Las potencias extranjeras utilizan cada vez más la inteligencia artificial (IA) para influir en el voto de los estadounidenses, según un nuevo informe de inteligencia publicado a solo 45 días de las elecciones presidenciales de 2024.
La Oficina del Director de Inteligencia Nacional de Estados Unidos (ODNI) publicó el 23 de septiembre una actualización de seguridad en la que advierte de que China, Irán y Rusia están intensificando sus respectivos esfuerzos de influencia para moldear la opinión pública en Estados Unidos utilizando herramientas de IA. Estos esfuerzos son coherentes con una advertencia anterior emitida por la comunidad de inteligencia a principios de septiembre, ya que los actores extranjeros tratan de exacerbar las divisiones sociales e influir en los votantes.
«Lo más probable es que estos actores consideren que amplificar las cuestiones controvertidas y la retórica divisiva puede servir a sus intereses haciendo que Estados Unidos y su sistema democrático parezcan débiles y mantenga al gobierno estadounidense distraído con cuestiones internas en lugar de hacer frente a su comportamiento hostil en otras partes del mundo», se lee en la actualización del 23 de septiembre.
Algunos de los esfuerzos de las potencias extranjeras incluyen el blanqueo de contenidos engañosos a través de figuras prominentes o la publicación de «filtraciones» fabricadas con la intención de parecer polémicas. Aunque la IA ha ayudado a acelerar ciertos aspectos de las operaciones de influencia extranjera dirigidas a Estados Unidos, la comunidad de inteligencia señala que la IA todavía tiene que revolucionar estas tácticas.
Mientras que la actividad de China ha sido más general —buscando dar forma a las opiniones mundiales sobre China y amplificando cuestiones políticas estadounidenses divisiva, los esfuerzos de Irán y Rusia han utilizado la IA para crear contenidos más directamente relacionados con las elecciones estadounidenses.
Rusia es el país que ha generado más contenidos de IA relacionados con las elecciones estadounidenses, según el informe de la comunidad de inteligencia. Los esfuerzos de Moscú abarcan texto, imágenes, audio y vídeo. Las acciones del Kremlin incluyen la difusión de narrativas conspirativas y contenidos generados por IA de figuras prominentes de Estados Unidos con el objetivo de profundizar las divisiones en temas como la inmigración.
Irán, por su parte, ha utilizado la IA para generar posteos en redes sociales y artículos de noticias no auténticos para sitios web que se hacen pasar por fuentes de noticias legítimas. Estos contenidos, que aparecen tanto en inglés como en español, se han dirigido a votantes estadounidenses de todo el espectro político, centrándose especialmente en cuestiones que causan división, como el conflicto entre Israel y Gaza y los candidatos a la presidencia de Estados Unidos.
El uso de la IA por parte de China en sus operaciones de influencia se centra principalmente en modelar la percepción de China más que en influir directamente en las elecciones estadounidenses, según el informe. Los actores chinos también han empleado contenidos generados por IA, como presentadores de noticias y perfiles de redes sociales falsos, para amplificar cuestiones políticas internas de Estados Unidos como el consumo de drogas, la inmigración y el aborto, sin apoyar explícitamente a ningún candidato.
En su actualización de seguridad electoral del 6 de septiembre, la comunidad de inteligencia declaró que, en ese momento, China se centraba sobre todo en influir en las contiendas electorales y aún no intentaba influir en la carrera presidencial.
El objetivo de los actores extranjeros sigue estando más centrado en influir en las percepciones que en interferir directamente en el proceso electoral real, afirma el último informe.
El informe advierte de que es probable que los adversarios sigan intensificando las campañas de desinformación basadas en IA a medida que se acerque el día de las elecciones, lo que supone un riesgo para los procesos democráticos estadounidenses.
En marzo, The Epoch Times informó sobre la creciente influencia de los memes políticos en el discurso electoral. En aquel momento, Pamela Rutledge, directora del Media Psychology Research Center, dijo a The Epoch Times que las detalladas falsificaciones, que incluyen imágenes, vídeos y audio realistas creados normalmente por software de IA generativa, pueden engañar a la gente, y de hecho lo hacen.
Incluso si el contenido es obviamente falso o de baja calidad, Rutledge dijo que los mensajes pueden seguir siendo persuasivos si confirman los prejuicios políticos de la gente.
Una encuesta publicada en mayo por el Imagining the Digital Future Center de la Universidad de Elon reveló que el 78% de los estadounidenses cree que las elecciones presidenciales se verán influidas por «abusos» relacionados con el contenido generado por IA que se difunde en las redes sociales.
«Muchos no están seguros de poder clasificar la basura que saben que contaminará el contenido relacionado con la campaña», dijo Lee Rainie, director del Centro del Futuro Digital, en una declaración.
En un testimonio del impacto potencial de los contenidos impulsados por la IA en las elecciones, el 69% de los encuestados dijeron al centro que no están seguros de que la mayoría de los votantes puedan diferenciar entre fotos fabricadas y auténticas, y porcentajes similares expresaron su preocupación por la capacidad de los demás para detectar audio y vídeo falsos.
Con la contribución de Austin Alonzo
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