Correos electrónicos recientemente obtenidos han revelado que científicos que trabajaban en el Instituto de Virología de Wuhan (WIV, por sus siglas en inglés), que ha estado en el punto de mira como posible zona cero del COVID-19, visitaron el instituto del Dr. Anthony Fauci en los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) en 2017, solo unos meses antes de que los NIH suspendieran una pausa en la investigación virológica de alto riesgo.
Se ha especulado mucho sobre el origen del virus SARS-CoV-2 desde que aparecieron los primeros casos de COVID-19 cerca del laboratorio de Wuhan a finales de 2019. Inicialmente, la hipótesis de que el COVID podría haber resultado de una fuga de laboratorio fue descartada por algunas figuras prominentes en el campo, incluido el Dr. Fauci. Sin embargo, muchos expertos perseveraron en sus análisis independientes, que tres años después han visto incluso cómo las agencias gubernamentales empiezan a admitir que una fuga de laboratorio sigue siendo una posible fuente del brote.
En correos electrónicos recientemente publicados y obtenidos por el grupo de investigación sin fines de lucro U.S. Right to Know a través de una demanda de la Ley de Libertad de Información contra el NIH, se reveló que la científica principal de WIV, Shi Zhengli, visitó el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés) en junio de 2017. Tenía programada una presentación sobre nuevos coronavirus. El NIAID es uno de los 27 institutos y centros que conforman los NIH, que a su vez son una agencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
La Sra. Shi investiga coronavirus similares al SARS de origen murciélago y dirige el Centro de Enfermedades Infecciosas Emergentes del WIV. Según los correos electrónicos, EcoHealth Alliance, una organización de investigación estadounidense sin ánimo de lucro que recibe fondos de los NIH y colabora estrechamente con el WIV, organizó la visita de la Sra. Shi al NIAID. EcoHealth Alliance también actuó en el pasado como intermediario entre el VIM y el NIAID, organizando la colaboración en proyectos y, en ocasiones, subcontratando el trabajo al laboratorio chino.
«Nuestra coinvestigadora china, Zhengli Shi, del Instituto de Virología de Wuhan, visitará Estados Unidos en junio para dar una charla en una conferencia aquí. Realmente me gustaría venir y visitarte a ti y a tus colegas en NIH con ella mientras esté aquí», dijo el presidente de EcoHealth Alliance, Peter Daszak, en un correo electrónico en abril de 2017.
Otros correos electrónicos muestran que la conferencia fue facturada como una sobre «SARS, MERS y el riesgo de aparición de nuevos virus en los murciélagos». El Sr. Daszak también habló durante la presentación. «Zhengli y yo haremos un doble acto», dijo en un correo electrónico discutiendo la conferencia.
Otro correo electrónico del 24 de mayo de 2017 mostraba al Sr. Daszak buscando autorización de seguridad para la Sra. Shi antes de su eventual visita de junio a los Estados Unidos. Peng Zhou, profesor asociado de WIV, también aparecía en la lista de personas que necesitaban autorización de seguridad para visitar el país y el instituto.
Según U.S. Right to Know, el control de seguridad de la Sra. Shi para la visita no se incluyó en los documentos que recibieron y sigue sin estar claro si el historial de vínculos del WIV con el ejército chino se tuvo en cuenta en su control.
El laboratorio de Wuhan trabajó con militares chinos
El WIV ha llevado a cabo proyectos de investigación para los militares chinos desde al menos 2017, según la inteligencia estadounidense. Una hoja informativa del Departamento de Estado de 2021 hace la misma afirmación. No se sabe si los vínculos de la Sra. Shi con los militares chinos fueron investigados como parte de su investigación de seguridad. Después de la presentación, el Sr. Daszak agradeció al oficial del programa NIAID Erik Stemmy en un correo electrónico del 29 de junio de 2017 y también mencionó que fue fantástico «presentarle a nuestros colaboradores personalmente».
Solo cuatro meses después, el Dr. Fauci se reunió con el Sr. Daszak por razones desconocidas. En una declaración jurada de 2022 ante los fiscales generales de Misuri y Luisiana, el Dr. Fauci afirmó que no recordaba la reunión. Incluso llegó a decir que nunca se habían cruzado, afirmando que había conocido a cientos de personas en reuniones científicas. Existe una foto del Dr. Fauci y el Sr. Daszak juntos, lo que demuestra que se han visto al menos una vez.
En diciembre de 2017, después de una pausa de tres años, los NIH reanudaron la financiación de la investigación de ganancia de función, que permitía a los científicos alterar la función de un virus para comprender mejor su ciclo de vida y evolución. Sin embargo, los críticos de este tipo de experimentos argumentaron en su momento que no eran seguros y que tenían el potencial de causar una pandemia. En el pasado, el Congreso ha celebrado audiencias sobre la decisión de los NIH de reanudar la investigación sobre la ganancia de función, así como sobre la conveniencia de colaborar con laboratorios con sede en China.
U.S. Right to Know especula que esta última colección de correos electrónicos, junto con la información publicada anteriormente, demuestra que el Dr. Fauci y sus principales colaboradores conocían la novedosa investigación sobre coronavirus que se estaba llevando a cabo en el WIV, a pesar de que afirmaran lo contrario. La organización sin ánimo de lucro también cuestiona cómo y por qué un experimento de virología que podría generar virus pandémicos se subcontrató a una nación rival, especialmente una que ha mantenido relaciones tensas con Estados Unidos de forma habitual.
La última publicación de información sobre los orígenes de COVID-19 se produce justo cuando está previsto que el Dr. Fauci preste declaración bajo juramento ante los investigadores del Congreso en una entrevista transcrita a puerta cerrada que se celebrará durante dos días, del 8 al 9 de enero. El tema de la audiencia abarcará los orígenes de COVID-19, la eficacia de los mandatos de vacunación y las formas de prevenir futuros brotes.
El año pasado, U.S. Right to Know publicó otra pila de correos electrónicos que revelaban que el Dr. Fauci, el Sr. Daszak y otro científico, el frecuente colaborador Ralph Baric, informaron a altos funcionarios de los servicios de inteligencia estadounidenses a principios de 2020 sobre los orígenes de COVID-19. Durante esa reunión y otras, se restó importancia a la posibilidad de que el COVID-19 se hubiera originado en un laboratorio.
En abril de ese mismo año, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional anunció que la comunidad de inteligencia había llegado a un consenso de que el COVID-19 no había sido fabricado por el hombre ni modificado genéticamente. Aunque, en la hoja informativa, se admitía que el virus podía proceder de «un accidente en un laboratorio de Wuhan».
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas y con el Dr. Anthony Fauci para recabar sus comentarios.
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