El Tribunal Popular Intermedio Número 2 de Beijing pospuso hasta una fecha sin precisar el anuncio de la sentencia al ciudadano chino-australiano Yang Hengjun, cuyo juicio por acusaciones de «espionaje» comenzó hoy jueves en la capital china.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China informó hoy, durante la rueda de prensa diaria, de que el tribunal pronunciaría su veredicto más adelante.
El tribunal denegó hoy el acceso al juicio al embajador de Australia en China, Graham Fletcher, quien explicó que la excusa esgrimida por la corte fue la situación pandémica, mientras que el Ministerio de Exteriores le había comunicado previamente que la vista sería a puerta cerrada por tratarse de un juicio que incluía cuestiones de seguridad nacional.
Según el artículo 188 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal de China, «los casos relacionados con secretos de Estado o información personal privada pueden no ser juzgados de manera pública» pero «el tribunal ha de aportar el motivo por el cual el juicio es a puerta cerrada».
«Es insatisfactorio, preocupante y lamentable», aseguró Fletcher ante la prensa después de que se le denegara el acceso a las dependencias judiciales.
«Hace tiempo que tenemos preocupaciones sobre este caso, incluida la falta de transparencia, y por tanto hemos concluido que es un ejemplo de detención arbitraria», agregó.
Asimismo, el diplomático australiano apuntó que el estado de salud de Yang era «bueno».
Por su parte, el portavoz de la cancillería china dijo hoy que Beijing ha presentado una queja formal ante Australia por su «injerencia en la soberanía judicial de China», según la prensa estatal.
Fatídica escala en Cantón
Yang, antiguo funcionario del Ministerio de Exteriores de China, fue detenido en el país asiático en 2019, y fue acusado formalmente de «espionaje» en octubre, según su abogado, tras estar detenido 26 meses en un lugar desconocido «sin aire fresco o rayos de sol».
Nacido en China, Yang obtuvo posteriormente la nacionalidad australiana, y residía con su familia en Nueva York cuando a principios de 2019 fue detenido en la ciudad suroriental china de Cantón cuando realizaba una escala de camino a Australia.
«Los cargos contra Yang parecen ser una acusación de motivación política por artículos que escribió que eran críticos con el Gobierno chino. Es un ataque intolerable a su derecho a la libertad de expresión», afirmó el director de la rama para China de Amnistía Internacional (AI), Joshua Rosenzweig.
«El caso de Yang -agregó el responsable de AI para China- es una prueba más de que las detenciones en aislamiento, los interrogatorios coactivos, los juicios secretos y la denegación flagrante de garantías para un juicio justo con cargos vaporosos son parte del repertorio rutinario de las autoridades chinas a la hora de enfrentarse a críticos del Gobierno y activistas de derechos humanos».
Además de Yang, China mantiene bajo custodia a la presentadora chino-australiana del canal televisión estatal CGTN Cheng Lei, a quien detuvo en agosto del pasado año y arrestó formalmente en marzo de este año «por sospechas de que suministrara secretos de Estado al extranjero».
Australia y China atraviesan un complicado momento en sus relaciones, con tensiones no solo diplomáticas, sino también comerciales.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.