Las experiencias fuera del cuerpo o experiencias cercanas a la muerte no son poco comunes, sin embargo aunque estos relatos sobrenaturales son innumerables, la ciencia todavía no puede explicar con suficiencia este fenómeno, dice el neurocirujano Dr. Eben Alexander. El prestigioso académico de Harvard terminó protagonizando la suya propia y desde que regresó, advierte que al igual que los demás también se siente diferente a como era antes.
Ahora «eres tan claro, tan concentrado, mucho más presente que nunca antes», le dijo el hijo mayor después de que el médico se recuperó del vívido momento cercano a la muerte. «Es como si hubiera una luz brillando dentro de ti”, le dijo el joven al notar el cambio.
Antecedentes
El Dr. Alexander ha sido académico de la Escuela de Medicina de Harvard, donde enseñó ciencias del cerebro; también es un científico y un reconocido neurocirujano.
No todos los días se escucha a alguien de tan estimada formación médica hablando de sus propias experiencias paranormales. El Dr. Alexander tiene un relato que seguramente a nadie le gustaría perderse.
Todo comenzó el 10 de noviembre de 2008, cuando se despertó a las 4:30 a.m. con un dolor de cabeza terrible. Muy pronto, el dolor se hizo insoportable. Lo llevaron de inmediato al hospital donde trabaja, donde los médicos determinaron que tenía meningoencefalitis, una infección cerebral, y se le dio un 2 por ciento de probabilidades de supervivencia.
El Cielo
«Después de ser colocado en un respirador artificial una luz bajó lentamente desde arriba, arrojando maravillosos filamentos de plata viva y destellos dorados», recordó el Dr. Alexander, quien en esos momentos cayó en un coma de tres días de duración.
«Era una entidad circular, que emitía música celestial a la que yo llamaba la Melodía Giratoria. La luz se abrió como una ráfaga, y me sentí yendo a través de la ráfaga, hacia un valle lleno de exuberante y fértil vegetación, donde las cascadas fluían en pozas de cristal», dijo a continuación.
«Había nubes, como nubes de malvavisco de colores rosa y blanco. Detrás de estas, el cielo era un rico azul-negro, con árboles, campos, animales y gente. También había agua, fluyendo en los ríos o descendiendo como lluvia. Las neblinas se elevaban de las pulsantes superficies de estas aguas, y los peces se deslizaban por debajo de ellas», siguió en su relato.
De hecho, experimentó mucho más, lo cual el académico documentó en varios libros que publicó después de su experiencia.
El regreso
Antes de que el Dr. Alexander regresara, los médicos le habían dicho a su familia que era hora de dejarlo morir. Cuando su hijo, que entonces tenía 10 años, se enteró de que estaba a punto de perder a su padre, corrió a abrirle los párpados y le gritó: «Papi, vas a estar bien».
El Dr. Alexander dijo que escuchó los llantos de su hijo.
«A través de las vastas extensiones del reino espiritual, sentí su presencia muy claramente …. y comencé a despertar», recuerda.
Su despertar del coma es considerado un milagro, ya que venció todas las probabilidades acumuladas en contra de su supervivencia.
Durante el tiempo que estuvo en coma, unas bacterias estaban alimentándose de la parte de su cerebro responsable del pensamiento y la emoción. Aún así, él podía recordar su experiencia fuera del cuerpo con gran detalle mientras que su cerebro en sí fue declarado no funcionante.
Con una amplia experiencia en neurociencia, el Dr. Alexander planteó una pregunta muy lógica, dado que su cerebro no era capaz de procesos de pensamiento complejos en ese estado comatoso, a la que la comunidad científica ha sido incapaz de dar una respuesta clara y experta.
«¿Cómo era que nuestras mentes estaban conscientes cuando nuestros cuerpos estaban efectivamente muertos y, en mi caso por lo menos, el cerebro había dejado de funcionar? y (entonces) ¿dónde están guardados estos brillantes e inmarcesibles recuerdos?», dijo el prestigioso académico de Harvard.
Aunque siempre habrá quienes creen y quienes no creen, el Dr. Alexander sugiere a las personas mantengan una mente abierta y «suspenda la incredulidad» por el momento al referirse a las experiencias fuera del cuerpo cercanas a la muerte.
El siguiente es un vídeo en profundidad de las experiencias del Dr. Alexander:
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