El número de personas que han muerto por el virus del PCCh superó el miércoles los 4 millones.
El recuento oficial de los datos gubernamentales no tiene en cuenta el número real de muertes por el virus en China, donde el régimen comunista ha hecho todo lo posible por suprimir la información relacionada con la propagación y el impacto del COVID-19.
COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus.
El número de víctimas fatales es aproximadamente igual al número de personas muertas en todas las guerras del mundo desde 1982, según las estimaciones del Instituto de Investigación para la Paz de Oslo. El total triplica el número de personas muertas en accidentes de tráfico en todo el mundo cada año.
La cantidad se acerca al total de la población de Los Ángeles, más de la mitad de la de Hong Kong y casi el 50 por ciento de Nueva York.
El consenso mayoritario es que la introducción y la amplia difusión de las vacunas contribuyeron a la disminución de las muertes diarias en el mundo, desde un pico de más de 18,000 en enero hasta aproximadamente 7900.
La mejoría se vio amortiguada por la propagación de la variante Delta del virus, que se cree que es más contagiosa. Un primer estudio realizado en Israel mostró que la eficacia de la vacuna de ARNm de Pfizer/BioNTech para prevenir la infección y los síntomas descendió del 94.5 por ciento al 64 por ciento, coincidiendo con la propagación de la variante Delta.
El Reino Unido registró esta semana un total diario de 30,000 nuevas infecciones, la cifra más alta desde enero, justo cuando el gobierno se preparaba para levantar las medidas de bloqueo.
Otros países volvieron a imponer medidas preventivas y las autoridades se apresuraron a intensificar la campaña de vacunación. En Estados Unidos, pocos gobiernos municipales emitieron nuevas restricciones por la variante del Delta. Días atrás, el Departamento de Salud Pública del condado de Los Ángeles pidió a los residentes que usen mascarillas aunque estén vacunados.
La Organización Mundial de la Salud también recomendó que la población se cubra la cara debido a la variante Delta, y algunos países, incluido Israel, ampliaron o reimpusieron los cierres.
Estados Unidos y otros países con recursos acordaron compartir al menos 1000 millones de dosis de vacunas con los países en dificultades.
Dejando a un lado las cifras poco fiables de China, Estados Unidos es el país con el mayor número de víctimas fatales en el mundo, al registrar más de 600,000 muertes, seguido de Brasil, con más de 520,000.
Las variantes del virus, el acceso desigual a las vacunas y la relajación de las precauciones en los países de más recursos son «una combinación nociva muy peligrosa», advirtió Ann Lindstrand, una de las principales responsables de inmunización de la Organización Mundial de la Salud.
Con información de The Associated Press.
Siga a Ivan en Twitter: @ivanpentchoukov
Siga a Ivan en Parler: @IvanPentchoukov
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.