El cirujano general de Estados Unidos le pedido al público «dejar de comprar máscaras», advirtiendo que esto podría provocar una escasez de trabajadores sanitarios y ponerlos efectivamente en peligro a ellos y a las comunidades.
El Cirujano General de Estados Unidos Jerome M. Adams hizo su sugerencia en varias publicaciones de Twitter el sábado mientras los estadounidenses se apresuran a comprar mascarillas faciales desechables y otros equipos de protección. La demanda de mascarillas está llevando a un aumento de los precios en las plataformas de compras online Amazon y eBay, por la escasez de estas.
«En serio, gente, ¡dejen de comprar mascarillas!» Escribió Adams en su publicación, agregando que las mascarillas «no son efectivas» para evitar que el público se contagie con el virus y que la falta de tal equipo de protección podría poner en riesgo a los trabajadores de la salud.
Adams añadió que la mejor manera en que el público se puede proteger de contraer el virus es mantener fuertes acciones preventivas como permanecer en casa cuando se está enfermo y lavarse las manos con agua y jabón.
Las observaciones del cirujano general hacen eco de las recomendaciones de los funcionarios de la Organización Mundial de la Salud (OMS), quienes también expresaron su preocupación por la falta de equipos de protección en todo el mundo.
«Nuestra principal preocupación aquí es asegurar que nuestros trabajadores de salud de primera línea estén protegidos y que tengan el equipo que necesitan para hacer su trabajo», dijo el Dr. Michael J. Ryan, director ejecutivo del programa de emergencia de salud de la OMS, durante una sesión informativa el viernes. «Así que cuando hablamos de equipos de protección y mascarillas, estamos hablando de ese material especializado tan específico que se necesita. Y eso está bajo una presión significativa».
Ryan dijo que las mascarillas pueden evitar que el portador transmita la enfermedad a otra persona, pero hay límites para evitar que una persona se infecte.
«No tener una mascarilla no necesariamente aumenta el riesgo de contraer esta enfermedad», dijo, y agregó que las medidas preventivas son la mejor manera de detener la propagación del virus.
Mientras tanto, las autoridades estadounidenses afirmaron el 29 de febrero que el riesgo de que el público estadounidense contraiga el virus sigue siendo bajo.
«El riesgo para el público estadounidense sigue siendo bajo. Deberíamos anticipar más casos, pero el riesgo para el público estadounidense sigue siendo bajo», dijo el Dr. Robert Redfield, director de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca. «El público estadounidense necesita seguir con su vida normal».
El presidente Donald Trump y el vicepresidente Mike Pence también compartieron una evaluación similar del riesgo del virus con los estadounidenses. Trump dijo que Estados Unidos se está preparado y han almacenado 43 millones de mascarillas y otros suministros.
Poco antes, el 29 de febrero, funcionarios de salud del estado de Washington confirmaron que una persona murió a causa del virus, convirtiéndose en el primer paciente que muere de la enfermedad en Estados Unidos.
El 28 de febrero, la cadena de farmacias CVS advirtió que podría haber una escasez temporal de desinfectante para manos y puso máscaras faciales N95 debido al aumento de la demanda en medio del brote, informó Axios. Walgreens también informó de una gran demanda de mascarillas y artículos de protección.
Zachary Stieber contribuyó con este informe.
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