China está expandiendo su influencia en América del Sur para contrarrestar el dominio estadounidense en el hemisferio occidental, según el experto en seguridad Joseph J. Humire.
“Lo han estado construyendo gradualmente, sistemáticamente, durante muchos, muchos años, durante décadas”, dijo Humire recientemente al programa “China Insider” de EpochTV.
Humire dijo que el comercio y la inversión en la región han sido parte integral de los esfuerzos de Beijing en este sentido, pero este intercambio viene con condiciones.
“Esas condiciones son a menudo la pérdida de su soberanía, la pérdida en algunos casos de su territorio (…) y en algunos casos, China puede engañarlo para que los lleve a su órbita geopolítica”, señaló Humire, director ejecutivo del grupo de expertos en seguridad nacional, Center for a Secure Free Society.
China y Argentina profundizaron recientemente su relación al firmar un acuerdo en los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing el 6 de febrero, que agregó al país a la «Iniciativa de la Franja y la Ruta» de Beijing, un proyecto de inversión masiva en infraestructura destinado a expandir la influencia económica y política mundial de Beijing. Con este acuerdo, Argentina tomará UDS 23.7 mil millones en préstamos para el desarrollo de infraestructura china.
Compromisos de este tipo están permitiendo al régimen avanzar en su ambición militar, según Humire.
Para ilustrar este punto, señaló la estación de seguimiento de satélites controlada por militares chinos establecida en 2014 en la provincia de Neuquén, al noroeste de la Patagonia argentina. China ha afirmado que la estación espacial es para la observación y exploración espacial pacífica. Sin embargo, los analistas técnicos han denunciado que la instalación fue preparada para la guerra electrónica, según Humire.
“Eso significa que, en poco tiempo, tomarán satélites estadounidenses y los sacarán de órbita en América Latina (…) donde se supone que Estados Unidos tiene la mayor influencia”, dijo Humire en la Conferencia de Acción Política Conservadora en Orlando, Florida, el 26 de febrero.
El régimen chino busca utilizar a América Latina como palanca contra Estados Unidos, dijo el experto.
“Los chinos se están asegurando de que América Latina se convierta en un área inhóspita para que Estados Unidos comercie, viaje, y haga negocios”, dijo Humire.
“Eso es parte del cálculo estratégico para poder limitar la capacidad de Estados Unidos de frenar las ambiciones de China en su exterior cercano”, agregó.
La creciente influencia del régimen en la región se refleja en la relación cambiante de los países sudamericanos con Taiwán, un país con gobierno propio pero que Beijing considera como propia.
“Taiwán (…) tuvo un fuerte reconocimiento en América Latina durante décadas. China ha ido socavando ese reconocimiento con el tiempo”, dijo.
En consecuencia, algunos países como El Salvador y República Dominicana cambiaron su postura sobre Taiwán y reconocieron a China.
Mientras tanto, Guatemala y Paraguay siguen siendo fuertes aliados de Taiwán, pero están siendo presionados por China en todos los frentes para que abandonen ese reconocimiento, según Humire.
El experto cree que si China finalmente logra que esos dos países cambien su postura, entonces Beijing tomará acción para invadir Taiwán porque la isla estaría más aislada internacionalmente y sin apoyo.
Advirtió que dentro de cinco años, China se apoderará de América Latina e instó a Estados Unidos a “apurarse y detenerlos”.
“Mientras China esté en América Latina, siempre podrá realizar acciones más agresivas en el Indo-Pacífico”, dijo Humire.
“Y esa parte es una seria amenaza no solo para Estados Unidos, sino para el mundo occidental”, agregó.
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