó en 2021, podría ser utilizada para vigilar las comunicaciones de la base naval estadounidense ubicada en la bahía de Guantánamo, a solo unas 70 millas de distancia.

«Servirá como una poderosa herramienta para mejorar el conocimiento del dominio aéreo y marítimo en la región, donde el ejército estadounidense y sus socios internacionales operan regularmente», señala el CSIS.

Las imágenes satelitales obtenidas muestran un edificio de control y los cimientos de 16 antenas verticales a su alrededor.

Estas antenas fueron muy utilizadas durante la Guerra Fría, pero Rusia y Estados Unidos han desmantelado la mayoría de sus instalaciones. Sin embargo, el CSIS afirma que China ha estado reconstruyendo activamente estas antenas, incluso en el Mar de China Meridional.

La supuesta base de espionaje de China en Cuba suscita preocupación por la seguridad nacional de Estados Unidos, debido a su ubicación estratégica. Cuba tiene un historial de albergar operaciones de espionaje contra Estados Unidos, explica el informe. Durante la guerra fría los soviéticos operaron su mayor sitio de inteligencia en la isla.

La Habana actualmente enfrenta su peor crisis económica desde la caída de la Unión Soviética por lo que Beijing le ha proporcionado miles de millones de dólares de ayuda en los últimos años.

Una distracción para EE.UU. en caso de una invasión a Taiwán

China está intentado desarrollar una visión más sofisticada de las prácticas militares estadounidenses recopilando datos sobre ejercicios, lanzamientos y pruebas, afirmó la CSIS.

«Esto es muy preocupante. (…) Sabía que era muy probable que algo emanara de Cuba, algún tipo de irrupción», dijo a NTD Robert S. Spalding, general de brigada retirado de la Fuerza Aérea de EE.UU. y analista de seguridad nacional de EE.UU.

«Creo con esto China indica que su ejército está comenzando a expandirse hacia donde se dirige. Pero lo más importante es que creo que está creando un punto de apoyo en un espacio muy cercano a Estados Unidos que potencialmente podría usarse para crear distracción en caso de una invasión a Taiwán», añadió.

Spalding añadió que las recientes revelaciones de una supuesta base de espionaje chino en Cuba se asemeja a lo que ocurrió en la primera Guerra Fría.

«Porque si recuerdan tuvimos la crisis de los misiles cubanos, así que no me sorprende que estemos empezando a ver a los chinos mejorar una sub-base Cuba», señaló.

El experto señaló que esto sugiere a Estados Unidos un manejo diferente de la información, que podría de alguna manera afectar las operaciones.

«Requiere que las Fuerzas que podrían estar bajo vigilancia, bajo monitoreo de la transmisión de sus actividades, se aseguren que no revelen ningún secreto de sus operaciones, y esto hace que sea más difícil para la Marina hacer sus ejercicios y prepararse para o que pueda suceder en el indo pacífico, en el patio trasero de China», explicó Spalding.

Reacciones de congresistas estadounidenses

El nuevo informe suscitó reacciones entre algunos congresistas estadounidenses.

El congresista Carlos A. Giménez señaló en un video en X que cree que aumentará el avance de China en Cuba bajo la administración Biden.

«La influencia de China y Rusia incrementó durante su presidencia y parece que él no va hacer nada al respecto. Es algo que esperaba y espero que incremente aún más, este tipo de actividad de los chinos y los rusos en Cuba , yo espero más procesos militares de los chinos y los rusos en Cuba mientras el presidente Biden sea el presidente de Estados Unidos», dijo Giménez el 2 de julio de 2024.

Mientras que la congresista, María Elvira Salazar, instó a la administración Biden tomar acción ante la ampliación de las bases chinas en Cuba.

«EE.UU. no puede quedarse de brazos cruzados mientras China construye bases de inteligencia a 90 millas de Florida, con el beneplácito del régimen cubano. La Administración Biden debe pedir a los chinos que desistan de este peligroso reinicio de la Guerra Fría en el Hemisferio», escribió Salazar en X, el 2 de julio de 2024.

Por su parte, el senador Marco Rubio dijo este 4 de julio en X que «la presencia de la China comunista a 90 millas de distancia es una grave amenaza que debe abordarse, especialmente considerando sus estrechos vínculos con el régimen ilegítimo cubano».

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