El número total de personas que entraron ilegalmente en Estados Unidos desde que el presidente Joe Biden asumió el cargo ascendió a 5.5 millones, según la Federación para la Reforma Migratoria Estadounidense (FAIR).
Dan Stein, presidente de FAIR, compartió la sombría cifra durante una reciente entrevista en el programa Capitol Report de NTD, después del reciente anuncio del gobierno de Joe Biden de que en el año fiscal que terminó en septiembre se detuvo a casi 2.8 millones de personas que cruzaron ilegalmente la frontera, una cifra récord.
El número oficial total de personas que cruzaron ilegalmente la frontera se elevó a unos 4.4 millones desde que Biden asumió el cargo, según las cifras reveladas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP), tras una reciente operación de actualización.
La Federación para la Reforma Migratoria Estadounidense llegó al número de 5.5 millones, sumando a los 4,4 millones un estimado de 1.1 millones inmigrantes ilegales que lograron evadir la captura y entraron a Estados Unidos sin ser detectados, indicó Stein.
«Es bastante sincera», dijo a continuación al referirse al número estimado. «Hay proyecciones normales que se confirman con los datos del Censo de personas que simplemente huyen —los llaman ‘fugados’— que entran sin inspección y luego desaparecen».
«Si se mira todo el período, son unos 5.5 millones desde que Biden asumió al cargo», declaró Stein, añadiendo que además las proyecciones de FAIR estiman que el costo para los contribuyentes es de USD 20,000 millones.
Él culpó por el aumento de cruces ilegales al gobierno de Biden, por desmantelar las «estrategias de disuasión» de la era Trump a lo largo de la frontera.
La Casa Blanca no devolvió inmediatamente una solicitud de comentarios sobre las cifras citadas por Stein.
La CBP dijo que un aumento de la migración desde Venezuela, Cuba y Nicaragua en septiembre llevó el número de cruces ilegales al nivel más alto jamás registrado en un año fiscal.
Chris Magnus, comisionado de la CBP, dijo en una declaración que la agencia trabajaría con socios regionales para «abordar las causas fundamentales de la migración, ampliar las vías legales, facilitar las remociones y sacar a los miles de contrabandistas de las calles».
En septiembre se detuvo a casi 78,000 personas procedentes de Venezuela, Cuba y Nicaragua que intentaban cruzar la frontera ilegalmente, lo que supone un aumento del 245 % en comparación con el mismo mes del año anterior.
Esta cifra contrasta con los 58,000 inmigrantes ilegales procedentes de México y los tres países del norte de Centroamérica, que históricamente han representado la mayor parte del flujo, pero que se redujeron en un 23 % en comparación con septiembre de 2021.
Los republicanos, para quienes frenar el flujo de inmigración ilegal ha sido una prioridad y una plataforma de campaña clave de cara a las elecciones de medio mandato, han culpado de la afluencia récord de inmigrantes ilegales a las políticas de la administración Biden.
«Gracias a las imprudentes políticas de fronteras abiertas de @POTUS, los encuentros de inmigrantes en la Frontera Sur han superado los 2 millones en el año fiscal 2022 por primera vez en la historia», dijeron los republicanos del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes en un reciente posteo en Twitter.
«Aseguren la frontera. Fin de la cita. Repita la línea», añadieron.
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